España doblega a una combativa Australia y jugará su segunda final de un Mundial contra Argentina
- La selección española se impone por 95-88 tras dos prórrogas y jugará contra Argentina
- Sigue la final del Mundial de baloncesto, España - Argentina, en directo, este domingo a las 14:00 horas en RNE y RTVE.es
Ficha técnica:
95 - España (22+10+19+20+15): Ricky Rubio (19), Rudy Fernández (2), Juancho Hernangómez (8), Víctor Claver (9) y Marc Gasol (33) -cinco titular-, Pau Ribas (7), Pierre Oriola (-), Willy Hernangómez (-) y Sergio Llull (17).
88 - Australia (21+16+18+16+9+8): Patty Mills (34), Matthew Dellavedova (6), Joe Ingles (4), Aron Baynes (6) y Jock Landale (3) -quinteto inicial-, Andrew Bogut (12), Mitch Creek (2), Nic Kay (16) y Chris Goulding (5).
Árbitros: Guilherme Locatelli (BRA), Tolga Sahin (ITA) y Omar Bermudez Mariscal (MEX). Sin eliminados.
Incidencias: Primera semifinal del Mundial de China, disputada en el Wukasong Sports Center de Pekín ante unos 9.000 espectadores que llenaron el recinto.
La selección española de baloncesto jugará la final del Mundial de China 2019, la segunda de su historia, tras vencer a Asutralia después de un disputado encuentro entre dos de las mejores escuadras del torneo que se decidió en dos prórrogas (95-88). Argentina, que también jugará su segunda final al vencer a Francia (80-66) habrá tomado buena nota.
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Los australianos venían con la vitola de expertos tiradores. La respuesta de España nada más empezar fue triple de Ricky Rubio tras un rebote de Marc Gasol, robo de balón y contragolpe con mate de Juancho Hernangómez.
El menor de los Hernangómez anotó otro triple (8-4) con el que puso fin a una mini racha de ataques fallados. El ex ACB Joe Ingles y Patty Mills, como era de esperar, tiraban del carro de los 'boomer'.
Australia es un gran equipo y se encargó de demostrarlo otro NBA como Matthew Dellavedova con un triple que les dio la primera ventaja (11-12), pero constestado inmediatamente con una penetración de Ricky.
La igualdad era máxima, aunque al final del primer cuarto se llegó con una 'mandarina' de Sergio Llull sobre la bocina (22-21), que evidenció también una cierta superioridad española en la rotación, en la aportación de los jugadores que no militan en la NBA.
Sin embargo, a España le costó arrancar en el segundo cuarto, lo que aprovechó Mills para abrir una mini brecha (22-27). Sergio Scariolo pidió tiempo para solucionar un apagón de casi cuatro minutos sin anotar una sola canasta.
Apagón anotador en el segundo cuarto
Ricky estrenó nuestro marcador en el segundo cuarto, pero Australia estaba enrachada y Mitch Creek puso la máxima con cinco puntos seguidos (24-32). El base de El Masnou y Víctor Claver recortaron algo la distancia (28-32), pero con tres minutos de distancia entre ambos. Ganaban las defensas sobre los ataques.
La selección volvía a encontrar su talón de Aquiles en los triples, con tres intentos seguidos fallados. Mills anotó el suyo y Marc al menos pudo meter tiros libres con los que nos fuimos cinco abajo al descanso (32-37), tras un pobre parcial de 10-16. La ducha le iba a ir bien a Dellavedova, desquiciado con las faltas por la defensa de España.
Los de Scariolo no era la primera vez que se iban por detrás en el marcador al descanso. Ocurrió también contra Italia (30-31), pero la desventaja fue menor entonces. Había que contrarrestar a Mills como fuera y en la reanudación avisó el base de los Spurs con otro triple, que fue contestado por Gasol con cinco puntos seguidos (37-40); el quinto triple del equipo en 20 intentos, muy flojo porcentaje (25%).
Podrían haber sido seis si los árbitros no hubieran interpretado palmeo de Claver en el intento siguiente de Rudy. Pero lo peor no fue eso, sino que España daba señales de ir justa de gasolina, mientras que Australia metía el turbo y superaba la barrera de diez (39-50).
El cansancio acumulado hacía mella en fallos sobre intentos que antes se metían. Había que defender mejor, esa era la clave, y tirar de galones como los de Marc para bajar la barrera psicológica (42-50). Un fallo electrónico en uno de los marcadores regaló un tiempo muerto extra para tomar aire a falta de 2:43 para el final del cuarto.
Cómo se sudaba cada canasta. Un triple de Llull (47-52) llegó en una posesión con tres rebotes seguidos, es decir, con dos intentos de canasta fallados antes del lanzamiento del 'aeroplano de Mahón'. España seguía en el partido, al menos.
Y su mejor jugador hasta entonces, Ricky Rubio arreglaba una situación que empezó complicada tras serle pitada una técnica: Mills anotó el libre, pero Ricky robó organizó la jugada y anotó una canasta (51-55) con la que se llegó al final del cuarto. Diez minutos para completar la remontada.
Dos prórrogas de infarto
Un parcial de 2-6 obligó a Scariolo a pedir tiempo muerto. A la selección le seguía penalizando el rebote, faceta en la que los 'boomer' llevaban diez de distancia al final del tercer cuarto y se siguió ampliando en los minutos siguientes. Marc volvió a la pista y triple (58-63).
La campeona del mundo de 2006 mantenía intacto el orgullo. Otro triple de Ribas y una penetración de Llull devolvieron la esperanza (65-67) a falta de 3:44 para el final. Pero lo que se ganaba en cinco minutos, se perdía en 30 segundos. Nada estaba dicho.
De una ventaja de cinco a falta de tres minutos, se pasó al 69-70 del último minuto. Ellos también notaban la presión. Mills cometía falta en ataque sobre Rudy a falta de 28 segundos; la veteranía del capitán.
Llull fallaba la canasta, pero Bogut cometía personal y habría tiros por el 'bonus'; ocho segundos. Marc, la estrella, el campeón de la NBA y había tiempo muerto. Australia diría la última palabra, o la penúltima: falta sobre Mills a cuatro segundos.
El escolta de los Spurs solo mete el primero y España coge el rebote. Ricky lanza sobre la bocina y el aro escupe la pelota. Había prórroga (71-71) y, a buen seguro, más de un infarto.
Marc Gasol luce sus galones
Cinco puntos seguidos de Gasol levantaron puños del banquillo en el inicio de la prórroga, pero contestó rápidamente Mills (76-74). Se repetía el duelo con Pau del partido por el bronce de Río 2016.
Los mejores de cada equipo volvieron a la línea de libres para certificar la igualdad y la segunda prórroga (80-80). Hasta seis jugadores de España llevaban más de 30 minutos sobre la pista, pero es que Mills superaba los 40 minutos.
En un partido que bien podría haber sido la final, Llull apareció de nuevo para anotar dos triples que contribuyeron a poner el 90-82 a falta de dos minutos, pero Baynes redujo a cinco con otro.
Sin embargo, los australianos se vinieron abajo al mismo tiempo que su estrella. Las pérdidas de balón hicieron aflorar los nervios y no fueron capaces de contrarrestar el nivel de concentración de España, que por segunda vez en su historia jugará una final. Argentina ya espera.