Gasol, oro puro para España
- El de Sant Boi, líder indiscutible del éxito de España en el Eurobasket
- MVP del torneo, ha promediado 25.6 puntos, 8.8 rebotes y 2.9 asistencias
- Crónica de la final del Eurobasket, por Antonio Serrano
Es un deporte de equipo, todos lo recordaron. Pero nadie obvió la importancia capital de Pau Gasol que ha sumado un oro más a la brillante mochila de esta generación, apoyada más que nunca en su jugador bandera para conseguir uno de sus éxitos más trabajados.
"Por primera vez en mucho tiempo no eramos favoritos", recordó Llull tras la final en Lille, el premio al esfuerzo de un equipo que empezó el Eurobasket con muchas dudas dentro y fuera del equipo. Las ausencias ilustres alertaban de la dificultad de hacer algo grande en este torneo y la debilidad defensiva acabó por encender las alarmas.
Pero emergió el gran líder de la generación de oro del baloncesto español para tirar del carro como nunca. A sus 35 años y tras su renacer en la NBA con los Chicago Bulls, Pau Gasol se echó el equipo a la espalda para firmar una de sus mejores actuaciones con la selección española, aportando unos números estratosféricos y la garra que necesitaba España para seguir adelante.
Elegido mejor jugador del torneo, el de Sant Boi promedió 25.6 puntos, 8.8 rebotes y 2.9 asistencias por partido. Brillante en todas las facetas del juego, incluso se permitió un 66.7% de acierto en triples. Un recital coronado con su meteórica actuación contra Francia en semifinales, donde anotó 40 puntos, capturó 11 rebotes y aunó 51 puntos de valoración.
Su soberbio rendimiento disparó las opciones de una España que creció con el paso de los partidos y que, cuando se aplicó en defensa, o "cuando bajamos el culo" en palabras del propio Gasol, se mostró capaz de ganar a cualquiera. Varios jugadores destacaron el partido contra Alemania como el punto de inflexión del torneo para España. Allí se forjó el oro y el pase directo a Río 2016.
Gasol contagia su garra
Espoleados por su gran estrella, el resto de los componentes de la selección crecieron a su alrededor, especialmente un Víctor Claver que acabó ganándose un puesto en los minutos importantes de cada partido. El valenciano cuajó su mejor actuación con España y aumentó la fortaleza de una España a la que le costó encajar la ausencia intermitente del heróico Rudy Fernández, con molestias en la espalda durante todo el campeonato.
El equipo de Scariolo fue limando sus problemas y subiendo escalones hasta tomar el primer puesto del podio y meter dos jugadores en el cinco ideal del Eurobasket. Sergio Rodríguez se unió a Gasol en el equipo de estrellas del torneo. El 'Chacho' volvió a ser el revulsivo de la selección y el complemento perfecto para las rotaciones con el guerrero Llull y el debutante Ribas, al que no le pesaron los galones en ningún momento.
Además, la aportación del incombustible Felipe Reyes y del también debutante Mirotic, amén del trabajo de los San Emeterio, Hernángomez, Vives o Aguilar, menos habituales en la rotación, completaron el fabuloso empeño de una selección que, hoy más que nunca, debe mucho al mejor jugador de su historia.