El curling español reclama "instalaciones" tras ganar una medalla de plata mundial
- Sergio Vez, 'skip' del equipo mixto español, revela que no perciben "ningún tipo de ayuda"
- El curling le viene de familia: "Está a años luz de nosotros", relata su madre, Estrella Labrador
El deporte español celebra estos días un nuevo éxito con la medalla de plata en modalidad mixta en los Mundiales de curling. Con apenas 170 licencias en España, cuatro de ellos han llegado hasta la cima: Oihane y Leire Otaegi, Mikel Unanue y Sergio Vez, quien ha atendido a RTVE.es en plena vorágine con un mensaje claro: "A ver si tras este éxito llegan por fin unas instalaciones".
El cuarteto que -por motivos obvios- no se dedica profesionalmente al curling, tiene que hacer encaje de bolillos para juntarse y entrenar. Como explicaba Vez a Tablero Deportivo (RNE) el pasado domingo, uno de sus centros de entrenamiento es la pista Txiri-Berri de San Sebastián, "pero el hielo está pensado para hockey o patinaje, no es un hielo tan pulido como el del curling".
Por tanto, si quieren hielo de curling no les queda otra que coger un avión a Suiza y aprovechar el fin de semana: "Cuando vamos a Suiza entrenamos unas seis horas y media el sábado, más otras cuatro horas y media el domingo, antes de salir el vuelo. El resto de equipos entrenan unas cuatro horas al día en hielo como máximo, pero durante seis días a la semana". Es decir, menos horas y peor repartidas.
Su madre es Estrella Labrador, pionera del curling a nivel nacional y que también sabe de las dificultades del entrenamiento: "Cuando vamos en coche porque los vuelos directos son muy caros, tenemos unas cinco horas de viaje hasta Burdeos. De ahí cogemos el avión a Ginebra o Zúrich, y de ahí, un coche de alquiler para ir hasta la pista. Pero si te quedas aquí solo tienes un par de horas el sábado y otro el domingo, y encima tienes que emplear 20 o 30 minutos en preparar la pista porque antes han estado patinando".
"Mirad lo que están consiguiendo sin instalaciones, ¿qué podrían conseguir con ellas?", se pregunta Labrador. Por eso agradecen cualquier ayuda, pero la inversión en una pista especializada en curling les parece prioritaria.
Sobre todo para Sergio, que es quien menos ayudas económicas percibe del equipo: "No tenemos beca ADO, en mi caso ninguna ayuda personal. Mis compañeros sí pero tampoco ayuda para mucho. Tenemos ayudas al club para subvencionar algunas competiciones, pero los viajes y los gastos de material nos los tenemos que sufragar nosotros. Al año perdemos más que ganamos".
“Nos sufragamos los viajes y el material. Al año perdemos más que ganamos“
Estrella vuelve a terciar en su favor: "Les tienes que dar algo a cambio. Nosotros ponemos las ganas, pero si no hay un respaldo y las instituciones no nos ponen pistas no podemos ofrecer nada. Vivimos en Basauri, Vizcaya, pero estamos en un club de San Sebastián y antes en uno de Vitoria. Nuestros compañeros reciben subvenciones por las medallas en su provincia. Nosotros no las recibimos porque no estamos empadronados allí. Las pedimos aquí en Vizcaya y tampoco nos las dan porque no competimos en esta provincia, estamos en un limbo".
La plata mundial es un impulso para ellos, sobre todo en lo anímico. "Agradecemos un montón la respuesta de los medios. Esperamos que llegue a más gente y nos pueda ayudar... Porque antes incluso de ganar la medalla nos planteábamos si merecía la pena seguir haciendo esto. No solo por lo económico, sino porque cansa bastante tener que estar buscando una pista de hielo, mentalmente cansa. Pero esperamos que esto sea el subidón definitivo", afirma Sergio.
“Nuestro sueño era poder competir en unos Juegos y ese sueño sigue ahí“
Y también el horizonte. El curling es un deporte olímpico y la posibilidad de competir en unos Juegos rellena el depósito de la moral: "No solo por esta medalla, sino desde que empezamos nuestro sueño era poder competir en unos Juegos y ese sueño sigue ahí. Aunque está difícil, esto nos anima a seguir a pesar de las adversidades".
Por ello el siguiente paso es reclamar, es "escribir tanto a la Federación como al CSD a ver qué tipo de ayudas podemos percibir de esto. Tenemos que buscar todos los resquicios para ver qué compensación nos corresponde, porque cualquier tipo de ayuda nos va a venir de vicio".
Un deporte de familia
En su casa de Basauri se respira curling. Estrella nos cuenta cómo fueron los inicios con el padre de Sergio, Alberto Vez, con quien el actual subcampeón del mundo ha compartido vestuario: "A Alberto y a mí nos gustaban mucho todos los deportes y veíamos el curling en Eurosport. Al principio nos pasaba lo que a mucha gente, que no lo entendíamos: ¿por qué tiran la piedra fuera? ¿para qué barren? La hermana de Alberto vivía en Vitoria y los primos de Sergio hacían patinaje. A alguien se le ocurrió que había un deporte muy raro, también en hielo, que los padres podrían practicar también. La World Curling Federation se presentó en Vitoria para hacer un clínic, nos avisaron y nosotros dijimos que nos apuntábamos a un bombardeo. Y allí nos entró el gusanillo".
Y relata una anécdota sobre cómo empezo Sergio: "Recuerdo los primeros torneos en Madrid. Los chavales hicieron un grupito muy majo con unos de Madrid, se presentaron a un torneo y les tocó jugar contra nosotros... y les ganamos. Sergio lloraba, porque tenía diez añitos, claro. Recuerdo que le dije: 'Sergio, tranquilo, llegará el día en que nos ganes'. Han pasado diez años y él está muy por encima de nosotros".
El aludido responde a su vez: "Si hay alguien mejor ya hace años que no se hace esa pregunta, creo que ha quedado clara (ríe). Hay algo peculiar y es que empezamos a jugar juntos, en familia, y desde hace algunos años hemos dejado de hacerlo. A veces nos costaba en el hielo separar lo familiar de lo deportivo, no siempre es bueno tener tanta confianza dentro del equipo. En competición oficial ya no competimos juntos, en otro tipo de torneos sí. Pero yo creo que es más sano ahora".
“Sergio es un capitán muy completo. Desde hace años está a años luz de nosotros“
Estrella se deshace en elogios hacia su vástago: "Es un deporte sobre todo muy mental. Tienes que tener muy buena cabeza, sobre todo en el puesto de 'skip' o capitán que ocupa Sergio. Tienes que tener clara la estrategia, no puedes bajar la guardia en ningún momento, y al final acabas agotado mentalmente. Lo bueno que tiene Sergio, y se lo valora el mundo del curling español, es que es muy completo físicamente, técnicamente y mentalmente. Desde hace tiempo está a años luz de nosotros".
Pero entre tanto elogio de propios y extraños, toca pensar en la siguiente maleta. Apenas tiene unos días de descanso Sergio Vez hasta su siguiente compromiso: "El jueves noche salimos para Donosti y el viernes por la mañana volamos a Suiza otra vez, a un torneo el fin de semana. Y la semana que viene otro; y la siguiente, a Suiza otra vez, y luego al Europeo en Tallín (Estonia)... así que es un no parar. Esperamos no resfriarnos siquiera porque no nos podemos permitir ni un resfriado. Pero vamos a disfrutar del tirón de esta medalla y a ver si podemos obtener una ayuda económica y, sobre todo, unas instalaciones".