El Unicaja agrava los problemas del Valencia Basket
- Los andaluces demuestran su solidez en la cancha y se llevan la victoria (64-75)
- El Gipuzkoa casi deja escapar un partido que ganaba de 17 al descanso (82-75)
Un sólido Unicaja ha doblegado con autoridad al Valencia Basket en la Fuente de San Luis y agravó los problemas del conjunto valenciano, que acabó lleno de dudas y dio un paso atrás tras las buenas sensaciones que dejó en la pista del Olympiacos en la Euroliga.
El equipo malagueño supo llevar en el peso del encuentro. Con una defensa compacta, tuvo la paciencia necesaria en ataque para sacar provecho tanto de la inspiración de Will Thomas y de la movilidad de Kuzminskas como de la creciente ansiedad local.
El Valencia arrancó el choque más centrado pero una torcedura de tobillo de Romain Sato en una de las primeras acciones llevó a Perasovic a un carrusel de cambios que despistó a su equipo y permitió a Unicaja hacerse con la iniciativa con un par de tiros lejanos de Toolson (5-12, m.6). El regreso del centroafricano permitió al Valencia retomar su plan inicial y situar a Lucic de 'falso cuatro', lo que devolvió el equilibrio a su defensa. En ataque, la conexión entre Pau Ribas y un inspirado Bojan Dubljevic le dio la vuelta al choque (22-19, m.10).
La entrada de Nedovic dio a los locales una nueva referencia ofensiva pero al serbio, brillante en la resolución, le costó más dirigir al equipo. En cambio, Markovic, errático en el tiro, logró involucrar a sus compañeros y el Unicaja volvió a sentirse cómodo.
Pese a la resistencia que presentó Lucic durante unos minutos, al sentarse con tres faltas el serbio, el equipo malagueño terminó de hacerse con el dominio del encuentro antes del descanso aupado por su dominio del rebote y los puntos de Will Thomas (33-39, m.20). Al estadounidense se le unió su compatriota Green en el inicio del tercer cuarto y entre los dos ensancharon la brecha visitante en el marcador ante un Valencia sin ideas (36-51, m.24) y sin Sato, que ya no volvió a jugar. Cuando con un tiempo muerto retomó la calma, la falta de confianza en el tiro dejó sin premio su mejoría.
El Unicaja, con un juego sobrio y sacando provecho de las ventajas de Kuzminskas, mantuvo sin demasiados apuros el control del encuentro y aunque entre Rafa Martínez y Pau Ribas evitaron que se rompiera el encuentro, los malagueños encararon el último cuarto con una clara ventaja (48-60, m.30).
Los intentos locales de darle la vuelta al encuentro se estrellaron contra sus propios errores en el tiro y fueron castigados por Kuzminskas en el aro contrario, una dinámica que provocó las quejas de la Fonteta (51-67, m.34). Incapaz de poner en marcha un intento de reacción mínimamente solvente, el Valencia se limitó a maquillar su desventaja ante un rival mucho más maduro y afrontará con dudas el encuentro del viernes ante el Galatasaray en el que se juega muchas de sus opciones de pasar de ronda en la Euroliga.
El Gipuzkoa casi deja escapar el partido frente al Manresa
El Gipuzkoa Basket tuvo que sufrir para superar a un Bruixa D'Or Manresa que se fue al descanso perdiendo por 17 puntos, pero que tuvo opciones para ganar en los últimos minutos tras meterse en el partido en la segunda mitad.
Empezó fuerte Manresa con dos triples seguidos de Grigoris y, con mucha soltura en ataque, abrió una mínima brecha de seis puntos (8-13) que marcaba la iniciativa que quería llevar el equipo catalán.
Hanley logró el 31-22 al inicio de un segundo cuarto que resultaría demoledor para Bruixa, ya que a partir de ahí la distancia comenzó a hacerse cada vez más mayor en un partido que se presumía igualado.
El GBC obtuvo, cuando la renta superó los diez puntos, la confianza necesaria para pasar a dominar el choque, con Dean y Dani Díez llevando el peso anotador en este período, y exhibiendo los locales su defensa ante un Manresa que se estrellaba desde el triple e casi hipotecaba sus opciones de victoria al descanso (50-33).
Se durmió el equipo que entrena Jaume Ponsarnau en la segunda parte y ahí sí encontró el tiro de tres el quinteto de Manresa que con, Grigoris como estrella, empató el partido gracias a la muñeca caliente del lituano (7 de 10 triples).
En el tramo final del partido los catalanes llegaron a tener a favor mínimas rentas e hicieron que afloraran los fantasmas de Illunbe cuando el público había visto tan cerca la victoria (62-64).
Una reacción a tiempo del GBC (78-73) le dejó con una renta de seis en el último minuto que no pudo acortar Gregori tras fallar dos tiros libres. Ahí acabaría el partido y los vascos lograrían una muy sufrida victoria para dejar el farolillo rojo de la Liga Endesa al Manresa.