La semifinal Rusia-Ucrania del Europeo de Fútbol Sala, el enfrentamiento que se quería evitar
- En medio de la alta tensión entre los dos países, sus selecciones se enfrentan este viernes
- Europeo de Fútbol Sala: Rusia - Ucrania, en directo este viernes a las 16:30 en Teledeporte y RTVE Play
Rusia y Ucrania van a disputar este viernes la primera semifinal del Europeo de fútbol sala, un enfrentamiento que la UEFA lleva años intentando evitar por el conflicto entre ambos países y que ahora llega en un momento de máxima tensión.
La otra semifinal también medirá a dos países vecinos, España y Portugal, pero el duelo ibérico no ha trascendido el deporte como este entre las dos naciones eslavas que han compartido incluso bandera durante gran parte del siglo XX bajo la Unión Soviética.
Pero en 2014, 23 años después de su independencia tras la desintegración de la URSS, Ucrania estalló en un conflicto entre los partidarios de la integración en la UE y la OTAN y los que recelaban y querían mantener los vínculos con Rusia.
Como reacción a las masivas protestas que tumbaron por la fuerza al Gobierno en Kiev para propiciar ese giro prooccidental, en el este del país -–de mayoría rusófona–, estalló una revuelta independentista apoyada por Moscú, que además se anexionó unilateralmente la estratégica península de Crimea.
Desde entonces se han sucedido los combates en las regiones de Donestk y Lugansk, en la llamada Guerra del Donbás (o Dombás), un conflicto de baja intensidad que amenaza con recrudecerse tras la escalada de tensión entre Kiev y Moscú, entre EE.UU. y Putin, que ha llevado a multiplicar en las últimas semanas la presencia militar rusa en la frontera de Ucrania y de la Alianza Atlántica en sus confines orientales.
Sorteos dirigidos
En estos siete años de hostilidades el deporte no ha quedado al margen. Ya en el verano de 2014, la UEFA decidió dirigir los sorteos de sus competiciones para evitar el cruce en las primeras rondas entre equipos o entre las selecciones de ambos países.
Entonces, el rector del fútbol continental intervino para evitar que el Zenit de San Petersburgo y el Dnipro se encontraran en la fase previa de la Champions. Por cierto que en el equipo ucraniano militaba entonces Roman Zozulya, quien no solo se implicó en la financiación del Ejército ucraniano y de los grupos paramilitares de extrema derecha que les apoyaban contra los separatistas prorrusos –“terroristas” que operaban a las puertas de su provincia, según ellos– sino que homenajeó a un neonazi caído en combate y ultra del Dnipro.
Desde la distancia, la polémica con Zozulya –que derivó en una sanción al Rayo por los cánticos contra el jugador– no es fácil de desentrañar. Sí son más evidentes otras consecuencias de la guerra, como la destrucción bajo las bombas de algunos recintos deportivos y el desplazamiento de miles de personas y también de equipos, como el Shaktar.
Y son los ucranianos quienes afrontan la semifinal del Europeo de fútbol sala con más ganas y con ánimos de revancha. No alcanzaban esta ronda desde 2005 y en la siguiente edición, en 2007, fue precisamente la última en la que se enfrentaron a los rusos, ante los que cayeron en la fase de grupos (4-1).
Hace pues 15 años de su último choque en un gran torneo internacional. Con todo, los ánimos de los deportistas parecen muy templados en la víspera de su reencuentro en Ámsterdam, al que la Federación Ucraniana de Fútbol se ha referido con total normalidad en su web.
El potencial de Rusia
Enfrente, la favorita Rusia –lleva diez victorias seguidas– también ha quitado dramatismo al asunto. "Hablamos, nos vemos en el hotel, nos saludamos de manera absolutamente civilizada. No hay malentendidos", comentó esta semana Chishkala, el jugador del Benfica y máximo goleador de su selección en el torneo, en declaraciones a TASS recogidas por Efe.
Los rusos tienen la baja de Antoshkin, pero cuentan con más estrellas, como Sergei Abramov o Robinho –brasileño nacionalizado–, para medirse a la revelación del campeonato.
Además, no es la primera vez que selecciones de los dos países se enfrentan en medio de la crisis política. En 2019, precisamente en otro Europeo de futsal, pero femenino, Rusia ganó a Ucrania en los penaltis el partido por el tercer puesto.
Tampoco es novedad que salten las alarmas en la UEFA por esta cuestión. El año pasado la camiseta de Ucrania en la Eurocopa también generó controversia.
Con todo, también hay precedentes de conflictos azuzados por el deporte. En el caso del fútbol, los hechos más graves fueron los que rodearon la eliminatoria entre El Salvador y Honduras de clasificación para el Mundial de México 70.
En medio de una gran escalada de tensión entre los dos países centroamericanos, las provocaciones en esos partidos terminaron por hacer estallar las hostilidades en la que se conoció precisamente como la Guerra del fútbol. Que no se repita la historia.