Arsenal y Nápoles, al primer bombo; PSG y Benfica, al segundo

• El español Lucas Pérez logra un triplete con los 'gunners' en Basilea
• El Ludogorets da la sorpresa en París y empata con el PSG
• Resultados de la jornada 6 de la Champions League en RTVE.es

Lucas Pérez celebra uno de los goles del Arsenal con Özil y Gibbs

La última jornada de la Champions confirmó dos primeros puestos, para el Arsenal, con tres tantos de Lucas Pérez, y el Nápoles, y dos segundos: el PSG y el Benfica.

A falta de los ocho partidos de este miércoles, ya hay catorce equipos con plaza en octavos: seis como líderes de grupo (Atlético de Madrid, Barcelona, Leicester, Mónaco, Arsenal y Nápoles); cinco como segundos (Bayern Múnich, Manchester City, Bayer Leverkusen, París Saint Germain y Benfica); y tres con la posición aún por definir (Borussia Dortmund, Real Madrid y Juventus).

Sólo habrá dos billetes más para la siguiente ronda en juego este miércoles. Uno en el grupo G, la segunda posición entre el Oporto y el Copenhague, y otro en el H, entre el Sevilla y el Olympique de Lyon, aunque el conjunto andaluz, si gana y pierde o empata el Juventus, podría terminar incluso al frente de su cuarteto.

Para la Liga Europa, mientras, hay ya cuatro clubes confirmados como terceros de sus grupos: Ludogorets, Besiktas, Borussia Moenchengladbach y Rostov. Los otros cuatro se sabrán este miércoles entre el Tottenham o el CSKA Moscú, el Sporting de Lisboa o el Legia, el Copenhague o el Oporto y el Lyon o el Sevilla.

A la espera de que todo quede configurado para el sorteo de los emparejamientos de octavos de final del próximo lunes a las 12.00 horas en la ciudad suiza de Nyon, este martes lanzó al liderato al Arsenal y a Lucas Pérez, con un 'triplete' incontestable frente al Basilea (1-4) en 47 minutos para dirigir la victoria londinense.

Los dos primeros de oportunista dentro del área, el 1-0, en el minuto 8, y el 2-0, en el 16; el tercero, ya en el inicio del segundo tiempo, con un buen zurdazo cruzado a pase del chileno Alexis Sánchez. Desde sus botas tomó el Arsenal el viaje a los octavos de final como primero de su cuarteto, pendiente de París.

Lo confirmó después el sorprendente y sonoro empate del París Saint Germain con el Ludogorets en el Parque de los Príncipes (2-2). El equipo de Unai Emery dependía de sí mismo para ser primero, pero falló en el pulso con el Arsenal. Misidjan y el brasileño Wanderson marcaron para el conjunto búlgaro; el uruguayo Edinson Cavani y el argentino Ángel Di María, en el minuto 92, para el francés.

El Nápoles sí terminó al frente de su grupo. Ganó en Lisboa al Benfica (1-2) con goles de José Callejón y Dries Mertens en la segunda parte, suficiente para dominar el cuarteto, pero también para el conjunto portugués, en octavos como segundo clasificado.

Porque Nápoles y Benfica constataron antes que ambos estaban en los octavos de final por un partido ajeno, el que derrumbó todas las opciones del Besiktas, goleado en el primer tiempo en el estadio Olímpico de Kiev e incrédulo ante tal correctivo, 4-0 antes del descanso, contra un adversario, el Dínamo, que no se jugaba nada.

En el minuto 9, 1-0, con una desbordante jugada de Yarmolenko rematada por Besedin; en el 30, 2-0, por un penalti transformado por Yarmolenko y una expulsión, de Andreas Beck, muy discutida por el club turco; en el 32, el 3-0 de Buyalskiy en un error defensivo; y en el 47, el 4-0, ante la desesperación del portero español Fabricio, que recibió dos tantos más en la segunda parte.

No había nada en disputa en el grupo D, con el Atlético de Madrid primero de grupo sí o sí fuera cual fuera su resultado en Múnich. Perdió contra el Bayern (1-0) y se quedó sin pleno de victorias, algo que sólo habían logrado cinco clubes en la historia del torneo, pero se presenta en octavos como líder por cuarto año consecutivo.

El Manchester City de Pep Guardiola, inamovible de la segunda plaza del grupo, igualó frente al Celtic (1-1). Al 0-1 escocés de Roberts en una jugada individual en el minuto 4 le siguió cuatro después el 1-1 de Ihenacho, asistido por Nolito, al que después le anularon un gol en el segundo tiempo.