'Curra y corre', el secreto para conciliar trabajo y deporte

• La iniciativa pretende conciliar la pasión por correr con la vida laboral
• El club está integrado por miles de runners con historias de superación
• Su objetivo más inmediato es preparase para el Maratón de Madrid

Cartel de la plataforma 'Curra y corre' para preparar el Medio Maratón de Madrid.

Siete de la mañana. Suena el despertador. Prepara el desayuno. Despierta a los niños. Sal de casa camino del colegio para dejarlos. Conduce hasta el trabajo. Vuelve a casa. Un momento, un momento. Quien no se ha sentido atrapado por la rutina diaria y se ha visto en dificultades para introducir en su agenda una hora y media para practicar su pasión: correr. Esa pausa necesaria para los amantes del running es lo que propone la plataforma 'Curra y Corre', que pretende conciliar la práctica del deporte con la agenda laboral.

La iniciativa cuenta con numerosos curranners que tratan de llevar a la práctica algunos de sus objetivos como son la mejora de la salud física y mental para cualquier trabajador que desarrolle una actividad física regularmente. Sabemos que corriendo se dejan atrás muchas cosas, como los problemas y el estrés acumulado durante el día.

Éste martes 13 de marzo la plataforma se suma al primer entrenamiento oficial para alcanzar el objetivo planteado: correr, disfrutar y compaginar la agenda laboral y el deporte y, de paso, prepararse para la disputa del Maratón de Madrid. A la 'quedada' han acudido cientos de runners con muchas historias detrás.

Historias de superación que sirven de ejemplo

Historias que hablan de dificultades superadas, de motivación y metas y límites que derribar. Historias como la de Marcos Vieito que afirma que "conciliar el trabajo con la vida familiar es difícil y tras ser padre por primera vez apenas había corrido en contadas ocasiones. Ahora, tras serlo por segunda vez he decidido compartir con mi hijo mayor esos momentos de carrera. Llevo apenas un mes corriendo al menos una vez por semana."

El caso de Miguel Cerdán es diferente. Con apenas 15 años, llegó a pesar 103 kilos, llevando una vida tremendamente sedentaria hasta que un día empezó a correr para cambiarlo. "Los primeros meses fueron muy muy duros, no pasaba de los 7 minutos seguidos corriendo y me causaba mucha vergüenza por lo que, tampoco quería ir a correr. Después de mucho tiempo, esfuerzo (y 25kilos menos), conseguí participar en mi primera media maratón".

“He conseguido perder 25 kilos y participar en mi primera media maratón“

Iria es triatleta, trabajadora y madre: "¿Cómo lo hago? Con mucho sacrificio cuando algo realmente te gusta y te hace feliz sacas tiempo de donde haga falta . La suerte es que trabajo a turnos por lo que siempre tengo medio día para poder organizar las distintas disciplinas. El fin de semana suelo salir muy temprano para poder aprovechar el día y dedicarlo a mi pequeña revolución".

Los beneficios de compaginar el deporte con el trabajo llevan a los 'curranners' a desempeñar su labor profesional con más motivación y energía aunque es difícil estar exento de dificultades tal como dice Rafael: "Trabajo en unos grandes almacenes, y conciliar la vida laboral, familiar y deporte es complicado. Correr casi de madrugada, en horas que no sean familiares es una continua lucha. Cuando en la familia eres el único que hace deporte es difícil hacerles ver el esfuerzo que se realiza en cada entreno".

“Conciliar la vida laboral, familiar y el deporte es complicado“

Antonio empezó a correr cuando dejó de fumar, para ocupar un tiempo del día sin ansiedad. "Empecé a dar continuidad y a correr carreras populares. El salto grande fue preparar mi primer medio maratón. Fue entonces cuando terminé de hacer del running una actividad mas del día a día. De ello surgió una auto-propuesta sin fecha de caducidad: correr al menos 10km en el mayor número de ciudades posible. Cada vez que salgo de viaje llevo las zapatillas y busco un hueco para sumar una mas a la lista."

Historias y más historias que se cimentan en un acto tan sencillo como importante: calzarte tus zapatillas y salir a correr simplemente por el placer de hacerlo, para cumplir una promesa o para superar un reto.