Cilic le da a Croacia el triunfo definitivo para ganar la Copa Davis 2018 en Francia
- El jugador croata se impone en el cuarto y decisivo partido al francés Lucas Pouille, 7-6(3), 6-3 y 6-3
- Tras el triunfo logrado en 2005, Croacia se adjudicó la última ensaladera en su formato tradicional
Croacia ha logrado su segunda Copa Davis, después de que Marin Cilic derrotara al francés Lucas Pouille, 7-6(3), 6-3 y 6-3, en el cuarto partido, y sumara así el tercer y definitivo punto.
Tras el triunfo logrado en 2005 y después de haber perdido en 2016 la final contra Argentina, Croacia se adjudicó la última ensaladera en su formato tradicional, antes de la renovación aprobada para el año próximo.
Con un globo en la tercera bola de partido, Cilic cerró la victoria y acudió al abrazo de sus compañeros. Croacia sumó los tres primeros puntos individuales, en los que Cilic y Borna Coric no perdieron un solo set, y ni siquiera cedieron su saque frente a los franceses.
Pouille, preferido a Jérémy Chardy por el capitán francés, Yannick Noah, para disputar el cuarto partido, elevó algo el nivel, pero fue insuficiente para hacer temblar al número 7 del mundo, sereno y sólido a sus 30 años para conducir a su nación hacia la segunda ensaladera. El francés, de 25 años, relegado en la primera jornada pese a ser el convocado de mayor ránking, aguantó bien los envites de Cilic durante la primera manga, pero en el juego de desempate, el set cayó del lado croata.
Si ya era difícil la tarea de Pouille, que ha firmado una triste temporada, en la que ha pasado de tutear el "top 10" a ser ahora 32, con un set abajo se aventuraba faraónica. Su juego se fue deteriorando y, aunque en ningún momento tiró la toalla, se vio muy lejano de lo necesario para ganar a un rival como Cilic.
El mejor de los croatas ya se había mostrado intratable el viernes contra Jo-Wilfried Tsonga, a quien derrotó en el segundo duelo, después de que Coric abriera con triunfo el inaugural frente a Chardy.
Francia había ganado el doble este sábado, gracias a Nicolas Mahut y Pierre-Hugues Herbert, que derrotaron a los croatas Mate Pavic e Ivan Dodig y forzaron el cuarto duelo. Hasta ahí llegó su resistencia, doblegados por un equipo superior al que nunca dieron la impresión de poder superar.