El australiano Gardner gana la carrera de Moto2 y el italiano Bastianini, el Mundial

• Gardner ha sumado en Portimao su primera victoria en la categoría de Moto2, que tiene en Bastianini al nuevo rey
• Crónica: Albert Arenas, campeón del mundo de Moto3 | Perfil: Albert Arenas, el campeón en mitad del caos

El piloto australiano Remy Gardner (Kalex) al frente de la carrera de Moto2 del GP de Portugal.

El australiano Remy Gardner (Kalex) se ha adjudicado en el Gran Premio de Portugal su primera victoria en la categoría de Moto2 por delante del italiano Luca Marini (Kalex) y el británico Sam Lowes (Estrella Galicia 0'0 Kalex).

El italiano Enea Bastianini (Kalex), que fue quinto, se proclamó matemáticamente campeón del mundo de Moto2.

La quinta plaza de Bastianini le garantizó el título mundial en una carrera que Jorge Martín acabó en la sexta posición, con Augusto Fernández octavo, Xavier Vierge (Kalex), décimo, y Arón Canet también en los puntos, decimoquinto, a pesar de tener que cumplir con una doble vuelta larga durante la carrera por adelantarse en el momento de la salida.

Bastianini reconoce que ha sido una temporada "fantástica y difícil"

El italiano Enea "La Bestia" Bastianini (Kalex) se ha proclamado campeón del mundo de Moto2 con la quinta posición en el Gran Premio de Portugal en una temporada que para él "ha sido una temporada fantástica y difícil por la covid-19, pero al final he conseguido el título".

Bastianini todavía no era capaz de saber cómo le sentaba el título, pero quiso dedicar su victoria "al equipo, a mi novia y a todos en general en el mejor día de mi vida".

"Estoy muy feliz después de una carrera que era imposible de ganar, pues se podría decir que ha sido desastrosa, pero he podido terminar quinto, lo que al final me ha permitido ser campeón", destaca el piloto italiano.

Oliveira, profeta en su tierra en el cierre de MotoGP

El portugués Miguel Oliveira (KTM RC 16) salió decidido a ser "profeta en su tierra" y lideró la carrera de MotoGP que se disputó en el circuito de Portimao de principio a fin y con pasmosa autoridad, por delante del australiano Jack Miller (Ducati Desmosedici GP20) y del italiano Franco Morbidelli (Yamaha YZR M 1).

Oliveira salió como una exhalación nada más apagarse el semáforo con el claro objetivo de intentar ser protagonista en la carrera de "su" casa, pero tras su estela había una serie de pilotos "ávidos" de cerrar la temporada con un buen resultado.

El campeón del mundo en título, el español Joan Mir (Suzuki GSX RR) que salía vigésimo -penúltimo-, cubrió la primera vuelta en la duodécima posición, mientras el italiano Francesco "Pecco" Bagnaia (Ducati Desmosedici GP20) tuvo que tomar el camino de talleres con problemas físicos tras darse un golpe con la moto de Joan Mir.