España fulmina a Eslovenia y pasa como primera de grupo
- Los 'Hispanos' han ganado a los eslovenos sin contemplaciones (36-26)
- Los de Jordi Ribera se medirán a Brasil en los cuartos de final
- España - Brasil, en directo, sábado a las 20:45 en TdP y RTVE.es
Ficha técnica:
36 - España: Corrales; Balaguer (7, 2p), Dujshebaev (1), Sarmiento (3), Cañellas (4), Ángel Fernández (4) y Aginagalde (-) -equipo inicial- Pérez de Vargas (ps), Gurbindo (1), Rivera (6, 2p), Víctor Tomás (1), Entrerríos (4), Morros (-), Gedeón Guardiola (3), Goñi (2) y Figueras (-)
26 - Eslovenia: Skok; Marguc (6, 1p), Miklavcic (1), Gaber (-), Mackovsek (1), Cingesar (-) y Bezjak (-) -equipo inicial- Lesjak (ps), Blagotinsek (3), Henigman (1), Kavticnik (2), Janc (3, 1p), Dolenec (4, 1p), Poteko (1), Kodrin (2) y Zarabec (2)
Marcador cada cinco minutos: 0-2, 3-3, 7-5, 11-8, 15-9 y 18-10 (Descanso) 21-11, 24-13, 26-18, 29-21, 32-23 y 36-26 (Final)
Árbitros: Geipel y Helbig (GER). Excluyeron por dos minutos a Morros, Sarmiento y Goñi (2) por España; y a Blagotinsek, Henigman (2) y Poteko por Eslovenia.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la quinta y última jornada del grupo B del Mundial de Francia 2017 disputado en Les Arenes de Metz (Francia) ante unos 5.000 espectadores.
La selección española de balonmano sigue con paso muy firme en el Mundial de Francia 2017 y ha pasado por encima de Eslovenia (36-26) para cerrar la fase de grupos como líder indiscutible del B. Ahora, los de Jordi Ribera se medirán este sábado a Brasil en los octavos de final y no se encontrarían ante los anfitriones hasta una hipotética final. [España - Brasil, en directo, sábado a las 20:45 en TdP y RTVE.es]
Las cuentas pendientes dieron si cabe un punto más de intensidad y hambre al gran despliegue de España, rubricando la mejor primera mitad del Campeonato (18-10). Los de Ribera volaron sobre el parqué y culminaron su victoria con sensaciones inmejorables de cara a los cruces de la cita gala que comienzan el sábado en Montpellier ante Brasil.
Un espectacular trabajo que además permitió al conjunto español tomarse la revancha de la derrota que encajó ante los eslovenos en el preolímpico y que le costó el billete a Río. No obstante, a España le costó arrancar, como si estuviese todavía anclada en la ciudad sueca de Malmoe, en el fatídico partido del preolímpico en el que los 'Hispanos' tan sólo lograron anotar dos goles ante los eslovenos en los últimos veintitrés minutos de la segunda mitad.
Ni Dujshebaev, ni Sarmiento, ni incluso el infalible Valero Rivera, que falló un penalti, eran capaces de superar a la defensa eslovena, que se anticipaba continuamente a los movimientos ofensivos del equipo español. Tuvo que ser un debutante, el extremo David Balaguer, que no vivió en persona la pesadilla vivida en el preolímpico, quien acabase por espantar definitivamente con los fantasmas que atenazaban a los 'Hispanos'.
De la mano de Balaguer, que anotó dos goles consecutivos, la selección española encontró definitivamente la forma para romper la defensa eslovena, un remedio ya clásico dentro del recetario español: velocidad, velocidad y velocidad. Un ritmo que España aumenta todavía un punto más, gracias a su actividad defensiva, que no sólo permitió a los de Jordi Ribera cerrar a Eslovenia todos los caminos al gol, sino además, y quizá lo más importante, permitió a la selección desplegar sus rápidas transiciones.
España abre brecha
Sin dar tiempo casi a colocarse a la defensa eslovena, el conjunto español encontró las facilidades ofensivas de las que no había gozado hasta entonces, lo que permitió a España abrir a los catorce minutos una brecha en el marcador de tres goles 7-4. Renta que los 'Hispanos' no sólo lograron mantener, sino casi triplicar (18-10) al llegar al descanso, gracias a una espectacular defensa, que agotó todas la ideas ofensivas de una Eslovenia, a la que ni le valió atacar con siete jugadores de campo.
Trabajo defensivo que dio definitivamente alas a los veloces extremos españoles, como confirman los cuatro goles con los que cerró Ángel Fernández la primera mitad, y los siete que firmó David Balaguer en los primeros treinta minutos. Una solidez defensiva que España, pese a su notable renta, no rebajó en la segunda mitad, en la que incluso se mostró todavía más contundente, lo que permitió a los de Jordi Ribera alejarse todavía más en un tanteador (23-12).
Renta inexplicable sin el buen hacer del portero Rodrigo Corrales, que prolongó en segundo período sus buenos números de la primera mitad, que cerró con un más que notable 44 por ciento de paradas. Una piedra más del muro español con el que se estrelló una y otra vez un conjunto esloveno, que sólo con el partido ya totalmente resuelto a favor de los 'Hispanos' logró anotar con cierta frecuencia.
Dato que no puede ensombrecer el excelente partido del conjunto español, que a base de piernas e inteligencia en defensa acabó de una vez por todas (36-26) con la pesadilla en que se había convertido Eslovenia para la selección en los últimos tiempos.