Saúl Craviotto: "Esta medalla pesa toneladas, nadie se imagina el camino que hemos tenido estos cinco años"
- El palista, que iguala a David Cal como el deportista español con más medallas, no descarta seguir hasta París 2024
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La sensación este sábado en el Canal del Bosque Marítimo de Tokio, tras la final del K4 500 metros en el que Saúl Craviotto, Marcus Cooper, Rodrigo Germade y Carlos Arévalo han alcanzado la plata, era de sentimientos encontrados: el cuarteto español ansiaba el oro, cedido solo en los últimos metros ante Alemania, pero saborea el segundo puesto por lo que tiene de recompensa tras muchos sacrificios. "Esta medalla pesa toneladas, nadie se imagina el camino que hemos tenido estos cinco años, por lo que hemos pasado para llegar hasta aquí", resumía Craviotto ante las cámaras de RTVE nada más bajar del podio.
“Nadie se imagina el camino que hemos tenido estos cinco años, por lo que hemos pasado para llegar hasta aquí“
El líder del equipo no ha escondido cuál era su ambición en Tokyo 2020 -"Queríamos el oro, en una final se sale a por el oro"-, si bien ha destacado el trabajo de un equipo que devuelve a un K4 español al podio 45 años después de la plata obtenida en los mil metros de Montreal 1976 por José María Esteban Celorrio, José Ramón López Díaz, Luis Gregorio Ramos Misioné y Herminio Menéndez, aunque en una distancia que se estrenaba este año en el programa olímpico.
"Hemos hecho la carrera que habíamos soñado. Hemos competido genial, estoy súperorgulloso de mis tres compañeros, de mi entrenador, de mi equipo. Y lo hemos dado todo, así que más no se puede pedir. Estoy súperfeliz", ha subrayado Craviotto, quien con esta medalla suma cinco en su palmarés personal (dos oros, dos platas y un bronce) e iguala así a David Cal, el deportista español más laureado en unos Juegos Olímpicos.
"No pienso en esas cosas, la verdad. Supongo que cuando llegue a casa, en frío, ya pensaré en lo que hemos conseguido y lo que no", aseguraba en Tokio. "Yo ahora mismo estoy muy en el presente, en una nube, muy feliz por lo que hemos conseguido. Para mí estar a la altura de David Cal, alguien a quien admiro a nivel profesional y, sobre todo, personal, es una maravilla".
Una plata que "sabe a oro"
Sus tres compañeros mostraban una felicidad similar, apenas empañada por el deseo de haber alcanzado el título olímpico. "Evidentemente, el oro es mejor que la plata y, si hubiésemos quedado terceros, estaríamos hablando de la plata. Pero es una medalla que nos sabe a oro, sin duda, estamos contentísimos", recalcaba Marcus Cooper, quien ya fue campeón olímpico en Río 2016 en K1 1000 metros.
Germade, por su parte, dejaba ver cierto lamento por la oportunidad perdida, pese a ser consciente del logro que supone la plata, después de haber batido a los alemanes en el último campeonato del mundo: "Haber cedido al final, es un poco... Sabe mal, pero esta plata nos sabe a oro, sobre todo por el camino que hemos tenido que recorrer. Ha sido un camino muy largo, hemos tenido que luchar contra muchas cosas, incluida la pandemia, como todo el mundo".
"Por supuesto que sabe a oro", apostillaba Arévalo, "ya solo estar aquí representando a toda España, llevar sus colores y dar el cien por cien, salir con la mejor regata del mundo... No puedo pedir más".
“La verdad es que Paerís 2024 está ahí cerquita. Creo que todavía tenemos un poco de cuerda“
En el punto de mira se encuentra ya París 2024, en un ciclo olímpico que será más corto de lo habitual. "La verdad es que está ahí cerquita. Ya veremos, creo que todavía tenemos un poco de cuerda", dejaba caer Craviotto, quien, a sus 36 años y tras cuatro Juegos Olímpicos, ha sopesado la posibilidad de retirarse. Aunque todas esas decisiones tendrán que esperar, una vez culminado con éxito el recorrido de Tokyo 2020: "De momento, me voy a ir de vacaciones, ya les he dicho que a mi no me van a ver en bastante tiempo".