La marcha de Casillas y Xavi marca un antes y un después en el fútbol español
- Ambos atesoran un palmarés inigualable en sus clubes y en la selección
- Iker se marchó del Madrid de manera triste y sin apenas apoyos
- Xavi fue despedido por la afición y el Barça como un ídolo y con el triplete
El fútbol español ha visto marcharse en este 2015 a dos de sus leyendas vivas, dos jugadores que han marcado una época: Iker Casillas y Xavi Hernández. Sus despedidas del Real Madrid y del FC Barcelona iconizan el fin de un ciclo.
Aunque el palmarés de ambos es envidiable, tanto en sus respectivos clubes como en la Roja, la forma de despedirse ha sido bien diferente.
Sobre todo la del meta mostoleño ha sido bastante significativa. Casillas tuvo que soportar en sus últimos meses en el Madrid los pitos de una buena parte de la afición, uno de los motivos que le empujaron a marcharse.
La sequía de títulos en la temporada añadió la nota amarga a su adiós, pero lo más dramático para sus acérrimos fue verle solo en la sala de prensa del Madrid, llorando sin consuelo y sin nadie que le arropara.
Tan comentada y criticada fue esa despedida, que el club se vio obligado al día siguiente a organizarle otra despedida, acompañado del presidente Florentino Pérez y los trofeos que conquistó Iker en el club de sus amores.
Su nuevo destino, el Oporto. Le esperaba un equipo que aún le permitía disputar la Champions y batir marcas como la de partidos jugados y número de encuentros con la portería a cero, pero una fase de grupos un tanto regular condenó a los de Lopetegui a disputar la Europa League; precisamente el único trofeo que le falta a Casillas.
El técnico del Chelsea, José Mourinho, se lo recordó tras el último partido jugado entre ambos equipos. Precisamente Mourinho.
Iker ha seguido acudiendo a las convocatorias de la selección española, donde ha encontrado la confianza de Del Bosque a pesar de pugnar la titularidad con David de Gea, que por minutos no fue su reemplazo en el Madrid.
Iker y Xavi, Gran Cruz del Mérito Deportivo
Su presencia en la Roja ha sido la otra diferencia en el año que ha vivido respecto a su amigo Xavi Hernández. El exbarcelonista, ahora en Al-Sadd catarí, ya renunció después del Mundial de Brasil 2014.
Pero el hecho de que coincidieran en el tiempo la decisión de ambos de abandonar sus clubes de toda la vida, no pasó desapercibida a instituciones como el Gobierno, que les concedió la Gran Cruz del Mérito Deportivo. Un consuelo para el madridista.
Sin embargo, el de Terrassa ha vivido una temporada de ensueño en el Barça antes de marcharse. El anuncio de su salida, donde estuvo acompañado del resto de la plantilla, y el homenaje de la afición en el último partido de Liga distan mucho del adiós de Casillas.
A eso hay que sumarle la consecución de un segundo triplete histórico, portando el brazalete de capitán del Barcelona y, como tal, encargado de alzar los trofeos de Copa, Liga y Champions.
Ahora en Al-Sadd sigue los pasos de otro viejo conocido de la Liga española y el Madrid, como Raúl González. Otro que ha dicho adiós este año futbolístico, pero de manera definitiva.