El Madrid mete más presión a la Liga

• Los blancos siguen su racha en Getafe y ganan con autoridad 1-5
• Se sitúan provisionalmente segundos a un punto del Barça
• Isco, James y Benzema se reivindican por distintos motivos
• El debut de Esnáider no invierte la tendencia negativa de los azulones
• Datos y estadísticas del Getafe 1-5 Real Madrid

Isco celebra un gol ante el Getafe

Ficha técnica:

1.- Getafe: Guaita; Damián Suárez, Vergini, Vigaray, Pereira (Yoda, min. 9); Pedro León, Juan Rodríguez, Lacen (Emi, min. 52), Víctor Rodríguez: Sarabia y Álvaro (Moi Gómez, min. 62)

5.- Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal (Nacho, min. 52), Pepe, Varane, Marcelo; James Rodríguez, Kroos, Isco; Bale (Lucas Vázquez, min. 57), Benzema (Jesé, min. 67) y Cristiano.

Goles: 0-1, min. 29: Benzema, tras un pase de James; 0-2, min. 40: Isco culmina una pared con Benzema; 0-3, min. 50: Bale bate a Guaita en un mano a mano; 1-3, min. 83: Sarabia bate a Keylor Navas con un disparo desde fuera del área; 1-4, min. 88: James; 1-5, min. 92: Cristiano.

Árbitro: González González (Comité Castellano-Leonés). Mostró cartulina amarilla a Damián Suárez (min. 44), Álvaro Vázquez (min. 61), Pedro León (min. 78) y Moi Gómez (min. 85) por parte del Getafe, y a Nacho (min. 90) por parte del Real Madrid.

Incidencias: partido correspondiente a la trigésima tercera jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Coliseum Alfonso Pérez ante cerca de 11.000 espectadores.

--EFE--

A mediados de marzo, el Madrid estaba a 12 puntos del liderato y hacía ya varios partidos que Zidane había dado por perdida la Liga. Un mes después, tras ganar este sábado al Getafe por 1-5 con autoridad, se sitúa provisionalmente segundo y duerme a un solo punto del Barça.

El partido en el Coliseo Alfonso Pérez ha servido además para que varios jugadores blancos se reivindiquen: en particular, y aunque por motivos distintos, Isco, James y Benzema, que junto a Bale y Cristiano han sido los autores de los goles visitantes.

El partido se ha jugado prácticamente en el campo del Getafe desde el inicio. Con la inyección de moral de la clasificación para la Champions y la oportunidad de seguir metiendo presión al eterno rival en crisis, Zidane había advertido de que el encuentro ante los vecinos de la periferia sur madrileña no le gustaba “nada”.

Advertidos, los blancos estuvieron muy atentos durante los 90 minutos, tanto los habituales titulares, como los hombres a los que dio oportunidades en el centro del campo y en la defensa (tras dejar fuera de la convocatoria a Ramos y Casemiro).

Pero quien más brilló fue Benzema, hiperactivo en la primera mitad. Después de varias llegadas peligrosas, incluido un disparo al poste de Cristiano, el francés remató a la red un centro de James ganando la espalda a la defensa local (minuto 29).

Tres días después de conocer que no jugará la Eurocopa en su país por el presunto chantaje a su compañero de selección Valbuena, volvió a demostrar que está en un gran momento: en una jugada, el defensa del Getafe Vergini tuvo que intentar despejar hasta tres veces seguidas ante la insistencia del francés.

Al ataque

También participó en el segundo, al hacer una bonita pared para habilitar a Isco. En la segunda parte, con un Getafe igual de inofensivo, Bale marcó el tercero en una contra.

Tras una fase más relajada, los de Esnáider --debutante este sábado-- tuvieron una gran ocasión en un libre indirecto en el área pequeña que salvó Navas y poco después consiguieron el premio de consolación con un bonito chut de Sarabia que ponía el 1-3 en el marcador.

Pero ya no quedaba tiempo para la reacción y, al revés, el Madrid siguió atacando y marcó tantos más por mediación de James, después un bonito ‘dribling’, y de Cristiano, tras un regalo de Jesé.

Además de la abultada derrota que prolonga su mala racha (ya son 13 partidos sin ganar), el Getafe tiene más motivos para la preocupación. Y es que si ya tenía bajas en defensa por lesión, añade ahora una por sanción (Suárez) y otra probable por la lesión de Pereira, que se retiró a los pocos minutos con molestias en el muslo izquierdo.

Más dificultades para que el nuevo entrenador saque al equipo de la zona de decenso.