Federer logra su sexto Abierto de Australia, el 20º del Grand Slam
- El suizo vence al croata Marin Cilic, por 6-2, 6-7 (5), 6-3, 3-6 y 6-1
- A los 36 años, conserva su título tras ganar otra final de cinco sets
- Halep acabó en el hospital tras deshidratarse en la final femenina que perdió
El suizo Roger Federer ha vencido al croata Marin Cilic, por 6-2, 6-7 (5), 6-3, 3-6 y 6-1, en tres horas y tres minutos, para ganar por sexta vez el Abierto de Australia y levantar después la Copa Norman Brookes entre lágrimas, celebrando su vigésimo título del Grand Slam.
Solo la australiana Margaret Court, con 24 grandes, la estadounidense Serena Williams, con 23 y la alemana Steffi Graf, con 22, superan a Federer en la lista de Grand Slams conseguidos.
Con la victoria de este domingo en la Rod Laver Arena, Federer, defensor del título, iguala los seis títulos del serbio Novak Djokovic en Melbourne Park, y del australiano Roy Emerson, y amplía su palmarés con el 96 de su cuenta.
Este nuevo título, el segundo esta temporada tras el logrado en Perth con su país, en la Copa Hopman, mantiene al suizo como segundo jugador en la lista ATP de este lunes, pero a tan solo 115 puntos del español Rafael Nadal.
Por segundo año consecutivo, Federer necesitó cinco sets para coronarse campeón en el primer grande de la temporada, en una final que sorpresivamente se disputó con el techo cubierto de la central, porque la organización del torneo así lo decidió al aplicar el índice WBGT, que combina factores como la humedad, el viento y la radiación solar, que superó el límite de 32,5 grados.
Otro gran partido
Veinticuatro horas después de la gran final femenina entre la danesa Caroline Wozniacki y la rumana Simona Halep, Federer y Cilic brindaron otro gran partido como colofón de este torneo, en el que el suizo ha puesto distancia de nuevo en cuanto a los grandes, y ya supera en cuatro a Rafael Nadal, con 16, a Pete Sampras, con 14, y a Roy Emerson y Novak Djokovic con 12.
De nuevo volvió a sufrir Federer, que quería ganar el torneo por segunda vez sin ceder un solo set, como lo logró en 2007 y como también hizo en Wimbledon el año pasado, y que salvó una situación conflictiva en el comienzo del quinto set, cuando Cilic lanzado y demoledor con su derecha tras ganar el cuarto set, tuvo una bola de rotura en el comienzo del definitivo.
El suizo salvó la situación y a continuación rompió a su rival, para poner luego más distancia en el marcador con 3-0, y jugar a placer ante Cilic, que al final ha sido el único jugador que este año ha logrado arrebatar a Federer, no solo un set, sino dos.
Cilic, que aparecerá este lunes como tercer jugador del mundo, no pudo vengar su derrota el pasado año en Wimbledon, cuando disputó la final perjudicado por ampollas en los pies.
El croata acabó con 16 saques directos, lejos de los 24 de Federer, aunque con uno de ellos marcó los 214 kilómetros por hora, y cedió su saque en seis ocasiones. Solo pudo romper al suizo dos veces. El de Basilea acabó ganando 152 puntos, por 128 de Cilic.
Los aficionados que llenaron la Rod Laver Arena disfrutaron de una gran final, en la que Federer volvió a levantar la copa Norma Brookes por sexta vez, emocionado y llorando para seguir haciendo historia con 36 años.
Halep acabó deshidratada en el hospital
Este domingo también se ha conocido que la rumana Simona Halep acabó hospitalizada la víspera por deshidratación tras perder la final femenina ante la danesa Caroline Wozniacki por 7-6, 3-6 y 6-4, según informa la Asociación Femenina de Tenis (WTA),
Halep, de 26 años, fue atendida aproximadamente durante cuatro horas por deshidratación y recibió el alta este domingo por la mañana, han explicado la organizadora del circuito femenino en Twitter así como la prensa de su país.
La tenista rumana mostró los primeros síntomas de agotamiento en el segundo set de la final (6-7 y 3-2), solicitó asistencia médica y le tomaron la tensión. La final se disputó bajo un intenso calor.
Halep se recuperó y luchó por el título hasta la última gota de su sudor, lo que le llevó a imponerse en la segunda manga a pesar de que también empezó a sufrir calambres en su pierna izquierda.
"No puedo, no puedo" gritaba la jugadora a su banquillo, mientras Wozniacki, algo nerviosa, tampoco remataba la faena en el tercer set en el que tenía que demostrar su superioridad.
Halep, que perdió el número uno del ránking mundial, terminó por resentirse del esfuerzo físico que realizó durante el torneo, tras haber superado cinco puntos de partido en dos encuentros durante las dos semanas de la competición.