El Barça coge aire en el Top 16; Spanoulis sentencia al Baskonia

• El cuadro azulgrana se impone al Estrella Roja de Belgrado por 92-77
• El Olympiacos hace encajar al Laboral Kutxa su tercera derrota (76-64)

El base estadounidense del Estrella Roja de Belgrado Marcus Williams (d) controla el balón ante la presión de Marcelinho Huertas

El Barcelona completó un partido coral ante el Estrella Roja de Belgrado (92-77) y logró una victoria balsámica con la que respira algo más tranquilo después de las dos derrotas que, como visitante, cosechó en el Top 16 de la Euroliga.

Hasta seis jugadores azulgranas -Doellman (11), Hezonja (12), Huertas (11), Abrines (15), Thomas (10) y Tomic (12)- lograron anotar más de diez puntos, un equilibrio que sirvió para sobreponerse a los 2,21 metros de Boban Marjanovic y el acierto de Blazic, máximo anotador de los serbios.

Necesitaba el Barcelona la victoria en el Palau Blaugrana para no complicarse la vida en el Top 16 y la logró con mucho trabajo, a pesar del resultado final.

Lejos de especular, ambos equipos completaron un primer periodo ofensivo, atractivo para el espectador, en el que la igualdad en el marcador reinó en los primeros ocho minutos. Luego, los azulgranas lograron un parcial de 8-0.

Como era de esperar, Dejan Radjonic buscó la superioridad de los 2,21 metros de Boban Marjanovic, que puso en aprietos a Tomic, si bien encontró también equilibrio ofensivo entre los hombres que formaron el quinteto inicial con Mitrovic y Williams como escuderos del 'gigantón'.

En el cuadro de Pascual, Doellman -autor de siete puntos en el primer cuarto- lideró a los suyos antes de que dos triples consecutivos de Satoransky y Thomas acabaran con la igualdad (27-21 min.10).

Menos abierto fue el segundo periodo. Se endurecieron las defensas y el partido se volvió a igualar. Los locales, bloqueados por la intensidad de su rival, estuvieron tres minutos sin ver aro, mientras que el equipo serbio, de la mano de Mitrovic y Jovic, ponían en aprietos a los exteriores azulgranas.

Un triple de Kalinici puso el empate a 34 (min. 16). Parecía que al Barça le tocaría sudar para sacar adelante el partido, pero un parcial de 10-0 con dos triples de Abrines y Hezonja, y la colaboración interior de Tomic y Doellman, dejaban el partido encarado para los de Pascual al filo del descanso (49-38).

Fiel a su genética balcánica, los visitantes no se dejaron i, tras la reanudación y, si bien no lograron rebajar la diferencia en el marcador -el parcial fue de 21-21-, obligaron a los de Pascual a mantenerse concentrados.

Mandaba Marjanovic bajo los aros, mientras Mitrovic, Blazic y Lazic suplían con garra y coraje el desequilibrio exterior de Williams, ausente en el tercer cuarto.

Los azulgranas apostaron por el colectivo para evitar sorpresas. En ese juego, Thomas se siente como pez en el agua y su coraje sirvió como ejemplo para sus compañeros.

Afrontaban los azulgranas los últimos diez minutos con una ventaja suficiente para llevase el duelo sin problemas. Los serbios, de la mano de Jovic, lograron bajar de la barrera psicológica de los nueve puntos (72-63, min.32).

No quería sorpresas el Barcelona y los jóvenes emergieron para endosar un 7-0 definitivo. Dos canastas de Hezonja -una de ellas culminando un espectacular mate- y otro triple de Abrines acabaron con las esperanza del Estrella Roja (79-63, min.35).

Respira el Barcelona, que suma su segunda victoria en un Top 16 en el que su asignatura pendiente es ganar a domicilio, algo imprescindible si quiere clasificarse para los cuartos de final de la competición.

Spanoulis lidera al Olympiacos ante el Baskonia

El Laboral Kutxa Vitoria continúa exhibiendo irregularidad en su periplo por el 'Top 16' de la Euroliga, al verse doblegado este viernes (76-64) en su visita a la cancha del Olympiacos, y tras un encuentro en el que Vassilis Spanoulis ayudó a los griegos a sellar -con 27 puntos y 6 asistencias- una nueva derrota del club vasco.

Después de esta abultada derrota, el Baskonia sigue sin encontrar su filón de juego, con un balance negativo de partidos (1-3) y merodeando las últimas posiciones del grupo F. Cuatro jornadas se llevan disputadas en esta segunda fase de la máxima competición europea y en ninguna de ellas los pupilos de Ibon Navarro han mostrado verdadera sensación de poderío.

Los baskonistas empezaron con ímpetu el exigente duelo en el Pabellón de la Paz y la Amistad, tratando de exponer virtudes en lugar de dudas. Eso se tradujo en un parcial inaugural de 2-7, neutralizado con rapidez por parte de los griegos. El perenne Vassilis Spanoulis pretendía coger las riendas del choque desde los primeros compases, aunque esta vez quizá con menos brío del que se espera en un jugador de su reputada experiencia.

El equilibrio se mantuvo durante un prudente primer cuarto, que concluyó con mínima ventaja visitante (17-18) y dejó abiertas las expectativas para el segundo acto. Fue ahí cuando el Laboral Kutxa dio un golpe sobre la mesa, arrancando con un parcial de 0-5 y poniendo algo de tierra de por medio. Sin prisas, con ese temple tan extrañado en otras ocasiones, el equipo vitoriano amplió su diferencia en el marcador.

Aunque ambos conjuntos sabían que la distancia en el tanteador respondía más bien al demérito del Olympiacos, sobre todo desde la línea del triple. El club heleno tan solo había firmado una canasta de tres puntos, obra de Brent Petway, al término de la primera mitad. Un discreto 28-37 figuraba en el electrónico del pabellón de El Pireo al descanso, con Spanoulis aún agazapado.

Si bien el base del Olympiacos no había mostrado todo su potencial, Spanoulis aprovechó al regreso de los vestuarios para recordar a sus detractores que él es el sempiterno guía espiritual de su equipo. Lideró a sus compañeros a vencer el tercer cuarto por 26-16, contrarrestando la desventaja ateniense y dejando lo mejor para el cuarto periodo.

El Olympiacos se había quitado de un plumazo la pereza ofensiva, enriqueciendo su estadística en el lanzamiento exterior y mejorando notablemente sus guarismos con el triple. El Laboral Kutxa perdió el Norte y no dejó vislumbrar el buen sabor de boca de la primera parte del encuentro.

Lo cierto es que no aparecieron los buenos 'actores secundarios' que ostenta la plantilla griega, algo que sin embargo no fue necesario para que abrochasen el triunfo final por un resultado de 76-64. El pívot estadounidense Othello Hunter, dentro de la 'pintura' rival, auspició la buena labora ofensiva de Spanoulis desde lejos.

Entre ambos jugadores, el Olympiacos certificó su cuarta victoria en este 'Top 16', empatando en las primeras plazas con el CSKA de Moscú y dejando al Baskonia con sensaciones mustias de cara a futuros compromisos en esta, cada vez más severa, segunda fase del máximo torneo continental.