La Fiscalía pide una multa de 14.400 euros por la pitada al himno en la Copa Rey de 2015
- En concreto, se le reclama al presidente de Catalunya Acció, Santiago Espot
- Se le señala como autor de los delitos de injurias al rey y de ultraje a España
La Fiscalía de la Audiencia Nacional pide una multa de 14.400 euros al presidente de Catalunya Acció, Santiago Espot, como promotor de la pitada al himno en presencia del rey Felipe VI, en la final de la Copa del Rey en el Camp Nou entre el Barça y el Athletic de Bilbao, disputada el 30 de mayo de 2015.
En su escrito de acusación, la fiscal Ana Noé considera a Espot autor de los delitos de injurias al rey y de ultraje a España, por lo que será finalmente juzgado próximamente ante el Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional.
Estos hechos promovidos por Espot, según destaca la Fiscalía, "fueron presenciados públicamente por millones de personas, y generaron un sentimiento de indignación en gran parte de la población española en cuanto fueron despreciados y rechazados símbolos representativos de su dignidad como pueblo y como nación".
La fiscal sostiene que el acusado actuó "en ejecución de un plan preconcebido y planificado por él mismo con el deliberado y firme propósito de ofender y menospreciar al Jefe del Estado español y al himno nacional, por lo que ambos representan como símbolos para los sentimientos colectivos identificados con la nación española".
En el marco de ese plan, Espot publicó el 28 de mayo de 2015 en el perfil de Facebook de Catalunya Acció, un manifiesto titulado: "Por la pitada al himno español y al rey Felipe de Borbón".
Cataluña "vive una situación política decisiva"
El manifiesto señalaba que Cataluña "vive una situación política decisiva" y, añadía que en ese contexto "se explican las grandes movilizaciones de los últimos años que han conseguido poner la independencia de Cataluña como eje central de la política catalana".
Para llegar "a la victoria final, que no es otra que la proclamación del Estado catalán independiente", Espot planteaba añadir a los frentes "político, social, cultural o lingüístico" el de "la protesta colectiva cívica".
Con ese fin vio la copa del Rey de 2015 como "una ocasión inmejorable para manifestar una vez más que queremos dejar de se súbditos del reino de España".
"Debe ser entonces cuando (...) todos los seguidores catalanes que asistan al partido (y los que no también) deben manifestar sonoramente su desacuerdo, tanto por la presencia del monarca como por el sonido de los acordes del himno español, con una sonora pitada, que sin duda acompañaran también los seguidores vascos".
A este manifiesto, según la fiscal, se adhirieron una decena de asociaciones soberanistas, y el 29 de mayo todas ellas junto a Catalunya Acció, desde su perfil de Facebook, anunciaron que repartirían "miles de silbatos a los asistentes a la final" para "hacer más sonora la protesta contra la presencia del monarca español y la interpretación de la marcha real en la capital de Cataluña".
"Una masiva y colectiva pitada"
Finalmente, recuerda el escrito, el día de la final se produjo "una masiva y colectiva pitada" que hizo "inaudible" el himno nacional, mientras se retransmitía este acto "nacional e internacionalmente", "consiguiendo así el acusado la materialización del plan ideado".
La fiscal rememora también que la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte formuló propuesta de sanción contra el acusado como persona física por su implicación y participación personal.
A finales de julio, el juez de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, tras decretar dos veces el archivo de esta causa, dictó auto de apertura de juicio oral por estos hechos al entender que las actuaciones investigadas "ofrecen méritos suficientes para exigir responsabilidad criminal".
El pasado 14 de noviembre, Espot compareció a petición de la Fiscalía como investigado ante Andreu y éste se acogió a su derecho a no declarar, alegando que se trata de una "causa politizada" y que se estaba vulnerando su derecho a la libertad de expresión.
Antes de llamarle a declarar, Andreu había archivado la denuncia que dio lugar a la apertura a esta causa, interpuesta por VOX y Manos Limpias, argumentando que la Fiscalía no vio delito en otra pitada al himno en 2009 en la final de la Copa del Rey en Mestalla (Valencia) y en presencia del jefe del Estado, por lo que fue finalmente archivada.
La Fiscalía se opuso a que se le diera carpetazo a este asunto alegando que, si bien se trataba de hechos "muy similares", no eran de "absolutamente idénticas características", y la Sala de lo Penal obligó finalmente a Andreu a investigar estos hechos.
En las dos anteriores finales coperas disputadas entre ambos equipos, con Juan Carlos I como rey, la situación fue similar, ya que se produjeron pitadas al himno español tanto en el Vicente Calderón madrileño, en 2012, como en el estadio de Mestalla, en 2009.