Djokovic gana su séptimo Wimbledon y se queda a un Grand Slam de Rafa Nadal
- El serbio suma su vigésimoprimer major, supera en uno a Roger Federer y se queda a uno del español
- Ha ganado en la final al australiano Nick Kyrgios por 4-6, 6-3, 6-4 y 7-6 (3) en tres horas y cuatro minutos
Novak Djokovic ha logrado su vigésimoprimer Grand Slam conquistando Wimbledon en la final contra Nick Kyrgios (4-6, 6-3, 6-4 y 7-6 (3)). El serbio vence por cuarta vez consecutiva el torneo londinense, siete en total, supera en majors a Roger Federer por uno y se queda a uno de Rafa Nadal.
El 12 de julio se cumplirán cinco años desde el último partido que 'Nole' perdió en el Grand Slam británico, fue en 2017 cuando se tuvo que retirar contra Tomas Berdych cuando perdía por 7-6 y 2-0 por una lesión en el codo. 28 victorias consecutivas desde entonces. Para encontrar una derrota en un partido completo, hay que irse hasta el 1 de julio de 2016 contra Sam Querrey por 7-6, 6-1, 3-6 y 7-6.
Djokovic conquista su séptimo Wimbledon e iguala a Pete Sampras y se queda a uno de Roger Federer como el jugador con más trofeos en la hierba de Londres.
El partido comenzó igualado: ambos al saque, intratables
El primer set comenzaba con igualdad y los dos jugadores muy serios con su servicio. Hasta el quinto juego en que Djokovic, con una doble falta,entregaba su saque a Kyrgios. En su primera final de Grand Slam no desaprovechó esa oportunidad y se llevó el primer parcial por 6-4.
El australiano era intratable con su saque, solo concedió cinco puntos con su servicio en el primer set (16/20 con el primero y 5/6 con su segundo) y había logrado siete aces. Sin conceder ni una bola de break.
El serbio estuvo muy bien con el suyo también pero de los siete puntos (14/18 con el primero y 4/7 con segundo) que perdió con su saque, su rival consiguió dos oportunidades de rotura y convirtió una de ellas.
Como en los dos precendentes a esta final, ante Sinner y Murray, Djokovic comenzaba cediendo el primer set. Contra el italiano cedió dos y frente al británico solo uno.
Parece que necesita el serbio verse por debajo en el marcador para el elevar el nivel de su juego. En el cuatro juego del segundo set lograba su primera rotura de saque del partido que confirmaba después y se mantenía por delante hasta el 5-3 y servir para igualar el encuentro.
Ahí llegó el sufrimiento ya que el juego comenzó con un 0-40, con uno de los mejores puntos del partido de Kyrgios. Pero Djokovic lo levantó para ganar el set 6-3 y empezar un partido nuevo.
En el tercero, ambos sabían lo que se jugaban y los puntos y los juegos comenzaron a hacerse más largos. Ninguno dominaba como antes con su servicio. Solo Djokovic con su primero seguía prácticamente infalible (13/14 para un 93%). Así se llegaba al 4-4, con Kyrgios acumulando la friolera de 20 aces y nueve en el tercer parcial.
En el tercero falló la cabeza de Kyrgios
El australiano se fue mentalmente del partido, desperdició un 40-0, se puso a gritar a su box, al público y a cualquiera que pasara por allí, parecía exigir que se sentara la gente. Un gran tenista con una cabeza peculiar.
Después buscó el ganador en cada resto para terminar de regalar, con cuatro errores no forzados y dos ganadores, un set que hasta entonces había estado igualadísimo. En la pausa el australiano tuvo una larga conversación en voz alta consigo mismo porque Djokovic se marchó a vestuarios.
Parece que la pausa apaciguó la furia de Kyrgios que volvió a encontrar su juego en el cuarto y no cedió su saque en ningún momento. Volvía a ser un partido igualadísimo, de hecho el set más parejo, llegando hasta el 6-6 por primera vez. El tie-break decidiría si hay campeón o quinto set.
Comenzó el desempate de la peor manera posible para el australiano, con una doble falta concedía un minibreak. Lo recuperó pero en su siguiente turno de servicio perdía ambos y se plantaba Djokovic con una ventaja de 4-1 que amplió con su saque hasta el 6-1, con cinco bolas de campeonato. La inteligencia del serbio le llevaba a meter bolas esperando el fallo del rival.
Kyrgios salvó las dos primeras al saque. Pero no pudo alargarlo más. Se quedó en la red un revés del australiano y Djokovic lograba su séptimo Wimbledon y su vigésimoprimer Grand Slam tras tres majors sin lograr la victoria.
Djokovic: "Nick, volverás"
"Nick, volverás", ha asegurado el de Belgrado. "Sé que no es fácil hacer caso a las palabras de consolación tras perder una final, pero has demostrado por qué mereces estar entre los mejores del mundo. Te respeto mucho, tienes un gran talento. Ahora estás poniendo todas tus piezas juntas", ha añadido en declaraciones en la entrevista posterior a la organización de Wimbledon y recogidas por EFE.
"Nunca pensé que diría algo bueno sobre ti", ha dicho Djokovic entre risas, sobre la complicada relación que mantuvieron en el pasado y que se arregló a partir del pasado Abierto de Australia, cuando Kyrgios apoyó públicamente a Djokovic tras su deportación. "Es oficialmente un 'bromance'. Ojalá esto sea el comienzo de una bonita amistad".
Kyrgios: "Han sido las dos mejores semanas de mi carrera"
"Han sido las dos mejores semanas de mi carrera. Ojalá pueda volver a estar aquí", ha dicho el australiano a pie de pista, al recoger el plato de subcampeón.