Vives y Ribas dan brillo al Valencia Basket, que roza la Copa del Rey
- El equipo levantino se impone al Iberostar Tenerife por 98-80
- El Valencia despegó cuando coincidieron en la pista Vives y Ribas
Ficha técnica:
98 - Valencia Basket (22+18+30+28): Vives (11), Van Rossom (8), Sato (2), Harangody (15), Loncar (14) -cinco titular-, Ribas (16), Nedovic (5), Lucic (7), Dubljevic (11), Rafa Martínez (-) y Aguilar (9).
80 - Iberostar Tenerife (17+20+20+23): Uriz (3), Richotti (12), Beirán (2), Sikma (12), Sekulic (7) -cinco titular-, Tsairelis (13), Heras (3), Blanco (18), Lampropoulos (2) y Rost (8).
Árbitros: Cortés, Peruga y Aliaga. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la décimo quinta jornada de la Liga Endesa disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 8.400 espectadores.
El Valencia Basket ha firmado una trabajada victoria ante el Iberostar Tenerife en un encuentro en el que Guillem Vives y Pau Ribas sacaron brillo en la segunda parte al rigor con el que jugó el conjunto valenciano, que sumó un triunfo que le acerca a la Copa del Rey a costa de las últimas opciones del equipo canario.
Tras resistir el asedio del equipo tinerfeño en la primera parte, el conjunto valenciano rompió el choque tras el descanso con una agobiante defensa que dejó sin espacio a su rival, le permitió correr y le dio confianza para pulir sus ataques estáticos.
En el arranque, el talento del escurridizo Richiotti y la buena labor de sus interiores cargando el rebote ofensivo permitió al Tenerife seguir el ritmo de un ordenado Valencia Basket, que con dos bases en la pista siempre supo dónde llevar el balón (22-17, m.10).
El equipo canario, con Heras supliendo con solvencia al lesionado San Miguel, supo escapar de la pegajosa defensa de los locales con buenos cortes hacia la canasta de sus jugadores sin balón que minaron la moral de los jugadores de Valencia. Fue el atrevido Tsairelis el que más daño hizo y el que mantuvo a los locales en el partido (35-30, m. 17).
La clarividencia de Pau Ribas dio tranquilidad al Valencia, pero la agresividad defensiva del Tenerife fue de menos a más y la falta de acierto de Dubljevic lastró a los locales que, aunque mantuvieron el control del choque, se fueron al descanso con una exigua renta (40-37, m.20).
Vives y Ribas, juntos
Tras el descanso, Velimir Perasovic juntó en la pista a Guillem Vives y a Ribas y el Valencia despegó. Con mayor presión sobre el balón, pudo correr y ganar confianza para sus ataques estáticos y, con Harangody certero en el tiro, firmó un parcial de 16-2 que le permitió abrir brecha en el marcador (56-39, m.24).
Viendo que se le escapaba el partido, el Tenerife se desubicó. Dos técnicas, una por protestar a su entrenador y otra por simular a Sikma, parecieron rematar al conjunto de Alejandro Martínez.
Pero el orgullo de Saúl Blanco y un par de contraataques evitaron que los visitantes se quedaran sin ninguna opción antes del último cuarto (70-57, m.30) y tras superar ese mal momento se agarraron al partido con un par de triples de Rost sin importarle demasiado que su desventaja siguiera por encima de los diez puntos.
Viendo que el Tenerife no se desenganchaba del encuentro, Perasovic recuperó a la dupla Vives-Ribas para evitar sobresaltos. Lo logró, en parte también porque Lucic y Loncar mantuvieron el listón físico y dejaron sin opción de remontada a los visitantes.