Messi y el Barça: condenados a entenderse

• La intención del argentino de activar su claúsula unilateral para desvincularse del club abre muchos interrogantes
• La jurisprudencia en casos similares de los organismos competentes prima el derecho al trabajo sobre el litigio legal

Messi y el Barça, condenados a un acuerdo para evitar una pugna judicial

La decisión de Leo Messi de desvincularse de forma unilateral del FC Barcelona activando la claúsula que le permite hacerlo cada final de temporada puede enconar una relación entre el jugador y el club que podría acabar en los tribunales, ya que la entidad entiende que el plazo expiró el 10 de junio como estaba establecido en el contrato.

Más allá de la conmoción que supone la ruptura entre la estrella y la entidad, las aristas legales que sobresalen en este espinoso asunto pueden alargar un proceso que no beneficia a ninguna de las dos partes, teniendo en cuenta que el comienzo de la Liga está fijado para el próximo 12 de septiembre a la espera de que se sortee el calendario del campeonato.

Las razones de ambas partes

El club entiende que el contrato del argentino se renovó automáticamente por una temporada más al entender que el argentino no comunicó su intención de abandonar la entidad en la fecha tope del 10 de junio que se reflejaba en la claúsula del contrato de Messi que marcaba el calendario de la temporada pre-COVID.

Desde la directiva confían en mantener al jugador y tienen como baza el acogerse a la cláusula de rescisión de contrato del futbolista que está cifrada en 700 millones de euros.

Sin embargo, desde el entorno del futbolista, entienden que lo excepcional de la situación ha hecho que el final de la temporada lo marca el 14 de agosto con la eliminación en Champions ante el Bayern y el 23 como final de temporada, por lo que la primera interpretación sobre los plazos ya está sobre la mesa y deberá ser un juez si ambas partes no llegan a un acuerdo quien establezca quién tiene razón.

Según el experto en derecho del fútbol, Santiago Nebot, entiende que la razón está de parte del club, ya que “la fecha del 10 de junio no se puede extrapolar a estos días de agosto ya que está puesto en relación a la planificación de la temporada siguiente, justo 20 días antes de que se abra el mercado de fichajes que iba a ser el 1 de julio”.

Santiago Nebot, experto en derecho del fútbol, cree que la comunicación de Messi es una "estrategia para negociar"

Este mismo experto considera que el movimiento de Messi busca crear dudas en los responsables que deben negociar su posible salida del club para otorgarse una situción ventajosa en la negociación.

¿Qué puede pasar?

Varios son los escenarios que se abren a partir de este momento tras la intención de Messi que ahora fía su futuro a una posible negociación o a un partido que no se jugará en el césped sino en los tribunales mientras Josep María Bartomeu se ha comprometido a dimitir si el argentino dice públicamente que se queda.

El jugador podría solicitar el transfer provisional a la FIFA para su salida del club que sería concedido una vez que el sistema de transferencias de la FIFA lo conceda una vez presentada y verificada la documentación.

Presumiblemente el máximo organismo del fútbol concedería el permiso independientemente del litigio legal que ambas partes pueden entablar ya que la jurisprudencia en estos casos, tanto de la FIFA como del TAD o el TAS, suele primar el derecho al trabajo del jugador por encima de la disputa legal, por lo que el jugador podría tener el permiso incluso sin haber llegado una solución económica, circunstancia que debería establecer un juzgado.

La UEFA presumiblemente tampoco paralizaría el fichaje de Leo Messi, tan solo exigir que su nuevo club cumpla las condiciones exigidas por el Reglamento del Juego Limpio Financiero y los límites salariales establecidos.

En las últimas décadas no existen prededentes de que se haya paralizado un fichaje por una disputa legal entre un jugador y su club, por lo que el argentino y el Barça están condenados a entenderse como dice el tango: "Sacrifique el corazón en mi adiós; hoy te vuelvo a encontrar y me pierdo; entre las ternuras de tu alma y tu voz; ¡Con qué angustia te hice a un lado!.