España tira de épica para alcanzar su décima final

• Nadal y Feliciano vencen un reñido punto de dobles a los británicos por 7-6 y 7-6
• Previamente el toledano perdió su partido contra Edmund e igualó Rafa venciendo a Evans
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Rafa Nadal y Feliciano López celebran un punto en el dobles contra Gran Bretaña.

Rafa Nadal y Feliciano López han metido a España en su décima final de Copa Davis, tras doblegar a los británicos Jamie Murray y Neal Skupski en el punto de dobles por un doble 7-6 en 2h16. Los dos se han jugado este sábado y madrugada del domingo toda la eliminatoria.

Y es que, previamente, ambos han sido los designados para los duelos individuales. El toledano ha perdido el primer punto ante Kyle Edmund (6-3 y 7-6) y el manacorense ha empatado arrollando a Daniel Evans por 6-4 y 6-0.

El número uno del mundo suma con la de este sábado 28 victorias consecutivas en el cuadro individual de Davis. En lo que va de semana en la Caja Mágica ha sostenido al equipo con cuatro victorias en 'singles', sin ceder un solo set, y tres en dobles. No se le puede pedir más.

Incluyendo al balear, hasta cuatro jugadores de individuales distintos ha probado Sergi Bruguera al sumarse la baza de este sábado de Feliciano. De los cuatro, solo Nadal lo ha jugado todo y más.

En la semifinal anterior, Canadá logró la primera clasificación de su historia para una final tras derrotar a Rusia en el definitivo punto de dobles. Ambos equipos han llegado al 'top 4' jugándosela con solo dos tenistas, por lo que el cansancio acumulado será un hándicap para el ganador. Duelo entre un novato contra un pentacampeón de Davis, que además tiene el factor cancha a su favor.

Una pareja de ganadores

Nadal no jugaba junto a Feliciano desde 2005 en Italia, donde ambos perdieron el punto de dobles aunque la 'Armada' ganó aquella eliminatoria por la permanencia. Por entonces Rafa despuntaba y ahora, con el resultado de este sábado, su balance en dobles es de 7-5. Ambos son, además, los supervivientes de las dos últimas 'Ensaladeras' ganadas por España (2009 y 2011), junto al hoy ausente Granollers.

El porqué de la elección de los dos zurdos del equipo se fue aclarando a medida que avanzaba el primer parcial: set por encima de la hora (63'), sin roturas aunque con ocasiones para ambas parejas y resuloción en el 'tie break'. Duelo de sacadores.

Jugársela en el desempate es casi como a cara o cruz, pero también una prueba de resistencia emocional. El dúo español mostró más confianza en su juego en puntos largos y se pusieron 5-2 merced a dos miniroturas.

Roberto Bautista, que llegó de Castellón de dar el último adiós a su padre, pasó de ser consolado por Nadal al principio de la jornada a celebrar su 'passing' de revés como un aficionado más (7-6 (3)).

La Caja Mágica rugió de nuevo como ante Argentina, pero quedaba un set. En el otro banquillo, Andy Murray animaba a su hermano y a Skupski con cara de preocupación, porque veía sacar a Rafa Nadal a 213 km/h.

Paradójicamente era el saque del balear el más atacado, pero por la superioridad de Jamie en la red frente a Feliciano. Así fue como tuvieron que salvar una bola de rotura en el cuarto juego del segundo set.

Un segundo parcial que era obligado ganar para la 'Armada' por un motivo: Murray y Skupski venían más frescos. No habían jugado en cuartos y no tenían un partido de semifinales acumulado como los dos españoles. Eso se veía reflejado en los juegos en blanco con sus saques.

Tuvo que ser Nadal el que salvara la primera bola de set en contra con su saque y forzar el segundo 'tie break'. Mucha tensión. Bronca a la jueza de silla por un saque británico que no quiso revisar y Rafa enrabietado.

Con esos mimbres llegó la épica, salvando una primera ventaja rival Feliciano con un gran resto de revés. Nadal anulando otra con un globo inverosímil. En total, cuatro bolas de set desperdiciadas por Murray y Skupksi, pero los españoles aprovecharon su segunda de partido ante el delirio de la Caja más Mágica que nunca.

Nadal acompleja a Evans y empata

Rafa Nadal celebra un punto ante Daniel Evans.

El de Birmingham solo se ha enfrentado una vez a Nadal antes de este partido, y ha sido este mismo año en Canadá con victoria del manacorense. El resultado entonces fue de 7-6 y 6-4 para Rafa y en la Caja Mágica el primer set casi llevó el mismo camino.

Evans aguantaba los puntos largos y el juego de fondo del número uno del mundo, quien por contra se notaba más cómodo haciendo el de saque y red. Nadal dispuso de dos bolas de rotura en el cuarto juego y otras dos salvó Evans en el décimo, pero a la quinta la mandó fuera.

Punto a punto se fue encontrando más suelto, conectando más 'passings' y de nuevo encontró dos bolas de 'break' en el segundo set sin necesidad de esperar tanto: 2-0 con un soberbio resto cruzado. Luego Rafa contuvo el amago de reacción con su potente saque.

En ese tercer juego tuvo el británico la opción de meterse, pero ante el fracaso de su estrategia se vino abajo. Fin del partido. A partir de ese momento, Nadal sacó el rodillo y firmó el 'rosco' en apenas media hora de juego.

Feliciano cae primero ante Edmund

Fotomontaje con Kyle Edmund (i) y Feliciano López (d), en el partido de Copa Davis.

El toledano ha sido elegido a última hora tras resentirse Pablo Carreño de sus molestias en el calentamiento. Y este, a su vez, sustituyó a Roberto Bautista el viernes por el fallecimiento de su padre. El de Castellón, pese a no poder jugar, ha querido acompañar al resto del equipo desde el banquillo.

El baile de cambios no pareció sentar bien a Feliciano, que comenzó algo frío y desubicado. Edmund se puso 3-0 con 'break' de por medio y un parcial de 12-2 en puntos jugados.

Aunque el español, de 38 años, reaccionó y al menos se encontró a sí mismo con su saque, no llegó a inquietar al británico. Este se apuntó el primer parcial en 27 minutos.

Partido de juegos rapidos, puntos cortos, saque y volea. Duelo de sacadores en la pista Manolo Santana; este tipo de partidos lo gana el que no comete errores, y Feliciano llevaba un set en contra por no entrar a tiempo en el partido.

Edmund, nacido en Johannesburgo (Sudáfrica), soportó la presión en el décimo juego para levantar dos bolas de set que eran a la vez de rotura. A cada saque iban deletreando ambos la palabra 'tie break', donde el británico se lució para poner por delante a su equipo en la eliminatoria.