El Real Madrid gana en Bamberg y el Valencia no levanta cabeza

• Thompkins lidera la victoria blanca con 20 puntos ante el Brose (66-81)
• Décima derrota seguida de los 'taronja' en Euroliga tras caer en ante Zalgiris (63-71)

El ala-pívot estadounidense Augustine Rubit (d) del Brose Bamberg trata de anotar ante el ala-pívot estadounidense del Real Madrid, Trey Thompkins (i).

El Real Madrid ha sumado una meritoria e importante victoria ante el Brose Bamberg (66-81) en la decimocuarta jornada de la Euroliga, un triunfo contundente que amarró desde el inicio sin darle ninguna oportunidad al 'ogro' de los españoles, el equipo alemán, que ya derrotó a Unicaja, Barcelona Lassa, Valencia Basket y Baskonia pero que nada pudo ante una nueva exhibición de Trey Thompkins (20 puntos).

Los de Pablo Laso dominaron el partido desde el inicio con una trabajada defensa sobre Ricky Hickmann y el poderío de Walter Tavares en la pintura cuando los alemanes amenazaban con acercarse en el marcador.

El Brose Bamberg solo funcionó desde el perímetro (11 triples) ante un equipo blanco que firma su tercera victoria seguida en la competición continental para mantenerse en los puestos de 'play-offs'. Los de Laso no necesitaron esta vez de su mejor arma, un Doncic que destacó más como asistente (8) y dejó atrás su expulsión en el WiZink Center ante el Valencia Basket.

Con el mismo quinteto que ante el cuadro 'taronja', el Real Madrid, con una sólida defensa y efectividad plena en ataque, consiguió un parcial de 2-15 con 10 puntos de un Thompkins enchufado, para firmar un inicio arrollador (13-29, min.10) ante un Brose acertado desde el perímetro (3 triples).

Poco a poco los alemanes se estiraron y, de la mano de Hackett, con tres triples seguidos, y la irrupción de Ricky Hickman, igualaron el ritmo de los blancos, que acumularon un 10/12 en tiros de dos y un dominio abrumador en el rebote (8-17) al descanso. Pese a la mejora en el juego alemán, las diferencias se mantuvieron (35-50, min.20).

Tras el descanso, los de Andrea Trinchieri hicieron un nuevo amago de remontada con Augustine Rubit a la cabeza dominando la pintura hasta que Walter Tavares decidió borrarle del mapa. Un nuevo arreón de los madridistas, liderados por el caboverdiano y Causeur, les permitió encarar el último cuarto con tranquilidad al alcanzar la máxima +22 (46-68, min.29).

En los últimos minutos los blancos se dejaron llevar y por enésima vez en el partido, los alemanes intentaron poner en aprietos al Real Madrid desde la línea de tres, donde estuvieron acertados durante todo el partido (11 triples), pero sin éxito. El Real Madrid ganó, convenció y sigue en los puestos de 'play-off'.

Décima derrota del Valencia Basket

Por otro lado, el Valencia Basket sufrió ante un solvente Zalgiris Kaunas su décima derrota consecutiva en la Euroliga (63-71), una pésima racha que le deja ya sin apenas opciones reales de soñar con clasificarse para los cuartos de final de la competición aunque aún queda más de la mitad de la fase regular por disputarse y que le valió una sonora pitada.

Tras recuperarse de un mal inicio y llegar al descanso por delante,  el Valencia firmó una segunda parte inconsistente, muchos menos agresivo que su rival en todas las facetas del juego y sin ideas para plantar cara al equipo de Sarunas Jasikevicius, que al sumar su novena victoria y la cuarta seguida se confirma como la revelación del torneo.

A la baja de Guillem Vives, que ya dejaba al Valencia con un único base puro, se unieron las dos faltas señaladas a Van Rossom en el primer minuto y medio de juego y un 2-10 inicial que el Zalgiris construyó sobre la ambición de Davies en el rebote ofensivo.

Salieron San Emeterio y Green a cubrir el descanso del belga y poco a poco el Valencia, con el ímpetu de Abalde, empezó a poder superar la agresiva primera línea lituana y a anotar cerca del aro. Aún así los tiros lejanos de Jankunas mantuvieron por delante a los visitantes (16-19, m.10).

Tras haber obligado a replegarse a la defensa del Zalgiris el Valencia sí que pudo anotar desde la línea de tres puntos y así consiguió ponerse por delante por primera vez.

Durante unos minutos el choque se igualó pero el Valencia siguió circulando bien la pelota y eso le permitió seguir alimentando su marcador desde la línea de 6'75, ayudado también por la buena labor de Dubljevic en el rebote de ataque, y llegar al descanso por delante (36-34, m.20).

Bien guiado por Micic, empezaron a distanciarse de un Valencia que salió del vestuarios sin tener claro qué quería hacer.

Con la entrada de Van Rossom y Abalde, los locales ganaron criterio y agresividad pero el gallego, por más que lo intentó, no estuvo acertado con los tiros que tuvo y el Zalgiris pudo ampliar su ventaja sin hacer demasiado (42-51, m.28).

El coraje de Dubljevic, pese a jugar medio cojo por molestias, y de Rafa Martínez mantuvo vivo al Valencia y aunque la aparición anotadora de White dio margen al Zalgiris, finalmente un par de acciones de Erick Green permitieron a los locales estrechar el marcador (59-65, m.37).

Pero ni el Valencia tuvo ideas ni el Zalgiris perdió la calma y mientras los locales dilapidaron sus opciones, el conjunto lituano los sentenció con dos triples desde la esquina tras una buena circulación de balón, una comparación que acabó de desesperar a la Fonteta.