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Tour 2022 | Etapa 11

Vingegaard destrona a Pogacar en el Granon y corona la ofensiva total del Jumbo

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Tour de Francia 2022 | Llegada de la etapa 11 al Col du Granon

El Tour de Francia tiene un nuevo rey. Jonas Vingegaard (Jumbo) ha firmado una gesta memorable en la etapa reina del Tour 2022, en la que ha conseguido dejar fuera de juego a un Tadej Pogacar que parecía imbatible. Cuando el esloveno aparentaba ser inabordable, después de aguantar sin pestañear un sinfín de ataques del Jumbo, Jonas Vingegaard le sacó de rueda en la subida al Granon y le arrebató el maillot amarillo.

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Tour 2022 | #ElTourEnUnMinuto: Etapa 11

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Después de una etapa preciosa, con multitud de ataques entre los favoritos, Vingegaard se queda como el nuevo patrón en la general por delante de Romain Bardet, que se ha colocado segundo a 2:16, y Tadej Pogacar, que es tercero a 2:22 del ciclista del Jumbo.

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El desfallecimiento de Pogacar es una imagen inédita hasta ahora del todopoderoso ciclista esloveno. Nunca hasta ahora habíamos visto sufrir de esta manera al ganador de los dos últimos Tours. Sin capacidad de respuesta, ascendiendo el terrible Granon con el maillot abierto mientras le pasaban otros corredores, Tadej Pogacar fue incapaz de hacer frente al ataque definitivo de Jonas Vingegaard.

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Por su parte, Enric Mas (Movistar) no ha tenido un buen día y nunca pudo estar entre los favoritos. Mas llegó a meta con 8:11 perdidos en la etapa y se queda décimo a 9:29 de Vingegaard. Se complican mucho, por tanto, sus opciones de luchar por el podio de París, su gran objetivo en este Tour.

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El ataque total de Jumbo

El gran tesoro del ciclismo danés dio la puntilla a Tadej Pogacar en la subida al Col du Granon. Allí donde tocó el cielo Eduardo Chozas en 1986, Jonas Vingegaard consiguió dejar, por fin, a su gran rival. No fue su primer intento, ni mucho menos. En una etapa alucinante, en la que nadie reservó nada y el Jumbo atacó al líder por todos los flancos, Vingegaard ya había sido el protagonista de los ataques más duros a Pogacar en las subidas al Telegraphe y al Galibier.

A esos ataques, y a los del resto de corredores del Jumbo, como los de Benoot o Roglic, Pogacar respondió sin apenas esfuerzo. No tuvo problemas para resolverlos, e incluso él mismo lanzó varios demarrajes en una jornada en la que sí contó con la ayuda de sus compañeros Marc Soler, Rafa Majka y Brandon McNulty en momentos puntuales. No fue así en la decisiva subida al Granon, en la que acabó desfondado y llegando a meta en solitario.

Para entonces, el grupo de favoritos se había reducido y el ataque de Vingegaard lo rompió en pedazos. El danés, además, acabó con las opciones de un Arkea que soñó con el triunfo de etapa, primero con Warren Barguil y después con Nairo Quintana. Pero Vingegaard, desatado, los pasó sin contemplaciones camino de una victoria de etapa para la historia.

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