Mario Mola, el triatleta de la 'tricorona' mundial

• El mallorquín ha certificado este domingo en Australia su tercer Mundial consecutivo
• Es el sucesor natural del también español Javier Gómez Noya, único pentacampeón de la historia

El triatleta español Mario Mola.

El tercer Mundial consecutivo de Mario Mola pone de manifiesto la progresión del mallorquín, que a sus 28 años está llamado a suceder a Javier Gómez Noya en el panorama del triatlón español y mundial.

Mola ha emulado al gallego al enlazar tres títulos entre 2016 y este de 2018, al igual que Gómez Noya hiciera entre 2013 y 2015.

Precisamente durante ese trienio de hegemonia 'gallega', Mola esperaba su momento acompañando a su amigo en el podio. En 2013 fue bronce mundial y los dos años siguientes, subcampeón.

Luego llegaría el año 2016, dramático para un Gómez Noya que celebraba su designación para el Premio Princesa de Asturias y aspiraba al oro en Río. Una inoportuna lesión en un entrenamiento frustró al pentacampeón.

De esa forma tomaría el testigo Mola, aunque en los Juegos Olímpicos no pudo pasar del octavo puesto. El Mundial sería su vía de escape y su plataforma para dar el golpe de autoridad.

No obstante, aun ganando hubo una imagen que le 'robó' una parte de protagonismo: la llegada de los hermanos Brownlee en la prueba final de Cozumel (México), que dio la vuelta al mundo al ver a Alistair llevando a rastras a su hermano Jonathan desfallecido.

La imagen de Jonathan Brownlee dando bandazos, sin poder controlar su cuerpo, ha dado la vuelta al mundo. Incluso los atletas profesionales pueden acabar en el hospital tras disputar un triatlón, prueba durísima que se ha puesto de moda entre los aficionados.

Una imagen que fue aplaudida por muchos compañeros, entre ellos el propio Mola, y criticada por expertos médicos. Incluso fue revisada por si suponía motivo de descalificación de Jonathan Brownlee, subcampeón del mundo, en cuyo caso la plata habría pasado para otro español, el talaverano Fernando Alarza.

Entre la lesión de Gómez Noya y el afán de protagonismo de los Brownlee, Mario Mola necesitaba un golpe de autoridad y ese llegó al año siguiente, ganando el Mundial en dura pugna con el pentacampeón gallego.

Ambos llegaron con opciones a la carrera final de Rotterdam y Gómez Noya atacó apurando las suyas, pero solo pudo ser cuarto y Mola le superó colgándose la plata de la prueba y el oro final.

Fue el momento del relevo definitivo. Gómez Noya ha optado este año por las pruebas 'ironman' cediendo el testigo a su amigo Mola, que se pone a dos títulos de igualar el mejor registro de mundiales de triatlón de la historia.