Los viejos fantasmas visitan a la Roja en Praga: las claves del República Checa 2-2 España
- Desajustes defensivos, falta de agresividad, falta de contudencia en ataque y nuevo tropiezo de la selección
- Suiza - España, en directo, jueves a las 20:45h en La 1 y RTVE Play
ÓSCAR LÓPEZ CANENCIA
La selección española masculina de fútbol vuelve a tropezar con las mismas piedras en la UEFA Nations League. España sale con un empate de Praga ante la República Checa. Solo dos puntos en dos jornadas y malas sensaciones.
[Vuelve a ver el República Checa 2-2 España de la UEFA Nations League]
Piedras, en plural, porque lo visto en la capital checa no es nuevo. El problema es que después de ilusionar en la Eurocopa, en la pasada edición de la Liga de Naciones y en la clasificación para el Mundial, algunas se creían superadas.
Desajustes defensivos
Así los definió Luis Enrique en la entrevista concedida a TVE. El técnico no se los quiso achacar solo a los defensas, pero lo cierto es que tres de ellos quedaron retratados en varias jugadas: Carvajal en el primer gol, Marcos Alonso en el aviso de Kuchta en la segunda parte y Eric García en el gol de este, segundo de los checos.
Los tres habilitaron al delantero checo en las tres ocasiones en que este les ganó la espalda. Era un objetivo a defender, puesto que ya dio avisos ante Suiza. Un entrenador tan estudioso del rival como el español se lo debió advertir a sus jugadores, pero algunos no aprendieron la lección.
De nuevo Gavi y también Iñigo
De nuevo hay que salvar a Gavi de la quema. El jovencísimo centrocampista andaluz se inventó un gol donde no había espacio, salvando una desastrosa primera parte de España.
En el volante derecho rindió algo menos de lo que acostumbra, pero con todo siguió siendo el mejor del equipo en labores ofensivas. La presión, la recuperación, son otras facetas en las que Luis Enrique no para de elogiarle.
A su lado hay que incluir a Iñigo Martínez, que no solo por el gol fue el mejor de los defensores. Estuvo al quite en otro error de Carvajal, una pérdida en el área propia que podía haber costado otro tanto en contra.
En general se puede decir que ambos fueron los que sostuvieron a una floja España de entre los titulares. Los cambios mejoraron algo al equipo, así que a los reservas también se les puede dar el aprobado.
Agresividad propia y ajena
En cuanto a los fantasmas del pasado, otro debate manido ha sido la falta de contundencia de los jugadores españoles. A esto hay que añadir la agresividad que mostraron los de República Checa en el partido.
Los locales fueron a por cada balón dividido como si se jugaran la vida en ello. Presionaban con mucha intensidad, recuperaban y salían corriendo como alma que lleva el diablo.
Además lo hacían con verticalidad, algo que contrasta con la horizontalidad de los pases de la selección española y con el siguiente punto.
Posesión sin gol
Otro aspecto también debatido con anterioridad. España tuvo un 73% de posesión de balón, 765 pases, realizó 48 ataques y tuvo 12 ocasiones de gol. Resultado: dos goles. La República Checa solo dio 152 pases, tuvo 15 ataques y tres ocasiones de gol para hacer lo mismo.
La sensación que deja este partido, y otros anteriores, es que la selección española vende muy barato el gol en su área, y por contra le cuesta un ojo de la cara en el área contraria.
Un economista vería ahí un déficit a pesar de que hasta ahora los resultados hayan ido acompañando a la Roja hasta las fases finales. Pero ese mismo economista advertiría de los periodos de 'vacas flacas'.
España deberá, por tanto, repensar su modelo 'económico' para que esa balanza comercial esté más equilibrada y pueda obtener mejores beneficios en el futuro.
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