Los españoles en la NBA 20/21: cambios, reconstrucciones y la búsqueda de otro anillo

• Marc Gasol y Serge Ibaka vivirán en Los Ángeles, aunque serán rivales en Lakers y Clippers
• Ricky Rubio abre segundo capítulo en Minnesota, donde se encontrará con ‘Juancho’ Hernangómez

Ricky, Marc y Pau, algunos de los españoles protagonistas en la temporada NBA 20/21

La tardía agencia libre de la temporada 20/21 ha traído consigo cambios significativos para la armada española en la NBA. De los seis representantes nacionales en la liga norteamericana, tan solo ‘Juancho’ Hernángomez seguirá con la camiseta que defendió el pasado curso, la de los Timberwolves. Allí se reencontrará con Ricky, que vuelve a la franquicia que lo drafteó en el 2009.

También vivirán en la misma ciudad Marc Gasol y Serge Ibaka. Ambos gozarán del calor de Los Ángeles, pero con uniformes distintos. Los que más dudas presentan son ‘Willy’ y ‘Willy’Pau. El madrileño, porque va con un contrato mínimo bajo el brazo tras unos últimos cursos diluido; el catalán, porque lleva sin disputar un minuto desde hace casi dos años y sigue en la búsqueda de equipo.

Ricky Rubio (9 temporadas | 11,3 pts y 7,8 ast de media)

Ricky Rubio intenta un lanzamiento a canasta con los Timberwolves EFE

Promesas incumplidas. En el verano del 19, Ricky Rubio se comprometió con los Phoenix Suns por tres campañas. Al base del Masnou le vendieron un “desafío ilusionante” que, cuando parecía carburar (8 de 8 en la burbuja de Disney), se terminó por romper. A los de Arizona se les puso a tiro Chris Paul y fueron a por el candidato al Hall of Fame de cabeza. Ricky, por su parte, puso rumbo a Oklahoma con lo puesto, pues, cuatro días más tarde, fue traspasado a los Timberwolves.

Así, el español vuelve a su ‘casa’ en la NBA. Y su rol tiene pinta de ser el mismo que cumplió en Phoenix: sostén en los momentos calientes y mentor de jóvenes. El equipo está en plena reconstrucción, con D’Angelo Russell y Karl Anthony-Towns como cabezas visibles y otras estrellas en ciernes como Anthony Edwards, reciente uno del draft, y Malik Beasley, que cayó de pie tras su traspaso vía Denver. En contra del catalán, se encuentra la sobrepoblación de jugadores exteriores que presenta Minnesota. Por primera vez en su carrera, puede dejar de ser el base titular. De hecho, en pretemporada, ha iniciado varios partidos desde el banco, aunque Ryan Saunders, su entrenador, ha reconocido “estar probando”.

Marc Gasol (12 temporadas | 14,6 pts y 7,6 reb de media)

Marc Gasol ya viste la camiseta de los Lakers EFE

Cerrando el círculo. El ‘pequeño’ de los Gasol ha firmado dos temporadas con los Lakers, el equipo que lo drafteó en el 2007. Será la primera vez que se vista de púrpura y oro, ya que, antes de poder debutar, sus derechos fueron transferidos a Memphis, donde se convirtió en santo y seña del ‘Grit and Grind’, en el intercambio por su hermano Pau, artífice de la penúltima época dorada de los angelinos.

La última es, precisamente, la que están viviendo en la actualidad. Son el equipo campeón y lo que han buscado es apuntalar la plantilla. Marc será el pívot titular y el bastión en la pintura, en especial tras las salidas de Howard y McGee. Cuando esté en cancha, el balón pasará por sus manos, sobre todo para repartir juego en el poste algo, donde es élite, y para abrir el campo con su mejorado lanzamiento de tres, aunque los puntos tendrán que ir a cargo de James y Davis. Sobre su figura solo corre una sombra: el físico. El curso pasado se le hizo largo como consecuencia de disputar el anillo con los Raptors y el Mundial con España, lo que provocó su peor curso en la NBA. Con casi 36 años, toca ver si es capaz de empezar fresco. Si vuelve con las pilas cargadas, Hollywood disfrutará de su exquisito talento en la búsqueda del decimoctavo trofeo Larry O`Brien.

Serge Ibaka (11 temporadas | 12,6 pts y 7,4 reb de media)

Serge Ibaka, durante el calentamiento de un partido de la pretemporada EFE

¿Qué pasa, Kawhi? Serge Ibaka ha cambiado el frío de Toronto por el calor de Los Ángeles. Será miembro de los Clippers durante dos temporadas, en un trato que ha pillado a los medios a contrapié. El hispanocongoleño renunció a una sustanciosa renovación con los Raptors para pelear por su segundo anillo. Y en esa búsqueda, se volverá a unir a Leonard, como en el éxito del 2018.

Ibaka era uno de los jugadores más cotizados del mercado de agentes libres. Su 38,5% en triples el curso pasado lo convierten en una amenaza desde la línea de tres. Si a ello le suma un descomunal físico que le permite cambiar en defensa y frenar a jugadores pequeños, su habilidad taponadora (dos veces mejor taponador de la NBA) y su tacto a la hora de finalizar los dos para dos, lo ejemplifican como un baloncestista ideal para el ritmo de juego actual. Ah, no hay que olvidar la química que puede crear en el vestuario. Un aspecto que le costó caro a los Clippers de Doc Rivers cuando el sol más calentaba.

Pau Gasol (18 temporadas | 17 pts y 9,2 reb de media)

Pau Gasol, con su último equipo NBA EFE

Objetivo Tokio. Los días de Pau Gasol como jugador de baloncesto parecen estar contados. El pívot catalán lleva sin disputar un partido como profesional desde marzo de 2019. La grave lesión en el pie que sufrió está poniendo en jaque su retirada sobre las canchas, aunque Gasol lo está intentando todo para volver. En las últimas fechas, se le ha visto activo en redes sociales y los rumores de su vuelta a los Lakers sobrevuelan los medios de comunicación de los Estados Unidos. Sería un regalo a su carrera despedirse, junto a su hermano, en el equipo que le dio el éxito en la NBA.

Si Pau logra un nuevo contrato en la liga norteamericana, será por el mínimo de veterano y en un rol más de mentor que de jugador de muchos minutos. No se puede olvidar que ya cuenta con 40 primaveras y que el estilo de juego ha mutado en su contra. En cualquier caso, la diana del pívot está puesta en los Juegos Olímpicos. Scariolo ya ha dejado claro que cuenta con él, “si puede dar 10 minutos buenos”. Y con Pau España es más España, aunque solo esté sentado en el banco, si no, recuerden la final del Mundial 2006.

‘Juancho’ Hernangómez (4 temporadas | 6 pts y 4,1 reb de media)

'Juancho' Hernángomez intenta un pase durante un partido EFE

Como un guante. Si hablamos de que el nuevo baloncesto va contra el estilo de Pau, uno de los que mejor se adapta es ‘Juancho’. El madrileño es un alero alto que puede jugar de falso cuatro, con capacidad para defender a hombres exteriores y a algún que otro interior. Es fiable desde el triple y, lo más importante, parece haber encontrado su sitio en Minnesota.

Los Wolves decidieron ofrecerle la renovación al español por tres años a razón de más de 20 millones de dólares, y ‘Juancho’ dijo sí. Ha caído en un grupo joven con el que podrá disponer de minutos para seguir desarrollándose. De hecho, en el último curso los 14 partidos que disputó fue como titular. Y ese año no parece que tendrá mucha más competencia. Además, contará con Ricky Rubio como ‘nuevo’ español en el equipo y tendremos ‘Spanish connection’.

‘Willy’ Hernangómez (4 temporadas | 6,1 pts y 4,3 reb de media)

'Willy' Hernangómez, en el banquillo de los Pelicans EFE

Todo o nada. Para ‘Willy’ las últimas temporadas parecen ir cuesta arriba. De entrar en los quintetos de mejores rookies del año a firmar con Pelicans por el mínimo y solo por un año. Quedó relegado en Nueva York y en Hornets tampoco ha sido capaz de hacerse hueco constante en la rotación, sobre todo el año pasado con unos números de tan solo 31 partidos (cero titularidades) con solo 12 minutos de media por noche.

El español se enfrenta a un reto mayúsculo en Nueva Orleans. La rotación interior de la franquicia es feroz, hasta cinco hombres, incluido Hernangómez, pueden jugar de pívot de forma canónica, sin contar aquellos ‘cuatro’ que por circunstancias del guion también gocen de minutos en el puesto. Pero por ganas no va a ser, el pívot ya ha dejado claro que está "capacitado para cualquier cosa que pida el entrenador y el equipo". No obstante, si este año no encuentra tampoco opciones, puede que su luz en los Estados Unidos termine por apagarse. Volver a Europa no sería mala opción, donde podría ser un jugador determinante.