La ciclista sospechosa de fraude tecnológico anuncia su retirada y declina comparecer ante la UCI

• Femke Van den Driessche abandona el ciclocross con 19 años
• Cree su absolución es "imposible" porque la bicicleta estaba en su zona de material
• Debía declarar este martes ante la UCI por utilizar un motor en el Mundial de ciclocross

Femke Van den Driessche, en el Mundial de ciclocross.

La ciclista belga Femke Van den Driessche, acusada de utilizar una bicicleta trucada con un motor durante el pasado mundial de ciclocross de Heusden-Zolder (Bélgica), ha anunciado su retirada y no testificará este martes ante la Unión Ciclista Internacional (UCI), como estaba previsto.

"Después de haberlo meditado junto a mi abogado y mi familia, he decidido detener mi implicación en el proceso que hay abierto contra mí en Aigle (Suiza) -donde está la sede de la UCI- ya que he tomado la decisión de poner fin a mi carrera deportiva en el ciclocross", expresó la ciclista en un comunicado.

Van den Diressche, de 19 años, asumió que su absolución "es imposible, ya que esa bicicleta estaba en mi zona de material", y añadió que su proceso "ya ha sido juzgado por todos" y que "los costes de mi estancia en Suiza son demasiado altos para mí". También agradeció el apoyo a sus abogados, amigos y seguidores.

"Quiero rehacer mi vida de la forma más normal posible"

En su comunicado la ciclista expresó: "A partir de este momento quiero rehacer mi vida de la forma más normal y serena posible, y espero que todo el mundo comprenda y respete esto".

El presidente de la UCI, Brian Cookson, solicitó una suspensión de por vida y una multa de 50.000 euros para la ciclista. La ciclista aseguró tras ser acusada que la bicicleta investigada no era suya, sino de un amigo, pero que terminó en sus manos después de un error de un mecánico.

Desde hace años en el mundo del ciclismo se viene sospechando que se han cometido fraudes por la adaptación de motores a las bicicletas durante la competición, pero hasta ahora no se había detectado ninguno en los controles tecnológicos. La corredora belga abandonó la carrera sub-23 de los Mundiales de ciclocross alegando precisamente una avería mecánica en la última vuelta.