Javier Fernández se sube al fin al podio olímpico con un bronce
- El español consigue al fin la medalla en unos Juegos
- Ha sido tercero por detrás del doble campeón Hanyu y el también japonés Uno
- Es la primera presea de la historia del patinaje artístico para España
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Javier Fernández ha conseguido la medalla que le faltaba, la olímpica, con un bronce en Pyeongchang. El madrileño, doble campeón del mundo y séxtuple campeón de Europa, ha quedado por detrás de los japonses Hanyu, que ha revalidado el título, y Uno, y ha hecho historia para el patinaje español.
A pesar de completar un programa libre limpio, Fernández ha recibido la cuarta puntuación este sábado (197,66 puntos), lo que le ha hecho perder una posición respecto a la clasificación del viernes.
Así que no sólo ha sido superado por su compañero de entrenamientos y favorito Yuzuru Hanyu, que ha ganado con un total de 317,85 puntos, sino por el también nipón Shoma Uno, que ha sumado 306,90 a pesar de una caída al empezar su actuación final; mientras que Javi se ha quedado con 305,24.
El madrileño de 26 años ha interpretado una coreografía alusiva a Don Quijote, basándose en la versión inglesa de El hombre de la Mancha --el musical de Broadway--, que ha cambiado sobre la marcha (en su segundo elemento no pudo completar los cuatro giros previstos e intentó compensar después añadiendo un giro más en otro salto).
El mejor este sábado ha sido el prometedor estadounidense Nathan Chen (18 años), que se ha recompuesto tras su fiasco del viernes, donde quedó 17º, y ha remontado hasta la quinta plaza en el cuadro global.
En el programa corto, Fernández se metió en el papel de Chaplin en Tiempos modernos, que también ejecutó sin fallos. Con estos dos ejercicios, en sus terceros Juegos, Superjavi, que entrena desde hace años en Norteamérica, ha dicho que se ha "sacado la espina" de su cuarto puesto en Sochi 2014 (en Vancouver 2010 fue 14º).
Y ha marcado un hito para su país, pues es la primera medalla olímpica para el patinaje artístico español, en el que es prácticamente un pionero.
Es además la segunda presea que logra España en Pyeongchang tras el bronce de Regino Hernández en snowboard cross, y la cuarta en la historia de los juegos invernales. Antes de esta cita en Corea del Sur sólo lo habían logrado Blanca Fernández Ochoa, bronce en 1992, y su hermano Paquito, oro en 1972, ambos en la prueba de eslalon de esquí alpino.