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Fútbol

Quique Sánchez Flores vuelve a ponerse al frente del Getafe

  • El técnico madrileño, que sustituye a Míchel, afronta su tercera etapa en el club azulón que ahora es colista
  • Firma hasta final de temporada con el objetivo de conseguir la permanencia

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Quique Sánchez Flores, nuevo entrenador del Getafe

El Getafe CF ha anunciado este miércoles a Quique Sánchez Flores como nuevo entrenador, en sustitución de Míchel González, cesado el pasado lunes. Está será la tercera etapa de Quique al frente del club madrileño, por el que firma hasta final de la presente temporada.

"Cada vez que he pasado por el Getafe he tenido la sensación de que formaba parte de una familia. La familia está en problemas en este momento y yo tengo muchas ganas de entrenar. Nos conocemos perfectamente, sabemos cómo trabaja el club y nosotros sabemos cómo trabaja el club. Lo que tenemos que hacer es trabajar poco y trabajar mucho", apuntó Sánchez Flores en sus primeras palabras tras firmar el contrato.

El técnico madrileño inició su carrera en los banquillos precisamente en el Getafe en la temporada 2004/05, cuando logró una cómoda permanencia antes de marcharse al Valencia.

Su segunda etapa en el club azulón'comenzó en enero de 2015, pero apenas se prolongó durante siete partidos oficiales. Concretamente estuvo entre las jornadas 18 y 24 tras sustituir al rumano Cosmin Contra, que se marchó al fútbol chino. Quique dejó el cargo a finales de febrero por motivos personales tras acumular tres victorias y cuatro derrotas. Fue sustituido por Pablo Franco.

Ahora, tras llevar casi dos años sin entrenar, Quique Sánchez Flores regresa al Getafe con una misiónde reflotar al equipo que marcha colista de Primera División, con solo un punto de 24 posibles.

"Cada partido es una final"

El técnico madrileño, de 56 años, es consciente del reto que asume y asegura que "la clave para revertir la mala situación va a ser saber que cada partido es una final".

Quedan muchos partidos y en una final no se puede ser errático.

"La clave es saber que cada partido es una final. Quedan muchos partidos y en una final no se puede ser errático. Hay que estar en el pequeño y el gran detalle. Hay que cometer pocos errores y demostrar pasión por ganar", manifestó.

"Lo normal es decir que es un reto pero quiero verlo como un paso más en la trayectoria que te lleva a situaciones más difíciles y otras más fáciles. Este club está ordenado y trabajado. En este club hay mucha exigencia, mucho trabajo, dedicación, pasión y ambición por lo que hay que hacer", señaló.

"El Getafe tiene que trabajar en una Liga que es un coloso. No es fácil, hay que valorar cada año en Primera y a partir de ahí estar satisfecho de la exclusividad de jugar en Primera", comentó el técnico madrileño, que no quiso entrar a valorar el inicio de Liga protagonizado con Míchel de entrenador.

"No puedo hablar de lo que he visto o dejado de ver. Veo mucho fútbol todos los fines de semana. Tengo un gran respeto por la figura de Míchel. Ayer hablé con él, tenemos una amistad de mucho tiempo y un profundo respeto tanto de la época de jugadores como de la de entrenadores. Vamos a necesitar la ayuda de todos y lo que me importa es generar energía positiva", finalizó.