Messi desencadenado
- El mejor arranque liguero de Messi hace volar al Barça, sólido líder
- La aportación de Paulinho redondea el buen momento azulgrana
- Crónica: El Barça sigue enrachado con un Messi imparable, por Felipe Fernández
Después de un verano turbulento en los despachos, el Barcelonaque no borra de su cara gracias, sobre todo, al excelso momento de forma de Leo Messi, que volvió a dar un recital en el partido contra el Eibar.
El argentino fue la clave de la goleada del equipo de Valverde al Eibar, que se vio arrollado por el vendaval culé en un 6-1 que no dejó lugar a dudas.
Imparable Messi
El argentino acumula nueve dianas en cinco jornadas, el mejor arranque liguero de su vida. Las cuatro de este martes al Eibar le dispararon en la tabla de goleadores y confirman que sigue siendo el rey. Rey del fútbol y rey de un Barça que cabalga a sus lomos sin necesidad de añorar a Neymar e, incluso, con el lujo de dar descanso a un Luis Suárez hasta ahora intocable. Y Valverde, encantado: "da igual donde le pongas porque él va a convertir una jugada en la que no pasa nada en algo que va a pasar".
La racha de Paulinho
Fichaje criticado y de perfil bajo, ya ha comenzado a rendir por encima de lo esperado (al menos para aquellos que criticaron su llegada). Sus dos goles en los dos últimos partidos con el Barcelona le han revelado como un gran llegador y capaz de aportar al equipo una faceta de la que adolecía la pasada temporada, cuando el Barça dependía de su tridente para anotar. "Es un perfil diferente a otros jugadores", dijo Valverde tras el partido.
Líder sólido
La victoria, por encima de todo, mantiene al Barça en lo más alto de la tabla clasificatoria. El liderato aporta tranquilidad a un equipo que ya disfruta con el estilo de Valverde, que ha conseguido en apenas cinco jornadas dar la vuelta a un panorama difícil desde la pretemporada.
Se sobrepone a las bajas
Uno de los grandes aspectos positivos de esta goleada y del comienzo de Liga para el Barcelona es es la capacidad que está demostrando para superar los obstáculos, como la reciente lesión de Dembélé o no haber podido contar todavía con Suárez al cien por cien. Sin dos de sus principales valores, el Barça, con Messi a la cabeza y con el banquillo respondiendo a la perfección, camina con paso firme.