Lucas Eguibar: "Ojalá veamos otra vez a un español en un podio olímpico"
- El 'rider' donostiarra será el abanderado español en los Juegos de Pyeongchang
- Junto a Javier Fernández y Queralt Castellet, es la principal opción a medalla
- Si lo logra, se lo dedicará a Israel Planas: "Mucho de lo que sé es gracias a él"
Hace 26 años, Blanca Fernández Ochoa se colgó la última medalla de España en unos Juegos de Invierno. Aún faltaban dos años para que llegase al mundo Lucas Eguibar (San Sebastián, 9-2-1994), que aspira ahora a acabar con ese vacío en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang 2018. "Ojalá, yo creo que esta vez sí puede ser", afirma optimista a RTVE.es desde Feldberg (Alemania), donde finalizó su preparación en la última prueba de la Copa del Mundo antes de los Juegos.
Eguibar, principal baza española en la disciplina de boardercross de snowboard, forma parte del trío de potenciables medallistas españoles en la cita coreana, junto al patinador Javier Fernández y a la 'rider' Queralt Castellet. Lucas, siguiendo los pasos de sus compañeros en Vancouver y Sochi, portará la bandera de España en la ceremonia de inauguración como abanderado de un equipo ilusionante. Lo hará, además, en un día muy especial.
Pregunta (P.): Vaya regalazo...
Respuesta (R.): Pues sí, si ya me puse feliz cuando ví que la inauguración era el día de mi cumpleaños, porque para mí estar en unos Juegos es un sueño... ahora todavía más. Es un regalo superimportante. Valoro la confianza que han puesto en mí y lo voy a disfrutar al máximo.
P.: Aspira a todo en sus segundos Juegos, ¿qué expectativas tiene?
R.: Voy contento y tranquilo, voy a intentar mejorar lo que hice la última vez [fue séptimo en Sochi 2014], así que esta vez espero meterme en la final. Los objetivos nuestros son estar lo más alto posible. Estamos entrenando para ello, así que para eso vamos.
P.: ¿Ha llegado el momento de que un deportista español vuelva a subirse a un podio olímpico invernal?
R.: ¡Ojalá! Hace mucho tiempo que no se consigue nada y yo creo que esta vez puede ser, ojalá que sea así y veamos a un español en el podio otra vez. Javier [Fernández] lleva mucho ganado y se lo merece, y Queralt [Castellet] también. La conozco desde hace muchísimos años y se merece una medalla por su trayectoria y por todos los años que ha estado ahí. Y yo... bueno, sé que soy joven y tengo mucho tiempo por delante... pero eso no quiere decir que no vaya a darlo todo, voy a hacer mi papel y, si tenemos suerte y sale bien, estaremos delante.
P.: ¿Siente presión?
R.: Yo lo llevo bien, sé el trabajo que he hecho y lo que puedo hacer. Para mí, una competición es una competición y más en mi deporte, en el que salimos seis a la vez y puede pasar cualquier cosa, así que voy sabiendo que igual me pueden eliminar en la primera ronda porque me tiran pero también sé que puedo estar delante. Voy a ir a disfrutar y a hacer la carrera que mejor pueda.
P.: Nació en San Sebastián, al nivel del mar y a muchos kilómetros del copo de nieve más cercano, ¿cómo llega a ser profesional del snowboard?
R.: Pues yéndote fuera [ríe], ya desde pequeño iba muchísimo a la nieve y luego estuve unos años en Jaca estudiando. Allí tocaba nieve todos los días en invierno y ahora viajamos muchísimo y tocamos mucha nieve, pero tenemos menos facilidades que otros. Por ejemplo, uno de mis mejores amigos [y rivales] es austríaco y vive a 20 metros del telesilla. Yo lo vi y dije... ¿cómo compites contra eso? allí el esquí, la nieve… es el deporte rey. Nosotros no tenemos esas facilidades pero bueno, el trabajo que hemos hecho hasta llegar aquí, aunque ha sido complicado en algunas partes, ha sido muy bueno. Mira donde hemos acabado.
P.: Ha dicho más de una vez que le falla la técnica, ¿cómo trabaja para mejorarla?
R.: Sumando horas. Es lo que estamos haciendo cada año. Este año ha sido el mejor para mí, hemos tocado muchísima nieve y todo consiste en seguir trabajando. Tengo 23 años, hay que seguir trabajando día a día y todavía me quedan muchos años que mejorar, estoy en mi fase de aprendizaje. Tenemos la vista puesta a largo plazo... pero eso no significa que no vayamos a salir a ganar. Yo voy a salir a ganar pero parte de la cabeza está aprendiendo.
P.: Su disciplina es espectacular. Si la vemos desde el sofá con el corazón en el puño, ¿cómo es una carrera por dentro?
R.: Dentro de la carrera es más tranquilo de lo que parece. Es, digamos, como los jugadores de rugby, que ves como se están pegando todo el rato y dentro es más llevadero. Nosotros es un poco igual. Sí que hay muchas veces que hay muchísimas caídas y puede pasar de todo, y pasa… pero hay otras veces que es mucho más tranquilo. Cada uno tiene su espacio, y si eres inteligente en la pista sabes alejarte del bulto para que no haya caídas y demás.
P.: Le hemos visto muchas veces a cola de carrera esperando su momento para dar el zarpazo. ¿Le gusta correr así?
R.: Como gustarme, me gusta más ir delante, pero muchas veces no lo consigo y me quedo enmedio. Pero para ir enmedio sí que prefiero estar detrás, porque con los del medio hay mucha pelea y ahí es cuando ocurren las caídas.
P.: Vaultier, vigente campeón olímpico y del mundo, parece el gran favorito... ¿Qué rivales tiene en mente?
R.: Sí, Vaultier es el gran favorito, lleva unos años muy buenos y ahora está haciendo muy buenas carreras. Luego está el austriaco, mi amigo, le veo muy fuerte; el italiano, que está haciendo muy buenas carreras ahora; el australiano y algún americano, que también puede llegar muy bien. Y al final, pues eso, habrá unas seis o siete personas muy fuertes. Intentaremos estar entre ellos para poder meternos en la final.
P.: Ya conoce el circuito. ¿Será un rival o un aliado?
R.: El circuito se podría decir que es un aliado pero como yo lo pienso también lo piensa todo el mundo. Me gusta, tuve la oportunidad de probarlo hace dos años en una Copa del Mundo y me gustó mucho. Al final, en aquella carera acabé décimo por algunos errores, pero me gustó. Para esta carrera estamos pensando continuamente la estrategia que hacer, porque allí si llegas cuarto o quinto a la recta final, con el rebufo te puedes meter segundo o primero.
P.: A Pyongchang irá con Israel Planas en la cabeza...
R.: Si, por supuesto. Estuvimos seis años trabajando juntos y [su muerte] fue un mazazo para mí. En este deporte estamos muchísimo tiempo fuera y al final somos como una familia. Estoy más con ellos que con mi familia y estar tantos años con una persona y que de repente desaparezca... te afecta. Encima 'Isra', cuando llegó, me sacó mucho porque era una persona muy machacadora e intentaba conseguir todos sus objetivos gracias al trabajo y al esfuerzo. Me enseñó eso y mucho de lo que sé es gracias a él. Se le echa en falta. Si gano se lo dedicaré a él y a toda su familia, por supuesto.
P.:¿Estará su hermano Nico en Corea? ¿sueña con repetir aquel abrazo de Sierra Nevada?
R.: Sí, va a estar, aunque va a ser difícil ver el abrazo [entre hermanos, tras la plata mundial], porque en los Juegos hay muchísima seguridad, creo que no le van a dejar ni acercarse [ríe], pero ojalá. Eso sí, salga lo que salga, mi familia va a estar ahí apoyándome y seguro que hay un abrazo. Llevan tantísimos años yendo a la otra punta del mundo por verme competir, desde que solo era un 'hobby' hasta ahora, que es un honor tenerles cerca en unos Juegos.