Paso atrás del Atlético en Balaídos

• Tras golear al Madrid la jornada anterior, los rojiblancos caen ante el Celta 2-0
• Nolito y Orellana logran el premio para un voluntarioso conjunto vigués
• El equipo de Simeone vuelve a verse a siete puntos del liderato
• Datos y estadísticas del Celta de Vigo 2 - Atlético de Madrid 0

Celta 2 - Atlético 0

Ficha técnica:

2 - Celta de Vigo: Sergio Álvarez, Sergi Gómez, Cabral, Fontás, Jonny; Radoja, Krohn-Dehli (Alex López, min.90), Augusto; Nolito, Orellana (Santi Mina, min.90) y Larivey (Hernández, min.75).

0 - Atlético de Madrid: Moyá; Juanfran, Miranda, Godín, Siqueira; Griezmann, Gabi (Giménez, min.72), Thiago (Mario Suárez, min.33), Saúl; Fernando Torres (Cani, min.46) y Mandzukic.

Goles: 1-0. m. 57, Nolito, de penalti. 2-0: m. 71, Orellana.

Árbitro: Martínez Munuera (colegio valenciano). Amonestó a Mario Suárez, Mandzukic y Cani por parte del Atlético de Madrid.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigesimotercera jornada de la liga BBVA, disputado en el estadio municipal de Balaídos ante 22.099 espectadores.

El Atlético de Madrid deshace lo andado. El conjunto rojiblanco cae en Balaídos ante el Celta de Vigo (2-0) y vuelve a verse a siete puntos del líder, el Real Madrid, una semana después de haber arrollado a los blancos en el derbi.

Nolito, de penalti, y Orellana dieron el premio a un voluntarioso equipo local, que supo plantarle cara a los campeones de Liga como hicieran en la primera vuelta (2-2). Para los vigueses es su tercera victoria consecutiva, un logro y una inyección de moral en la temporada.

En un duelo de equipos con dos estilos similares, impresos desde la personalidad de sus entrenadores -Eduarto 'Toto' Berizzo y Diego Pablo 'Cholo' Simeone-, se impuso el que mejor supo aprovechar su momento.

Simeone cumplió lo dicho en rueda de prensa y salió con Torres y Griezmann, junto a Mandzukic, aunque más bien con el francés pegado a la derecha y un sistema 4-4-2.

Durante la primera media hora de partido el partido estuvo en manos -en las botas- del Celta, que se adapto mejor a la humedad del terreno y supo encerrar al Atlético en la frontal.

Solo faltaron ocasiones claras, aunque la velocidad de Nolito estuvo a punto de causar estragos en la zaga rojiblanca. Simeone no lo veía claro y empezó a hacer cambios sin esperar al descanso, aunque la entrada a Mario Suárez por Tiago fue por sobrecarga en el gemelo izquierdo del luso, como se supo después.

Pero eso no frenó el ímpetu del Celta, dirigido por el Toto desde una cabina de Balaídos por sanción. El conjunto vigués siguió llevando la iniciativa y solo el descanso frenó sus acometidas.

El Celta rompe el partido

Simeone seguía sin verlo claro y en el descanso hizo vestirse de chándal a Torres para dar entrada de corto a Cani, un centrocampista nato. Así Griezmann pasaba a su posición natural y en la primera que tuvo casi conecta un buen pase a Mandzukic.

El Atlético se había recompuesto en parte y parecía tener mejor presencia ofensiva, pero al mismo tiempo estiró el campo y en una contra -precedida de una posible mano de Augusto- llegó el penalti de Mario Suárez sobre Nolito, que este mismo se encargó de transformar (minuto 59).

El acierto en la definición del delantero internacional español contrastó con el fallo del argentino Larrivey en la siguiente jugada, quien recibió un 'centro-chut' de Nolito con la portería vacía y la mandó desviada al colocar mal el pie cuando solo tenía que empujar.

Con los relevos del Atleti y el gol de Nolito, definitivamente cambió la fisonomía del partido y se vio al fin fútbol. Sobre todo, se vieron ocasiones para los visitantes, la más clara un disparo de Griezmann tras la internada de Mario, que detuvo el meta Sergio mostrando reflejos.

Sin embargo, el fútbol de ida y vuelta favoreció al Celta cuando el chileno Orellana, otro de los más activos, recibió un buen balón de Krohn Dehli a su internada por la derecha y la cruzó de forma inapelable (minuto 71).

Para colmo de males colchoneros, las decisiones de Martínez Munuera -fueran o no acertadas- no iban a su favor, puesto que si el colegiado vio penalti en el derribo de Nolito, no interpretó lo mismo en una caída de Siqueira dentro del área celtinha.

Incluso se vio en apuros para que el Celta no aumentara la diferencia, como en una gran intervención de Moyá a disparo de Orellana en el tiempo añadido.

El Atlético iba, minuto a minuto -como el partido a partido- haciéndose consciente de que se le escapaba el partido y, tal vez, el crédito logrado siete días antes contra el eterno rival.