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Mundial Kazán | Natación

Villaécija busca en Kazán un billete para los Juegos de Río

  • La nadadora catalana disputará la prueba de los 10 km en aguas abiertas
  • "El objetivo es estar entre las diez primeras" para lograr plaza olímpica
  • Tras los Juegos Olímpicos, Villaécija piensa en la retirada

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Erika Villaécija, en los Europeos de Natación en Berlín en 2014
Erika Villaécija, en los Europeos de Natación en Berlín en 2014

La nadadora española Erika Villaécija afronta con optimismo la prueba de los 10 kilómetros en aguas abiertas de los Mundiales de Kazán, donde confía en estar entre las diez primeras para asegurarse una plaza en los Juegos Olímpicos de Río de 2016.

A sus 31 años, la catalana busca sacarse la espina de los Mundiales de Barcelona 2013, en los que acabó decimoséptima, y disfrutar de su séptima y "seguramente" última participación en esa competición.

El objetivo es estar entre las diez primeras

"El objetivo es estar entre las diez primeras y antes probar el circuito de los 5 kilómetros. También tengo la posibilidad de nadar los 25 kilómetros", ha explicado Villaécija.

Durante esta temporada, la barcelonesa se ha centrado exclusivamente en entrenarse para llegar "bien" a la distancia de los 10 kilómetros, con el fin de conseguir el billete para Río 2016. "Mi objetivo a largo plazo siempre ha sido ganar una medalla olímpica y el Mundial sería una buena opción para vivir mis cuartos Juegos Olímpicos", ha subrayado.

El trazado le favorece

Ha dicho también que tiene "muchas ganas" de viajar a Kazán y conocer un trazado en el que "la corriente no te viene ni en contra ni a favor" en una parte "muy ancha" del río Kazanka que, en su opinión, le favorece por su estilo.

"Estoy con mucha ilusión y confiada en hacer un buen papel. Después de que en Barcelona no saliera del todo bien y acabara tocada, he preparado a conciencia el Mundial y tengo muchas esperanzas en poder hacer una buena competición", ha insistido.

En lo que se refiere a la carrera, Villaécija prevé una prueba "rápida, con mucha gente", en la que deberá "salir entre las primeras y apretar en los metros finales" de una competición que se llevará "quien sea más lista".

Tras los Juegos piensa en la retirada

Tras una carrera intensa en la que Erika ha probado tanto la velocidad de la piscina como la bravura de las aguas abiertas, la veterana nadadora ha dejado entrever que después de la cita olímpica deberá pensar en la retirada. "Después de los Juegos Olímpicos estaré satisfecha. Ahora queda disfrutar", ha concluido Villaécija, que espera despedirse con una presencia y buen papel en los Juegos Olímpicos de Río.