Juanpi rompe racha negativa del Málaga y ahonda la crisis del Sporting
- El Málaga vence 1-0 a un Sporting que se hunde en la tabla
- El Sporting mereció algo más por juego y oportunidades
- Los andaluces se sitúan octavos y los asturianos siguen penúltimos
El Málaga rompió una racha de cinco jornadas sin ganar y gracias a un gol del centrocampista venezolano Juanpi Añor se impuso a ante un Sporting que buscó y mereció el empate, pero que se topó con el poste en un lanzamiento de Carlos Castro.
El conjunto asturiano salió fuerte y agresivo, sorprendiendo al Málaga en la presión, y una acción nada más comenzar el encuentro de del paraguayo Tony Sanabria, pudo adelantar al Sporting, con un disparo raso, que frenó el guardameta mexicano Guillermo Ochoa, con el pie.
El Málaga intentaba entrar en juego lo antes posible, pero la presión del Sporting inquietaba a los malaguistas, que no podían sacar el balón jugado desde atrás y se veían impotentes ante la solidaridad y el toque del rival.
Y una acción perdida, sin aparente peligro, con el balón en las botas del centrocampista venezolano Juanpi Añor, se abrió, buscando el disparo y acomodarse el esférico en la izquierda y su lanzamiento entró por toda la escuadra, sin que el guardameta Cuéllar pudiera evitar el gol.
El Sporting mereció algo más
El Sporting tras el gol no se deshizo, al contrario, volvió a la carga, sobre todo por las bandas, con Ndi y Sanabria, además de Jony, pero con Ochoa, muy atento.
El técnico del Sporting Abelardo, que cumplía su segundo encuentro de sanción al igual que su homólogo Javi Gracia, hizo el primer cambio tras el descanso, dejando a Nbi, uno de los jugadores más agresivos, por Carlos Castro.
El Málaga salió mejor en la segunda parte, más entonado, y directo a intentar sentenciar el encuentro, aunque el Sporting no se achicaba y con la rapidez y los centros de Jony por la izquierda, creaba incertidumbre.
El Málaga dominaba pero dejaba muchos espacios por las bandas, que aprovechaba el Sporting, que estuvo a punto de marcar con un centro de Lora y remate de cabeza de Sanabria, que con una intervención felina de Ochoa, evitó el empate.
Luego, en la otra portería, Weligton, también pudo sentenciar con otro remate de cabeza, que salió rozando el poste.
El Sporting seguía muy ordenado, atacando con peligro ante un Málaga que se iba diluyendo poco a poco, sin que los cambios hicieran efecto.
El conjunto asturiano tuvo la igualada en una doble ocasión con disparo dentro del área pequeña de Pablo Pérez, intervención de Ochoa, y el rechace le llegó a Carlos Castro, cuyo disparo pegó en el poste izquierdo.
La suerte no le llegaba al equipo asturiano, que era merecedor del empate ante un Málaga, romo y perdido, que defendía el resultado, y que lo consiguió con una jugada última, un posible penalti del malaguista Pablo Fornals, al tocar el balón con la mano, que protestaron con ímpetu los jugadores y el banquillo sportinguista.