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Mundial de balonmano | España 22 - Francia 26

España cae derrotada ante Francia y peleará por el bronce mundialista

  • El equipo galo vuelve a dejar fuera de un gran torneo a España (22-26)
  • España se jugará el bronce contra Polonia y Francia el oro contra Catar
  • El Mundial por dentro, en el videoblog de Albert Rocas

Por
Francia vuelve a cruzarse en los planes de oro de España

- Ficha técnica:

22 - España: Pérez de Vargas; Víctor Tomás (2), Maqueda (2), Raúl Entrerríos (-), Cañellas (5), Rivera (3, 2p) y Aginagalde (1) -equipo inicial- Sierra (ps), Rocas (2), Ugalde (5), Andreu (-), Chema Rodríguez (-), Morros (-), Antonio García (-), Gedeón Guardiola (-) y Dujshebaev (2)

26 - Francia: Omeyer; Porte (4), Barachet (2), Luka Karabatic (-), Nikola Karabatic (3), Sorhaindo (4) y Guigou (5) -equipo inicial- Dumoulin (ps), Fernández (-), Anic (-), Narcisse (4), Joli (3p), Nyokas (-), Mahe (-), Grebille (1) y Accambray (-)

Marcador cada cinco minutos: 3-3, 6-8, 7-12, 11-13, 13-16 y 14-18 (Descanso) 16-18, 18-19, 18-20, 20-22, 22-24 y 22-26 (Final)

Árbitros: Krstic y Ljubic (SLO). Excluyeron por dos minutos a Aginagalde, Maqueda y Morros por España; y a Barachet (2) y Sorhaindo por Francia.

Incidencias: Segunda semifinal del Campeonato del Mudo de balonmano de Catar 2015 disputada en el Lusail Hall de Doha ante unos 8.000 espectadores.

La selección española de balonmano no podrá luchar por la medalla de oro en el Mundial de Balonmano de Catar 2015. El equipo de Manolo Cadenas ha vuelto a estrellarse contra Francia en un gran torneo y peleará por el bronce después de caer derrotado a manos de los galos 22-26.

Una primera parte impropia de una semifinal y las paradas del portero galo Omeyer obligan a los Hispanos a jugar la final de consolación contra Polonia. Francia jugará la final contra la anfitriona Catar.

Mala primera parte de los Hispanos

Cita por todo lo alto la que acogía el Lusail Multipurpose Hall de Doha. No en vano, frente a frente estaban dos equipos que se han llevado cuatro de los últimos cinco Mundiales (dos para cada selección).

Fruto de la envergadura del choque fueron los nervios que se vieron en las primeras jugadas del choque. Ese extraño comienzo dio paso a unos primeros diez minutos frenéticos en los que el partido fue todo un correcalles (6-8).

Esa situación si a alguien perjudicaba era a España. Los de Manolo Cadenas no podían ajustar su defensa —principal virtud hispana— y en ataque se mostraban demasiado impacientes. De ahí que el técnico leonés tratara de cambiar la tendencia al pasar de una defensa 6-0 a un 5-1, con Victor Tomás en el avanzado primero y Cristian Ugalde después.

Fueron momentos difíciles para España y muy plácidos para Francia. Los de Onesta llegaron a tener una ventaja máxima de hasta cinco goles (7-12).

Los Hispanos lograron ajustar su defensa pero no era suficiente con eso para detener al vendaval galo. Además, el ataque español no hilaba fino y el juego combinativo, que había maravillado a lo largo del torneo, brillaba por su ausencia. El marcador al fin de la primera parte reflejaba la crisis por la que pasaban los vigentes campeones del mundo: 14-18.

España se levanta pero aparece Omeyer

La consigna para la segunda mitad era clara. Había que hacer funcionar la defensa 6-0 clásica de los Hispanos, había que tener paciencia en ataque hasta encontrar el pase acertado y tenía que aparecer Julen Aginagalde (el irundarra se fue al descanso con cero goles y una exclusión).

Dos recuperaciones en defensa consecutivas de España propiciaron dos goles de Ugalde que dieron esperanzas (16-18). A esto se unió el primer gol de Julen (17-19) y las primeras imprecisiones en el ataque francés.

En el minuto 37 se produjo una jugada clave. Los árbitros anularon el gol del empate a 19 a Chema Rodríguez y en la siguiente jugada sancionó con dos minutos a Maqueda. Para más inri, cuando volvía el quereño a pista la exclusión le cayó a Viran Morros. Todo un reto de dimensiones mayúsculas en el que España supo mantener la desventaja intacta (18-19) —a destacar el mérito de Gonzalo Pérez de Vargas en esa empresa—.

Ese momento de partido pudo haber sido un punto de inflexión que insuflara ánimo a los Hispanos el subir el empate al marcador fue misión imposible. Enfrente estaba la todopoderosa Francia y el infranqueable portero Thierry Omeyer. El galo cosechó la friolera de 23 paradas en todo el partido.

Las intentonas finales de los españoles acabaron por estrellarse todas contra el muro Omeyer y la ventaja de Francia se fue a los cuatro goles en el último minuto. Se repetía de nuevo la historia de los JJOO de Londres y del Europeo de Dinamarca 2014.