El pelotón se da una tregua y Ackermann gana la etapa tras la descalificación de Bennett
- El alemán de Bora ha sido declarado ganador tras una polémica maniobra del velocista del Deceuninck
- La etapa, con final en Aguilar de Campoo, ha sido casi de completa calma en el pelotón
- Vuelta a España 2020: Etapa 10 en directo, viernes 30 de octubre a las 14:30 en Teledeporte y +tdp
El alemán Pascal Ackermann (Bora) ha ganado la novena etapa de la Vuelta tras la descalificación de Sam Bennett (Deceuninck) por una acción irregular en el sprint en Aguilar de Campoo (Palencia) al término de una etapa de calma casi total en la que lógicamente no ha habido cambios en la clasificación general y Richard Carapaz (Ineos) sigue líder.
El irlandés, el mejor en las llegadas masivas esta temporada, impuso su potencia frente al resto de hombres rápidos, empezando por Ackermann y Gerben Thijssen (Lotto). Sin embargo, en el último kilómetro Bennett se tocó intencionadamente hasta dos veces con otro corredor (Emils Liepins, del Trek) al que desplazó de su trayectoria, acción por la que el primero fue finalmente relegado por los comisarios.
Ha sido un desenlace fuera de la carretera para una etapa con poca competitividad con la que se completó la primera mitad de la Vuelta que hasta este jueves sí había tenido mucha disputa.
La salida se dio en Castrillo del Val, en la periferia de la ciudad de Burgos, y nada más empezar los 158 kilómetros de recorrido atacaron dos ciclistas de los equipos españoles invitados a la carrera: Aritz Bagües, del Caja Rural, y Juan Felipe Osorio, del Burgos.
Con un terreno casi siempre llano o en ligerísimo ascenso --primero hacia el oeste, en paralelo al cercano Camino del Santiago; y luego hacia el norte, junto al Canal de Castilla, remontando el curso del Pisuerga-- y con largas rectas, la escapada tenía todas la de perder a pesar de que enseguida tomó cinco minutos de ventaja.
En el pelotón los equipos de los hambrientos velocistas enseguida marcaron un ritmo suficiente para tener siempre controlado al dúo cabecero,
Entre imponentes silos y preciosas iglesias románicas a los lados de la ruta, los ciclistas se han regalado por fin una etapa entera de calma.
Entre galletas
Una tranquilidad que prácticamente solo se rompió en la travesía de Melgar de Fernamental, donde Héctor Sáez sufrió una caída en la que el casco le evitó seguramente un fuerte traumatismo.
Curiosamente, el otro ciclista implicado en ese accidente fue Ackerman, que se dolió de una pierna. Como luego se demostró, no fue nada y la galleta del día, esta vez la buena, le esperaba en la meta en Aguilar de Campoo, localidad famosa por la fabricación de estas dulces pastas.
Antes de la llegada, en el otro momento con algo en juego, el sprint intermedio, Ineos mostró su concentración mandando a Van Barlee adelantarse al grupo y así evitar sorpresas con la bonificación que quedaba para el tercero en pasar bajo esa pancarta.
En otras carreras estas metas volantes son, por distintos motivos, un aliciente para los hombres rápidos. En la Vuelta, donde pocas veces las llegadas son masivas y la clasificación de la regularidad parece reservada para los mismos que pelean la general, son estos los que tienen más interés no ya en los puntos, sino en las pequeñas bonificaciones añadidas (de tres, dos y un segundo).
En fin, ni siquiera un tramo con pequeños repechos y carretera muy estrecha en torno al embalse de Aguilar, en el circuito final, donde fue neutralizada la fuga (a falta de 21 km) tensó la carrera. Así que un inoportuno pinchazo de Roglic no supuso mayores problemas para el segundo clasificado.
El único aliciente era la volata definitiva. Lotto y sobre todo Bora disputaron al Deceuninck su hegemonía en esa aproximación, cuando se produjo el lance a la postre decisivo que privó a Bennett de su segunda victoria en esta Vuelta.
El beneficiado fue Ackermann, que ha logrado estrenarse en su debut en la ronda española. El ciclista alemán suma así su tercer triunfo en una gran vuelta, tras los dos que obtuvo en el Giro del año pasado. Curiosamente, la carrera que encumbró a Carapaz, quien mira ya a las etapas de montaña del fin de semana para afianzar su maillot rojo.
Antes, este viernes la décima etapa discurrirá entre Castro Urdiales y Suances, en Cantabria. Serán 185 km con un solo puerto de tercera categoría a 60 de la meta.
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