El aplazamiento de los Juegos a 2021 conlleva un sobrecoste para Tokio de 2.700 millones de dólares por culpa del coronavirus
- La pandemia COVID-19 obligó al aplazamiento y obliga a aumentar el gasto por las medidas extraordinarias que exige
El aplazamiento por un año de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y las medidas contra la pandemia de coronavirus representarán un coste adicional de unos 2.700 millones de dólares, según ha informado el comité organizador.
La cifra fue dada a conocer con motivo de una reunión entre el comité organizador de Tokio 2020, el Gobierno de Japón y las autoridades metropolitanas de la capital nipona, sede de las pruebas olímpicas que comenzarán el 23 de julio próximo.
Si se tienen en cuenta los costes asociados al aplazamiento, como el alquiler de sedes o gastos laborales, la suma llega a 1.800 millones de dólares, y el resto es lo que costarán las medidas para evitar una infección entre atletas y espectadores.
El principal responsable de ese coste adicional será el Gobierno metropolitano de Tokio, y, en menor cuantía, el comité organizador de las pruebas olímpicas y el Gobierno de Japón, según la distribución difundida este viernes.
El gobierno metropolitano de Tokio tendrá que abonar unos 120.000 millones de yenes (949 millones de euros/1.154 millones de dólares), de los cuales las dos terceras partes serán por el coste adicional del aplazamiento y el resto por las medidas sanitarias para evitar infecciones.
El comité organizador se encargará de cubrir un total de 103.000 millones de yenes (815 millones de euros 991 millones de dólares), sólo por el aplazamiento de las pruebas olímpicas, pero no cubrirá los gastos extraordinarios por la pandemia de coronavirus.
Finalmente, el Gobierno de Japón pagará un total de 71.000 millones de yenes (561 millones de euros/683 millones de dólares), de los cuales casi el 79 % serán por las medidas sanitarias.
De acuerdo con el presupuesto más reciente, de diciembre de 2019, los JJ.OO. de Tokio 2020 iban a costar inicialmente 1,35 billones de yenes (10.839 millones de euros/12.969 millones de dólares), la mayor parte repartido entre el comité organizador y la ciudad de Tokio.
Las cifras fueron aportadas tras una reunión en la que participaron la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, el presidente del comité organizador, Yoshiro Mori, el CEO del comité, Toshiro Muto, y la ministra para los JJ.OO., Seiko Hashimoto.
"El coste adicional se abordó de acuerdo con la promesa de división de papeles (en la preparación de los JJ.OO.) de 2017", dijo Muto en una comparecencia ante los periodistas después de que se cerrara la reunión.
También recordó las medidas que han sido adoptadas para reducir el coste de las pruebas olímpicas, que implican la simplificación de ceremonias de inicio y de cierre, entre otros aspectos.