El Barcelona supera al Zalgiris Kaunas y coge aire para la segunda vuelta del 'Top-16' de la Euroliga

• Los azulgrana han remontado tras un mal inicio de partido en el Palau
• El acierto exterior ha sostenido una victoria clave para la clasificación

FC Barcelona 92 - 86 Zalgiris Kaunas

92 - Barcelona Lassa (16+22+27+27): Satoransky (10), Navarro (14), Perperoglou (7), Doellman (7), Samuels (11) -cinco inicial- Ribas (13), Lawal (5), Abrines (12), Vezenkov (2), Oleson (5), Tomic (6),

86 - Zalgiris Kaunas (19+12+24+31): Vecvagars (3), Seibutis (19), Ulanovas (17), Jankunas (11), Vougioukas (14) -cinco inicial- Lekavicius (16), Pocius (2), Sajus (4), Hanlan (-),

Árbitros: Belosevic (Serbia), Pastuasiak (Polonia) y Mantyla (Finlandia). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada del 'Top-16' de la Euroliga disputado en el Palau Blaugrana ante 6.286 espectadores.

El Barcelona Lassa se ha reencontrado con la victoria en el Top-16 de Euroliga tras superar al Zalgiris Kaunas (92-86), el último del grupo, de forma que, tras dos derrotas consecutivas en Europa, coge aire para mantenerse vivo en la competida lucha para conseguir un billete para los cuartos de final.

El desequilibrio exterior de Navarro (14 puntos), Abrines (12), Ribas (13) y Satoransky (10), así como los rebotes defensivos de Doellman (8), han permitido a los azulgrana cerrar la primera vuelta del Top-16 con un balance de tres victorias y cuatro derrotas, al tiempo que hundían en la clasificación a un voluntarioso rival.

Sabían los locales que una derrota en el Palau Blaugrana ante el rival más flojo de su grupo les complicaba, y mucho, sus opciones para imprimir el billete a los cuartos de final de la máxima competición europea. Bajo presión, los de Pascual, algo irregulares en defensa, no han fallado.

Y eso que en el primer cuarto han repetido los vicios adquiridos en las dos últimas derrotas europeas. Desconectados en ataque y sin intensidad en defensa. En éstas, los pupilos de Jaskievicius se han aprovechado de la indolencia de los locales: liderados por un inspirado Ian Vougioukas, que ha pasado por encima de Samuels en la pintura con ocho puntos en los primeros diez minutos,  los lituanos han llegado a tener una máxima ventaja de ocho puntos (4-12, min.5).

Reacción azulgrana

Tras un tiempo muerto de Pascual, su equipo ha reaccionado, especialmente en defensa, y ha sobrevivido de los chispazos de Juan Carlos Navarro y Doellman, desde la línea de 6,75 metros. Sin embargo, no alcanzó para llevarse el primer cuarto (16-19).

La indolencia inicial de los azulgrana desapareció en el segundo periodo. La intensidad defensiva ha marcado la diferencia, después de que Pascual introdujera la presión a toda la pista tras canasta, que ha obtenido sus frutos rápidamente.

Un par de balones recuperados y una serie de canastas rápidas, con Doellman, Oleson y Vezenkov como máximos beneficiados en ataque, han impulsado al equipo. Además, han entrado los triples, que permitieron compensar el poco acierto desde la línea de tiros libres, a lo que se ha sumado el desacierto en ataque del equipo báltico, en el que sólo Ulanovas destacaba.

El resultado ha sido una ventaja de 10 puntos (36-26 min.19), que sólo aguó un triple de Vecvargas sobre la bocina, manteniendo con esperanzas al Zalgiris en el descanso (38-31).

Siempre por encima

Tras la reanudación, el Zalgiris ha sacado petróleo de una antideportiva de Lawal y ha completado un parcial de 0-4 en un abrir y cerrar de ojos (38-35, min.21). Sin embargo, Abrines ha apagado el fuego desde el perímetro con cinco puntos consecutivos, a los que se han unido las aportaciones de Doellman y Ribas para conseguir una renta favorable de 13 puntos (50-37, min.25).

Sin opciones en la pintura, el Zalgiris se mantenía a flote gracias a los triples de Seibutis y Lekavicius -autores de 19 y 16 puntos, respectivamente- aunque nunca han logrado bajar de los ocho puntos de desventaja. El acierto de Navarro y Perperoglou desde la línea de 6,75 metros ha permitido después a los azulgranas gozar de una cómoda renta de catorce puntos 65-51, que Lekavicius, el mejor de los lituanos en el tercer cuarto, redujo al 65-55 al que se llegó al último acto.

El partido ha quedado sentenciado a falta de siete minutos con un parcial de 9-0 (73-57) de la mano de Perperoglou, Navarro y Satoransky. Sin embargo, el Zalgiris no ha perdido la cara al choque y ha evitado irse del Palau con una derrota abultada.

En cualquier caso, respira el Barcelona, que deberá completar un notable segundo tramo del Top-16 para seguir avanzando en el pedregoso camino que lleva a la Final Four de Berlín.