Un excelso Soler guía a España en la goleada a Islandia

• La selección española le regala al público de Riazor un festín de goles para cerrar el parón de amistosos
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Resumen y goles del España 5-0 Islandia

La selección española masculina golea a la de Islandia en partido amistoso disputado en el municipal de Riazor, A Coruña (5-0). Si la fiesta del anterior, contra Albania en Cornellà, estuvo más en la grada que en el césped, en esta ocasión la Roja sí que pudo contribuir a la misma con la salsa del fútbol.

El seleccionador, Luis Enrique, dispuso un once con rotaciones, tal como dijo, pensando en proteger a sus jugadores y que no acumularan minutos para afrontar el próximo parón de junio en la Liga de Naciones. Aunque las pruebas de esta 'ventana' de marzo tiene el punto de mira más lejos, en el Mundial 2022 de Catar.

Luis Enrique: "En junio la exigencia será mucho mayor"

Los goles fueron de Álvaro Morata, los dos primeros, de Pablo Sarabia, los dos últimos, y el estreno de Yéremi Pino entre medias. En la mayoría de ellos intervino la batuta de Carlos Soler, que si bien no marcó hizo mucho por la goleada.

Como se preveía, Islandia salió con muchos jugadores por detrás del balón aunque el gol estuvo a punto de llegar en un rebote tras un centro de Yéremi Pino desde la derecha. Pero Mórata no se esperaba el error de Runarsson y no pudo rematar a tiempo.

Solo el delantero madrileño repitió respecto al once de Cornellà, aunque algunos de los titulares en Riazor sí tuvieron minutos ante Albania, como el mencionado Yéremi.

Uno que no jugó un solo minuto, Koke, tuvo otra buena ocasión con un disparo que se fue alto por poco. España tenía en esos diez primeros minutos hasta un 88% de posesión. Su compañero en el Atlético Marcos Llorente no pudo rematar cómodo un gran centro de Jordi Alba.

El partido se presumía plácido para la Roja, aunque Hugo Guillamón tuvo que ser intervenido de una hemorragia por un golpe fortuito. El central vasco del Valencia redebutaba tras aquel amistoso contra Lituania previo a la Eurocopa. El parón no afectó al equipo, que siguió dominando y disponiendo de ocasiones, como una de su compañero Soler de volea a centro de Jordi Alba.

Lo cierto es que la selección española mostraba más profundidad que días atrás, a pesar de que el rival se presumía de mayor entidad. Incluso Morata llegó a marcar un gol, aunque anulado, en el minuto 25.

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Islandia apenas inquietaba la meta de Unai Simón, convertido en un espectador más de los más de 20.000 que vibraron en el 36 con el gol de Morata. El centro, medido al pie, fue filtrado por Carlos Soler.

Ni dos minutos tardó Dani Olmo en provocar el penalti de Bjarnason con una gran internada, que se encargó de transformar Morata en el segundo de la noche y de su cuenta particular (minuto 39).

Doblete de Alonso-Sarabia nada más salir

La primera parte acabó con la mejor ocasión de Islandia, que vino de un centro lejano y un fallo de Unai Simón a la hora de atajarlo. No dio para más. Más acierto tuvo Yéremi en la reanudación al rematar de cabeza un centro de Jordi Alba (minuto 47).

La selección no parecía excusar el parón de 15 minutos. El resultado invitaba a que fuera un partido para que la Roja empezara a gustarse y el canario se estrenaba con la selección. Lo intentó Olmo desde la frontal y se encontró con una de las pocas paradas de Runarsson.

Quedaba por ver si la rueda de cambios afectaba al ritmo. Antes de cumplida la hora salieron al campo Ferran Torres, Pablo Sarabia y Marcos Alonso. Se fueron Jordi Alba, Dani Olmo y un ovacionado Morata.

El cuarto gol se encargó de despejar esas dudas y en la jugada intervinieron dos de los nuevos: Alonso de asistente y Sarabia de rematador con la cabeza (61'). Pero el centro en profundidad en primero fue de un enchufadísimo Soler, que estaba en todas.

El valencianista también se fue ovacionado para dejar su sitio al barcelonista Gavi. Para entonces Riazor ya estaba entregado. Yéremi fue quien en el lugar de Soler se encargó de habilitar a Alonso, quien encontró de nuevo la llegada de Sarabia para el quinto (72').

Faltaba el incombustible Pedri por unirse a la fiesta, esta vez desde la suplencia. Su salida fue en el lugar de Azpilicueta, con lo que Llorente pasó al lateral derecho. Luis Enrique se salía con la suya, porque el partido del colchonero en el interior derecho fue más bien discreto.

A la Roja le debió parecer ya suficiente renta, porque el marcador ya no se volvió a mover hasta el pitido final. Un final con menos sobresaltos que el anterior.