El Betis pasa a dieciseisavos mientras Sevilla y Villarreal se complican su futuro

• El equipo verdiblanco se impone 1-0 al Olympiacos y se jugará el primer puesto en la última jornada
• El Sevilla cayó en Lieja (1-0) y el Villarreal no pasó del empate en Glasgow (0-0)

Sergio Canales celebra el gol de la victoria bética sobre el Olympiacos.

Un gol de Sergio Canales en la fase final de la primera parte le dio la victoria al Betis ante el Olympiacos griego (1-0), lo que deja al equipo español en los dieciseisavos de final de la Europa League, con lo que en la última jornada se jugará ser primero del grupo F en el campo del Dudelange luxemburgués.

El preparador bético, Quique Setién, fiel a la tónica que lleva toda la temporada, hizo muchas rotaciones, hasta seis, en comparación al equipo que salió el pasado domingo en Villarreal y en esta ocasión puso de entrada a dos puntas, el paraguayo Tonny Sanabria y Sergio León.

Independientemente de la alineación, el conjunto sevillano quiso como siempre ser el dominador del balón aunque el Olympiacos le discutió mucho desde el arranque la posesión de la pelota e incluso fue el que tuvo las primeras aproximaciones claras.

El Betis gozó, rebasado el cuarto de hora, de una gran ocasión para poner el 1-0, cuando el senegalés Pape Cissé le hizo un penalti al argelino Aïssa Mandi, aunque al lanzamiento de Sergio León respondió con una gran parada el meta portugués José Sá.

Respondió con peligro para el equipo visitante otra vez Bouchalakis, con un remate cabeza que acabó con el balón rozando la base de un poste en unos minutos de mucho ritmo y muy disputados que desequilibró para el Betis Sergio Canales con un remate desde fuera del área potente y cruzado en el minuto 38. En la segunda parte, el Betis controló bien el 1-0 ante un rival con poco poder en ataque, aunque la mínima ventaja dejó la incertidumbre hasta el pitido final.

El Sevilla se complica la vida al perder con justicia en Lieja (1-0)

Por su parte, el Sevilla está obligado a vencer en la última jornada al Krasnodar ruso para no quedar eliminado en la fase de grupos, después del partido que este jueves ha perdido por la mínima, con un gol de Djenepo, en Bélgica frente al Standard de Lieja (1-0).

Los locales dominaron el choque en arranque en el que parecía que el Sevilla no estaba cómodo y concedía tres llegadas, dos cabezazos de Emond, hábil al tomarle la espalda a Mercado, y un disparo desviado de Mehdi Carcela, el claro referente del juego ofensivo del Standard.

Los sevillistas encararon la segunda parte sabedores de que el empate les daba el pase, con un espíritu calculador que castigó a la hora de juego Djenepo, autor del 1-0 tras una pared con Carcela, y obligaba a Machín a ordenar una ofensiva total, lo que complicaba la expulsión de Sarabia por doble amarilla (min. 67).

La única aproximación peligrosa de los visitantes en el último tramo fue un gol bien anulado a Ben Yedder por fuera de juego, a pesar de que su entrenador, Pablo Machín, sacó a Muriel y André Silva para terminar con cuatro delanteros sobre la hierba.

Sí tuvo algunos opciones de aumentar su ventaja el Standard, que estrelló dos veces en la misma jugada el balón en la madera en el tiempo de prolongación, primero tras salvar Vaclik una cesión de Kjaer que se colaba en su propia portería y después al estampar Djenepo en el travesaño un remate sin oposición.

El Villarreal desaprovecha su superioridad numérica y no pasa del empate (0-0)

El Villarreal desaprovechó una inmejorable oportunidad para haber obtenido la clasificación matemática para los dieciseisavos del final tras empatar sin goles en Escocia ante el Rangers, en un encuentro en el que dispuso de superioridad numérica durante toda la segunda parte.

El equipo español se la tendrá que jugar en la última jornada en La Cerámica ante el Spartak de Moscú, tras ser incapaz de superar a un rival ante el que dispuso de las mejores ocasiones con igualdad de jugadores en el terreno de juego.

La superioridad técnica del conjunto español fue contrarrestada por el entusiasmo del Rangers, que, con un juego muy físico y una presión muy adelantada, no dejó al Villarreal imprimir el ritmo de juego que más le convenía.