La contaminación por los fuegos afecta a los tenistas en vísperas del Abierto de Australia

• Una jugadora tiene que abandonar la fase previa por un ataque de tos en pleno partido
• Los entrenamientos de Nadal y otras estrellas en Melbourne se ven alterados

Un espectador con mascarilla, este martes en una grada del Abierto de Australia

La elevada contaminación del aire que se registra en Melbourne como consecuencia de los incendios forestales que azotan Australia está causando graves problemas a los mejores tenistas del mundo en vísperas del primer Grand Slam del año.

De hecho, este martes la serbia Dalila Jakupovic ha sufrido un ataque de tos en pleno partido de la fase previa del Abierto de Australia, y la organización ha tenido que suspender los primeros entrenamientos de los jugadores del cuadro principal, cuya competición comienza el lunes que viene.

Australia vive la temporada de incendios forestales más larga de su historia moderna, en la que han muerto hasta la fecha 27 personas y ha ardido una superficie de más de 8 millones de hectáreas, el equivalente a Irlanda, informa Efe.

Las autoridades de Melbourne han tenido que tomar medidas para proteger a la población como el cierre de piscinas al aire libre y algunas playas, añade la agencia.

En el portal AirVisual, que mide la calidad del aire, algunas zonas de la capital del estado de Victoria alcanzaron niveles de contaminación "arriesgados" con una concentración en el aire de hasta 361 partículas PM2.5, relacionadas con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias. Se trata del peor dato en grandes ciudades del mundo actualmente, según fuentes oficiales citadas por AFP.

Y algunas de las consecuencias de esta contaminación se ha vivido en Melbourne Park, escenario del primero de los cuatros grandes torneos del circuito de élite del tenis mundial.

Durante un partido de la fase de clasificación, Jakupovic se tuvo que retirar al final del segundo set cuando iba ganando a la suiza Stefanie Vogele. Ya antes había solicitado asistencia médica por problemas respiratorios y tras sufrir un ataque de tos no pudo retomar el juego y necesitó ayuda para abandonar la pista después de una hora y 53 minutos, informa Efe.

"Me sentía mal de verdad, nunca había experimentado algo así. Tenía mucho miedo de colapsar porque ya no podía caminar. Ni siquiera tengo asma ni problemas respiratorios por el calor. Me asusté", explicó después, citada por Europa Press.

No fue el único problema del día en el Abierto de Australia, ya que la canadiense Eugenie Bouchard también tuvo que recibir atención médica ante sus problemas para respirar durante su encuentro ante la china You Xiaodi. Finalmente pudo volver a jugar y se llevó la victoria en tres sets, añade la agencia.

"Nuestra prioridad es la salud y la seguridad de los jugadores"

Y según AFP se ha alterado el programa de entrenamientos para esta jornada, en la que estaba previsto que el número uno del mundo, Rafael Nadal, tuviera su primera toma de contacto con la superficie del Open, en una pista al aire libre, sesión que ha sido suspendida.

"Se tomarán más decisiones en base en los datos recogidos y en estrecha consulta con nuestro equipo médico, la Oficina de Meteorología y los científicos. Como siempre, nuestra prioridad es la salud y la seguridad de nuestros jugadores, nuestro personal y nuestros aficionados", aseguró el torneo, según Europa Press.

Además, un partido amistoso también en Melbourne que enfrentaba a la rusa Maria Sharapova y la alemana Laura Siegemund se ha suspendido cuando la exnúmero uno del mundo iba ganando 7-6, 5-5 después de que ambas jugadoras se quejaran por los problemas para respirar, informa Reuters.

Más allá del deporte, la crisis ha generado una serie de protestas en Australia para reclamar al Gobierno del país medidas para proteger el medio ambiente y a la población. También en el mundo se han convocado manifestaciones de solidaridad y para reclamar a la comunidad internacional una reacción ante la emergencia climática, que según numerosos expertos ha influido en esta oleada de incendios.