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MotoGP | Opinión

Márquez contra Márquez

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Márquez vuelve a sonreír en los primeros entrenamientos del Mundial de MotoGP

El Gran Premio de Catar de MotoGP (domingo 6 de marzo el gran resumen, a las 20h en Teledeporte y RTVE Play) es más transcendental de lo que uno podría imaginar a primera vista.

No porque en esa carrera vaya a decidirse el campeón.

Ni mucho menos.

Ni porque vaya a darnos demasiadas pistas de la tendencia que va a tomar la lucha por el título.

Tampoco.

Pero creo que puede ser la carrera que sirva para saber con qué armas se presenta Marc Márquez y si el ocho veces campeón del mundo de motociclismo se ha superado a sí mismo. El retorno de Márquez -segunda vez que regresa en MotoGP tras una importante lesión- nos dirá y le dirá en qué estado se encuentra físicamente por su problema de visión doble -tras los entrenamientos de Indonesia, ni rastro, según dijo el piloto catalán- y de su hombro derecho, falto de fuerza todavía. Pero también será interesante descubrir si veremos a un “nuevo” Márquez desde el punto de vista mental. El proceso que ha atravesado desde su caída en la carrera de Jerez 2020 ha sido tortuoso, doloroso e incierto: tres operaciones, cambio de equipo médico, regresos precipitados... Habrán pasado muchos pensamientos por su cabeza -es humano-, desde el más instintivo como el de las ganas de volver a correr en moto hasta el de retirarse para preservar su salud.

¿Hasta qué punto afectarán esos pensamientos a Marc cuando se apague el semáforo este domingo en Losail? Creo que en ese momento, más que en el piloto que tiene al lado, delante o detrás, pensará en él mismo como en su principal rival. Superarse vuelta a vuelta será clave para saber si podrá pasar de pantalla con el objetivo final de medirse a sus rivales. Lo físico influirá en lo mental porque a partir de diez vueltas de carrera puede empezar a pesarle el cansancio y la falta de ritmo por mucho motocross que haya practicado en la pretemporada. La toma de decisiones se acostumbra a resentir por la falta de forma y eso no entiende de palmarés ni apellidos...

Para mí la cuestión no es si se va a adaptar a la nueva forma de llevar la Honda de 2022 ni si va a estar delante de Pol o al revés. Ni si va a estar para luchar. Esto va mucho más allá. Se trata de saber si hay miedo a un nuevo contratiempo y cómo de intacta está la conexión cabeza-mano derecha.