La puntería lastra la transición de Del Bosque

• La Roja revivió viejos fantasmas ante Holanda y perdió por 2-0
• España tuvo ocasiones para haber empatado, pero hay sequía de goles
• Los primeros 15 minutos, para olvidar, marcaron el resto del partido
• Crónica: Holanda 2 - España 0, por Felipe Fernández

Álvaro Morata es una de las grandes esperanzas de gol para España.

La selección española de fútbol volvió a perder ante Holanda (2-0), esta vez un amistoso con sabor a una revancha que no se llegó a plasmar en el marcador. Dos goles tempraneros de los 'oranjes' hicieron temer lo peor, aunque al final la sangre no llegó al río, ni tampoco los goles de la Roja, su gran asignatura pendiente en esta nueva etapa.

La Roja carece de gol

A pesar de un mal inicio de partido, dos goles en 15 minutos, que hizo regresar a los fantasmas del 5-2 del Mundial de Brasil, España supo reponerse con múltiples ocasiones, pero ni Pedro ni Juanmi, en la primera parte, ni Morata ni Vitolo, en la segunda, encontraron el camino al gol, y eso que rondó en varias ocasiones la portería rival. La Roja tiene facilidad para meterse hasta el área pequeña, sobre todo cuando juega con Silva e Iniesta, pero Del Bosque sigue sin dar con la tecla de ese delantero que marque las diferencias en partidos como este.

Un comienzo para olvidar y dos tantos en 15 minutos

España salió con muchos cambios en el once inicial y le pasó factura en los primeros 15 minutos ante Holanda, que le hizo dos goles muy fáciles a una defensa que no supo estar a la altura. Los dos goles llegaron por falta de intensidad atrás.

La defensa española se perdió en las segundas jugadas

Casi todas las acciones de ataque de los holadeses, incluido los dos goles, se sucedieron de segunda jugada. Los zagueros, Piqué y Albiol en la primera parte, no supieron leer los balones rebotados y tampoco ayudó Mario Suárez, que no ayudó en las tareas defensivas.

Isco bajó el nivel

Solo Isco y Piqué repetían en el once que alineó Del Bosque ante Holanda, síntoma de las esperanzas que tiene depositadas el salmantino en el jugador del Real Madrid. A diferencia del otro día ante Ucrania, esta vez Isco no ha rendido al nivel esperado y se ha perdido mucho jugando en zonas más retrasadas del campo. Fue uno de los primeros sustituidos por Del Bosque.

Silva, Vitolo y Morata mejoran la imagen de España

La entrada en escena de Silva, Vitolo, debutante con la Roja, y Morata cambió el panorama del juego español, mucho más incisivo y dominante. El centrocampista canario dio ese paso adelante que no fue capaz de dar Isco para romper las líneas 'oranjes' y creó multiples ocasiones de gol. Mientras, el jugador del Sevilla demostró que está a un gran nivel y tuvo mucha presencia para ser su primer partido con la Roja, se nota que la eslástica no le viene grande. También Morata, esta vez no vio puerta, hizo que el combinado rojo mejorase. El ariete de la 'Juve' peleó con los centrales, tiró desmarques y jugó perfecto de espaldas. Morata promete como un fijo de Del Bosque.

Memphis Depay, clave para los holandeses

El talentoso extremo holandés fue un aténtico dolor de cabeza para España. Participó en todas las opciones de peligro del combinado de Hiddink y también estuvo soberbio en tareas defensivas, dando cobertura a sus zagueros. El PSV tiene una joya que se rifarán los grandes clubes europeos.

Fábregas sigue sin encontrar su sitio en la Roja

Del Bosque sigue confiando en el jugador del Chelsea, pero Fábregas, que salió de titular, no estuvo a la altura del encuentro y tampoco supo capitanear al equipo en los momentos más difíciles. La falta de presencia en las alineaciones habituales del salmantino parece pasarle fatura. Fábregas es uno de los hombres importantes de Mourinho en el Chelsea, esa puede ser la gran diferencia. Hay jugadores que necesitan sentirse importantes para rendir al máximo.

Pitos a Iniesta

Ningún aficionado español olvidará el minuto 116 de la prórroga de la final del Mundial de Brasil, pero tampoco nigún seguidor holandés. Ese momento fue el de la gloria para la Roja, con el gol de Iniesta, que valió la primera estrella en el pecho de España, pero también significó la tercera final mundialista perdida por Holanda. El de Fuentealbilla salió a falta de 15 minutos para la conclusión y el público le pitó, síntoma de que todavía no se han olvidado del dolor que les causó aquel derechazo.