Casi una veintena de detenidos de Indar Gorri, los ultras del Osasuna
- La Guardia Civil y la Policía inician una operación contra los ultras 'rojillos'
- La operación está relacionada con la violencia en el fútbol
- La acusación sería sobre "integrantes concretos" y no todo el colectivo Indar Gorri
La Guardia Civil y la Policía han iniciado una operación contra los radicales del Club Atlético Osasuna, Indar Gorri, en la que se prevé casi una veintena de detenidos, han informado fuentes de la investigación.
El titular del juzgado de instrucción número 2 de Pamplona, Fermín Otamendi, que dirige la operación y ha ordenado las detenciones, ha decretado el secreto de las actuaciones.
Según las mismas fuentes, los agentes tienen previsto registrar la sede de este grupo, así como otros inmuebles en una investigación que, aunque en un principio se vinculó con otra operación contra el fraude en el equipo, está relacionada con la violencia en el fútbol.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Navarra han indicado que los detenidos están acusado de pertenencia a grupo criminal y de diversos delitos de lesiones por diferentes agresiones. Estas mismas fuentes han añadido que no se trata de una acusación contra Indar Gorri como colectivo sino contra "integrantes concretos" de la peña, una "minoría violenta".
El juez comenzará a tomar declaración el martes
El juez pretende demostrar la vinculación de algunos detenidos con el entorno de la izquierda abertzale y su participación en manifestaciones en las que pudieron cometer delitos de apología del terrorismo. Previsiblemente este martes, el juez comenzará a tomar declaración a los detenidos, que se encuentran en dependencias policiales.
No es la primera vez que entidades relacionadas con el club pamplonés se ve relacionado con investigaciones judiciales. En marzo, el expresidente de Osasuna Patxi Izco, el que fue su vicepresidente Juan Pascual y el director de la Fundación de la entidad fueron detenidos por un presunto desvío de, al menos, 2,4 millones de la entidad.
Este proceso judicial, que dirige también el juzgado número dos de Pamplona, se suma a otra querella presentada el año pasado por la Liga de Fútbol Profesional (LFP) por un supuesto amaño de partidos, lo que implicaría la comisión de los presuntos delitos de apropiación indebida y corrupción de particulares.