Ramos guía al Madrid desde la Décima a su primer Mundial de Clubes

• El central, duda los días previos, abre el camino a la victoria en la final
• Los blancos se imponen al San Lorenzo por 2-0 con goles del central y Bale
• Es el primer Mundialito del Madrid, triple campeón de la extinta Intercontinental
• Datos y estadísticas del Real Madrid 2 - San Lorenzo 0

Los jugadores del Real Madrid posan con el trofeo de campeones del Mundial de Clubes

Ficha técnica:

2 - Real Madrid: Casillas; Carvajal (Arbeloa, m.73), Pepe, Sergio Ramos (Varane, m.89), Marcelo (Coentrao, m.43); Kroos, Isco, James; Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema.

0 - San Lorenzo: Sebastián Torrico; Julio Buffarini, Yepes (Cetto, m.61), Kannemann, Emmanuel Más; Néstor Ortigoza, Juan Mercier; Enzo Kalinski, Gonzalo Verón (Romagnoli, m.57), Pablo Barrientos; y Martín Cauteruccio (Matos, m.68).

Goles: 1-0, m.37: Ramos. 2-0, m.51: Bale.

Árbitro: Walter López (Guatemala). Amonestó a Ramos (22), Carvajal (30) por el Real Madrid; y a Ortigoza (12), Barrientos (16), Buffarini (55) y Kannemann (85) por San Lorenzo.

Incidencias: final del Mundial de Clubes disputado en el Gran Estadio de Marraquech, con 38.345 seguidores en sus gradas.

El Real Madrid derrota al San Lorenzo (2-0) en la final del Mundial de Clubes de la FIFA. El campeón de Europa más laureado logra su primer Mundialito en el año de la Décima. Cuarto título de 2014 para el conjunto que entrena Carlo Ancelotti.

Tuvo que ser el héroe de aquella final el que abriera camino, igual que en el pasado 24 de mayo; pasado muy reciente en la retina de los aficionados madridistas. Sergio Ramos, que era duda los días previos, jugó de inicio y marcó el primero. Bale remachó el resultado.

El defensa de Camas (Sevilla) se llevó el Balón de Oro del torneo y Cristiano Ronaldo el de plata. Un justo premio al esfuerzo, sobre todo para el primero.

Con la duda del central resuelta, Carlo Ancelotti se decidió por el once de gala; dicho once incluía también al colombiano James Rodríguez, que se perdió la semifinal contra el Cruz Azul.

El Madrid quiso ir a por el partido desde el principio y a punto estuvo de marcar en el primer minuto si a Benzema no se le clava la bota en el césped en un gran envío de Cristiano Ronaldo. También demostró desde el pítido inicial su actitud San Lorenzo, provocando la protesta de Kroos y CR7 por la dureza.

Once minutos tan solo tardó el guatemalteco Walter López en enseñar la primera amarilla, para Ortigoza por una dura entrada a Ramos. Las consiguientes tánganas no se hicieron esperar. El 'Ciclón' parecía haber salido a no dejar que se jugara al fútbol.

El astuto técnico argentino Bauzá había dispuesto un enrevesado 4-1-4-1 con el que no dejaba que el Madrid corriera, condición sine qua non el conjunto blanco no se ve tan arrollador como en partidos anteriores.

La cabeza providencial de Ramos

Desde la primera no rematada por Benzema, al Madrid le costó llegar con claridad y generar ocasiones dentro del área. En una de las pocas contras pudo disparar Bale y forzar el saque de esquina. Ahí llegó el héroe de la Décima, Sergio Ramos, rematando el envío de Kroos (minuto 36).

El gol era otro panorama. Obligaba a San Lorenzo a poner más argumentos y más agresividad, pero de otro tipo porque la táctica anterior no había salido bien. Intentar llegar al área del Madrid combinando, tampoco.

La única mala noticia para el conjunto de Ancelotti en la primera parte fue la inoportuna lesión de Marcelo, que tuvo que ser sustituido por Coentrao poco antes del descanso.

Tampoco era una maravilla el fútbol que practicaba el Madrid, pero al menos lo intentaba. Con el marcador a favor y la necesidad de los argentinos le dio algo más de espacio para correr.

Nada más reanudarse el encuentro llegó el segundo, con algo de ayuda del meta Torrico. Isco ve a Bale solo, en un fallo claro de marcaje, y el galés a la media vuelta la cuela por debajo de las axilas del portero (minuto 50).

Primeras paradas de Casillas

Tardé llegó el intento de reacción de San Lorenzo. Un tiro de Kalinski por encima del larguero como respuesta y la entrada de Romagnoli por Verón desde el banquillo. El partido ya estaba en el terreno en que mejor se movía el Madrid y Benzema provaba fortuna desde fuera del área.

Hasta el minuto 65 no llegó la primera parada de dificultad para Casillas, que reaccionó bien a un disparo raso de Barrientos. Sus intentos de presionar la salida del balón daban más espacios a los blancos, justo lo que andaban buscando en los primeros minutos. De nuevo Benzema tuvo en sus botas el tercero a pase de Bale.

Tanto acercamiento llevaba peligro a la portería de Torrico, pero también a los tobillos de los atacantes madridistas. De nuevo tuvieron que llevarse las manos a la zona dolorida algunos como Cristiano o Kroos. A medida que se acercaba el final del partido, la frustración aumentaba en las filas del 'Ciclón'.

Ni el de la honra concedió Casillas a dos buenos disparos lejanos. El capitán quería esta vez estar al nivel de su amigo Ramos y ganarse el derecho a levantar el primer Mundialito del Real Madrid. Pero el central fue el que se llevó la ovación al ser sustituido por Varane a dos minutos del final. Así reconocía Ancelotti el esfuerzo del camero para llegar a la final.