El náutico de Palma de Mallorca, un clásico de la vela que por fin logra ser la 'cuna' de una medalla olímpica
- Joan Cardona consigue la novena medalla para la delegación española en Tokyo 2020
- Especial medallas de España en unos Juegos Olímpicos
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El Real Club Náutico de Palma es una de las entidades más prestigiosas y laureadas de toda España. Desde su fundación, a finales de la década de los 40, se han sucedido numerosos regatistas que han llevado el nombre del club a lo más alto. En el palmarés del club cuenta con más de 30 pódiums entre mundiales y europeos.
Pero en su casillero no se encontraba ninguna medalla olímpica hasta esta edición de los Juegos Olímpicos. En Tokyo 2020, Joan Cardona se ha subido al podio en la clase Finn, en la última participación de esta modalidad en el programa olímpico. Un hecho histórico para el club y que ha llenado de alegría a esta institución, a tenor de las palabras del director deportivo del Real Club Naútico de Palma, Manuel Fraga: “Estamos muy ilusionados con lo que ha pasado. El club tiene más de 70 años y es histórico conseguir una medalla. La primera vez en su historia que se consigue.”
Tras la participación de Eugenio Jáudenes Agacino, Ángel Riveras y Manuel Baiget en la clase Dragón a bordo de la embarcación ‘Deneb’ el club no había tenido ningún representante en la delegación española en los Juegos hasta esta cita olímpica de Tokyo 2020.
Joan Cardona entró en el equipo español de vela elegido para Tokyo 2020 siendo el benjamín de esta modalidad. Un hándicap en su contra puesto que el resto de competidores ya habían participado en unos Juegos y la experiencia podría convertirse en factor clave. Pero en su club tras el desarrollo de la competición confiaban en las opciones de podio para el balear y así lo confirmaba Manuel Fraga: “Ha demostrado que puede aguantar los nervios y la presión, navegando de una forma estratégica para asegurarse sus opciones de medalla”.
Una medalla en la que siempre confiaron y que Cardona por fin traerá a casa. “Lograr eso es algo muy, muy complicado, pero de Joan nos esperábamos eso sin duda” remarcó Pedro Marí, director técnico de vela del Real Club Náutico de Palma. Al igual que Hugo Ramón, vocal de vela en el Club Naútico y primer entrenador en Mallorca de Joan que aseguraba que el Finn es una modalidad muy experimentada, y que el menorquín ha irrumpido como un elefante en la cacharrería, donde ha puesto todo partas arriba.
El club que en estos momentos se encuentra inmerso en la 39º edición de la copa del Rey, aprovechó la final de la regata olímpica, para instalar una pantalla en la terraza y así poder brindar todo su apoyo a Cardona. Su familia, el cuerpo técnico, la junta directiva y miembros del club sufrieron hasta el final para posteriormente celebrar con la euforia la consecución de una nueva medalla olímpica para la vela española. Un sueño, el de la medalla, que durante cinco noches han tenido en la cabeza, según explicaba el vocal Hugo Ramón, ante la posibilidad de perder el metal.
Las razones del éxito de Joan Cardona
Joan Cardona destacaba desde pequeño, en la clase de Optimist. Pedro Marí valora que, incluso, en una clase que no era la suya debido al hándicap del peso, supo suplirla por su cabeza y con su talento. Esa persona con ese talento bestial recaló en el centro de tecnificación de Palma por sus méritos logrados en esta clase a la temprana edad de 14 años para formarlo en el deportista en el que se ha convertido a día de hoy.
Tras su llegada compitió en la clase Laser donde obtuvo una proyección bestial que le ha hecho convertirse en el deportista que es hoy. “La verdad es capaz de hacer cosas que otros no saben y con Joan siempre hay que estar contento pues tiene un as en la manga.” Estas eran las palabras de Hugo Ramón. Tras su cambio a la clase Finn su entrenador pasó a ser Diego Fructuoso.
A parte de su técnica y de su visión táctica de Joan destacan que una de las especialidades es la gran fuerza mental que necesita un deportista para este tipo de situaciones: “En los Juegos Olímpicos es un 80 por ciento mentalidad porque ya viene entrenado. Y es necesario mantener la cabeza tranquila, clara y en su sitio. Y la verdad es que Joan para esto es un especialista” matizó Pedro Marí.
Dejando al lado esta medalla el futuro es un misterio para Joan Cardona. Su clase el Finn, que es la que mejor se adapta a sus características debido a su envergadura y compostura física, desaparece del programa olímpico en París 2024. Desde el club consideran que no sería una mala opción pasarse al Láser, pero que supondría un esfuerzo para el deportista puesto que debería bajar de peso. Queda un duro camino por recorrer hasta los juegos de la ciudad de la luz, pero de momento hay que disfrutar de este bronce que sabe a oro.