Campazzo y Scola guían a Argentina y la meten en semifinales
- La 'albiceleste' se impuso 97-87 a Serbia y se medirá en semifinales al ganador del Estados Unidos - Francia
Ficha técnica:97 - Argentina (25+29+14+29):
Campazzo (18), Brussino (4), Garino (15), Delía (4), Scola (20) -quinteto inicial-, Gallizzi (2), Laprovittola (8), Deck (13), Vildoza (11), Fjellerup (2) y Caffaro.
87 - Serbia (23+26+18+20): Jovic (7), Bogdanovic (21), Lucic (12), Jokic (16), Raduljica -quinteto inicial-, Bjelica (18), Guduric (5), Marjanovic, Micic (5), Simonovic (3) y Milutinov.
Árbitros: Cristiano Maranho (BRA), Tolga Sahin (ITA), Michael Weiland (CAN). Sin eliminados.
La selección argentina de baloncesto peleará por las medallas en el Mundial de China 2019, después de haberse impuesto 97-87 a Serbia en cuartos de final. Argentina se convierte así en la primera semifinalista del torneo y ahora espera conocer a su rival que saldrá del duelo entre entre EE.UU y Francia.
Campazzo (18 puntos y 12 asistencias) y Scola (20 punots y 5 rebotes) guiaron a la albiceleste que, sobrepasaron al conjunto balcánico con una tormenta de triples (12 aciertos de 27, 44%).
A esta Argentina no le pesa la sombra de la 'Generación Dorada' -con la que convive por medio de un impresionante Scola, a sus 39 años-, y seguirá soñando tras dejar por el camino a una Serbia hoy desorientada, que desperdició su innegable talento esta tarde, pese a los 21 puntos de Bogdan Bogdanovic y al 'doble-doble' de Nikola Jovic (16 y 10 rebotes).
El inicio fue una pista del plan de Argentina, que acogotó a Serbia con su defensa y con la creatividad de Facu Campazzo, hasta el punto de irse ocho tantos arriba (12-4, min. 3) con un triple de Scola. Serbia siguió insistiendo en su superioridad por el interior, sacó dos faltas a Marcos Delía y tres a Tayavek Gallizzi en 5 minutos, e igualó el encuentro de esa manera (16-16, min. 6).
La albiceleste llegó con una ligera ventaja al final del primer cuarto (25-23), pese al petróleo que Serbia sacaba en la pintura (15 rebotes serbios, 8 en ataque, por solo dos argentinos).
El técnico argentino Sergio 'Oveja' Hernández decidió renunciar a competir por el interior en centímetros, para hacerlo en astucia con un quinteto pequeño que logró robar balones y salir, hasta el punto de irse ocho arriba (36-28, min. 13) tras encadenar un triple de Luca Vildoza y otro de Nico Laprovittola tras una antideportiva de un Boban Marjanovic desesperado por sus pérdidas de balón.
No encontraba el equipo de Djordjevic la manera de reducir a los correosos argentinos (7 robos albicelestes y 10 pérdidas serbias hasta entonces), que además veían el aro de un tamaño XXL (9 aciertos de 16 en tiros de tres hasta el descanso, 56% de efectividad). La respuesta de los tiradores serbios permitía dejar la ventaja al descanso solo en cinco puntos (54-49).
Igualado hasta el descanso
La gran estrella serbia, Bogdan Bogdanovic, hasta entonces un poco desapercibido, puso a Serbia en el duelo nada más retornar de los vestuarios con triple, pero con una inteligente bandeja de Delía y un triple de Scola, Argentina retomaba su diferencia.
La jugada se repetía cíclicamente: acercamiento de Serbia, casi empate de la mano de Bogdanovic o Vladimir Lucic y nuevo estirón argentino, fuera con el quinteto titular o con una segunda unidad en la que brillaba con luz propia Luca Vildoza (66-59, min. 26).
No obstante, la tenacidad serbia redujo la distancia al mínimo al final del penúltimo acto (68-67) gracias a los puntos de Bogdanovic y Bjelica, y a dos defensas en las que las torres balcánicas provocaron la noche sobre el argentino Delía.
Llegó hasta a adelantarse Serbia en el inicio del parcial definitivo con un triple de Guduric, pero de nuevo se encontró con un chaparrón triplista suramericano a manos de Garino y Campazzo. A la fiesta se sumó Scola, con dos canastas tras dos rebotes defensivos de Deck, y Campazzo que puso 9 arriba (82-73, min. 36).
En el conjunto balcánico comenzaban a aflorar las caras de incredulidad cuando Laprovittola se anotaba un 2+1 en una canasta en caída, y cuando de nuevo Scola anotaba sobre la defensa de Jokic y recibía otra falta, esta vez fallada por el único representante de la 'Generación Dorada' en este equipo (87-76).
Serbia, confiada ya exclusivamente a sus tiradores, consiguió acortar el marcador a 91-85 con 1:20 en el marcador gracias a un triplazo de Bogdanovic, pero una canasta de Campazzo y un robo de Deck sobre Vasilije Micic que él mismo acabó en mate, pusieron un 95-85 que era ya una sentencia a 48,7 segundos para el final.
El 97-87 final, una venganza alegórica de la final del Mundial de Indianápolis 2002 -donde Argentina cayó 84-77 ante la antigua Yugoslavia, también con Scola entonces-, permitirá al combinado albiceleste seguir soñando en China, donde ya espera a su rival en semifinales, que saldrá del Estados Unidos-Francia del miércoles.