Dos años sin Kobe Bryant y heridas todavía por cerrar
- La viuda del jugador mantiene la demanda contra el departamento del 'sheriff' de Los Ángeles
- Su equipo, los Lakers, tratan de mantener su legado deportivo en una temporada irregular
El 26 de enero de 2020 el mundo del baloncesto y del deporte mundial se quedó en 'shock' al conocer la muerte de Kobe Bryant. El jugador extrella de los Lakers en la primera década de siglo falleció junto a su hija mayor en un accidente de helicóptero.
Dos años después de su pérdida, el mundo del deporte y su equipo del alma, Los Ángeles Lakers, tratan de seguir con su legado, pero la familia sigue peleando en los tribunales por temas relacionados con las circunstancias de su muerte.
La viuda, Vanessa Bryant, llegó a un acuerdo este verano con la compañía del helicóptero para cerrar la demanda por negligencia.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) dictaminó en febrero de 2021 que el piloto Ara Zobayan, que también murió en el accidente, se desorientó al volar a través de la niebla que había ese día en una zona montañosa al oeste de Los Ángeles (EE.UU.).
Las autoridades aseguraron que Zobayan fue así contra las normas de su formación, ya que al volar entre nubes espesas y con visibilidad limitada un piloto puede llegar a pensar que está yendo hacia arriba cuando en realidad está perdiendo altitud.
Sin embargo, aún sigue abierta la demanda contra el departamento del 'sheriff' de Los Ángeles por la toma de imágenes del accidente en móviles particulares de los agentes desplazados y algunos miembros del cuerpo de bomberos.
Cerca de 40 móviles tenían imágenes de Kobe y 'Gigi' Bryant, según declararon a los medios los abogados de la viuda la semana pasada.
Un anillo dedicado a Kobe
En lo deportivo, los Lakers tratan de sobreponerse al impacto de su muerte y recuperar la senda que ese mismo 2020 parecía que iba a ser de nuevo victoriosa.
LeBron James asumió el liderazgo del equipo y continuador del legado de Bryant. Fue el año en que el deporte se paralizó por la pandemia y la NBA en concreto la primera, tras el positivo del francés Rudy Gobert.
La mejor liga de baloncesto del mundo se puso manos a la obra para reanudar la competición en pleno verano. Se creó la 'burbuja' de Orlando bajo estrictas medidas sanitarias, un formato de competición algo reducido y los partidos se jugaron sin público.
En esas circunstancias fue como los Lakers se proclamaron campeones de la NBA en una temporada que concluyó en octubre, en unas finales contra los Heat de Miami.
Comandados por James, la franquicia californiana sumaba su título número 17 y empataba con los Celtics, su rival histórico. Parecía que se abría una nueva época.
Se desvanece el legado deportivo
Buscando paralelismos con Kobe, se anunciaba el fichaje de Marc Gasol, el segundo español en vestir la camiseta de los Lakers. Si Pau fue el escudero de Bryant, Marc estaba llamado a serlo de LeBron, pero la apuesta no salió como se esperaba.
La temporada comenzó bien para los Lakers, pero fueron de más a menos y, para colmo, en marzo perdieron a su jugador estrella por un esguince de tobillo. LeBron regresó a tiempo para ayudar a clasificar al equipo a los 'play offs', pero cayeron en la primera serie ante Phoenix Suns.
Para la presente temporada se anunciaron refuerzos importantes como el base Russell Westbrook, el alero Carmelo Anthony o el regreso de Dwight Howard y Trevor Ariza, entre otros. Pero tras un inicio de temporada algo irregular los Lakers marchan actualmente octavos de la Conferencia Oeste con un balance de 24 victorias por otras tantas derrotas.
Marc Gasol volvió a España a ayudar al Bàsquet Girona de la Liga LEB, una salida por la puerta de atrás después de 14 años en la NBA.
Deja un equipo atrás enfrascado en sus propias luchas internas y con un líder, LeBron James, que parece haber perdido la brújula del legado.