México, primer eliminada de la Copa América mientras Chile fulmina a Bolivia
- El combinado Mexicano se despide del campeonato con un 1-2
- Ecuador busca clasificarse con una de las dos plazas a los mejores terceros
- Chile gana a Bolivia 5-0 y se clasifica a cuartos como líder del grupo A
México se ha convertido este viernes en la primera selección eliminada de la Copa América al perder el partido que no podía, por 1-2 ante Ecuador, que con este triunfo queda ahora pendiendo de una suerte de milagro para alcanzar una de las dos plazas reservadas a los dos mejores terceros de la fase de grupos.
Con este resultado, automáticamente han clasificado a los cuartos de final los otros componentes de este grupo A, Chile y Bolivia. La selección anfitriona ha pasado a cuartos como primera de grupo tras vencer con un contundente 5-0 a Bolivia.
Miller Bolaños y Enner Valencia pusieron adelante a Ecuador con sendos goles a los 25 y 58 minutos y Raúl Jiménez recortó distancia con un penalti ejecutado a los 63 minutos.
Ecuador desató en el primer tiempo todo el fútbol que no mostró en sus dos primeras presentaciones, que terminaron con sendas derrotas ante Chile (2-0) y Bolivia (2-3).
México, que en el debut empató sin goles con Bolivia y en la segunda jornada selló un 3-3 con Chile, fue superado desde el pitido inicial, y a los dos minutos el portero Jesús Corona ya había neutralizado una acción de Bolaños. Segundos después el horizontal escupió un cabezazo del mismo delantero del Emelec.
El segundo tiempo planteó un duelo abierto y con múltiples opciones en ambas porterías. México y Ecuador necesitaban ganar para apuntalar su paso a la fase de los ocho mejores.
Dado que la única vía para pasar Ecuador es desde el puesto de tercero de grupo, este viernes necesitaba sacar una diferencia amplia de goles para mejorar su saldo. Su victoria estrecha le obliga a esperar el desenlace en los grupos B y C.
Chile pasa a cuartos líder de grupo
En el encuentro entre Chile y Ecuador estaba en juego el liderazgo del grupo, Chile lo resolvió de manera contundente ante un rival muy flojo.
Charles Aránguiz, por partida doble, Alexis Sánchez, Gary Medel y Ronald Raldes en propia meta fueron los autores de los goles el día que Chile mostró su mejor versión y pareció, al fin, un candidato para ganar el torneo continental.
Chile encarriló el choque con el primer gol a los tres minutos de juego con un gol de Charles Aránguiz. Eduardo Vargas recibió un pase en profundidad e intentó un control orientado que se convirtió en un pase para Aránguiz, que llegó en carrera y fusiló el arco de Romel Quiñónez.
Después del primer gol, el juego se embrolló, un escenario en el que Chile no se siente cómodo, pero no pasó apuros para controlar a una selección boliviana muy desatinada que no inquietó ni una sola vez la portería de Claudio Bravo en todo el primer tiempo.
Ante la falta de fluidez ofensiva, Chile lo intentó a balón parado con dos lanzamientos da falta de Alexis Sánchez que se estrellaron en el poste y el larguero.
Las fisuras en la zaga boliviana aparecieron pasada la media hora de juego y una pérdida de balón originó la jugada del segundo gol chileno. Alexis condujo el ataque, abrió a la banda para Jorge Valdivia y éste se lo devolvió al 'Niño Maravilla', que remató de cabeza rodeado de defensas y batió a Quiñónez en el minuto 37.
El segundo tanto desmoronó la moral del conjunto boliviano, que podría haber llegado al descanso con una goleada en contra si Eduardo Vargas y Jean Beausejour hubiesen aprovechado un par de oportunidades claras.
Chile saltó al césped en el segundo tiempo sin Alexis ni Vidal, a los que Sampaoli prefirió dar descanso con miras a los cuartos de final.
En el minuto 66 Chile dejó visto para sentencia el duelo con el tercer gol, obra de nuevo de Aránguiz, que remató al fondo de la red un buen centro desde la izquierda de Angelo Henríquez, el reemplazo de Alexis.
El combinado chileno fue el dominador absoluto del cotejo y cerró una jornada redonda con el cuarto gol, anotado por Gary Medel, que resolvió como un fino estilista desde dentro del área con un control con el pecho y una suave vaselina. Para cerrar una noche aciaga para Bolivia, Ronald Raldes marcó en propia puerta el quinto gol después de un lanzamiento de Henríquez.