El Barcelona se diluye en San Siro con polémica final
- El tanto de Calhanoglu (1-0) fue suficiente para superar a un Barcelona que sigue sin brillar en Europa
- El conjunto blaugrana pidió un penalti por mano de Dumfries en el descuento
El Barcelona se complica la vida en esta Champions League. Los blaugranas cayeron estrepitosamente en San Siro (1-0) gracias al tanto de Calhanoglu en el descuento de la primera mitad. El turco probó fortuna desde fuera del área y su disparo se colaba pegado al palo de la portería defendida por Ter Stegen.
Los pupilos de Xavi fueron superiores, pero los italianos aprovecharon las contras para matar a un equipo que le sigue costando un mundo en partidos de este calibre. Los 'Nerazzurris' venían con las bajas de Brozovic y Lukaku, pero tiraron de experiencia para dormir el partido ante un inoperante Barcelona en ataque.
Dembele envió la pelota a la madera a los veinte de la segunda parte y Pedri vio como su gol era anulado por una mano previa de Ansu. En el descuento, el Barcelona pidió un penalti claro por mano de Dumfries, pero el colegiado decidió no pitarlo al interpretar que era un posición natural del brazo. Este resultado retiene al Barcelona en la última posición de su grupo y los partidos posteriores serán finales para poder estar en la siguiente fase.
Calhanoglu golpea en el descuento
El crucial partido de los blaugranas se inició de forma esperada. El Barcelona tenía la posesión absoluta de balón ante un Inter de Milán que llegaba a este duelo con bajas sensibles como las de Lukaku y Brozovic. Los pupilos de Xavi basculaban la pelota en ambos carriles ante la atenta mirada de los italianos que se defendían con uñas y dientes en bloque bajo.
No obstante, la primera del partido fue para los locales. Pérdida de Marcos Alonso en campo contrario y el equipo de San Siro monta la contra con un disparo de Calhanoglu que obliga a Ter Stegen a enviar a saque de esquina. Precisamente el Barcelona tuvo la suya desde el córner, pero el cabezazo de Lewandowski se fue demasiado desviado.
Christensen también tuvo su ocasión en un centro lateral desde la izquierda, aunque su testarazo no llevaba velocidad y se encontraba con los guantes de Onana sin mayor peligro. El Inter no se cerraba en banda y empezó a creérselo con acercamientos al área del meta alemán. Barella primero y posteriormente Dimarco probaron fortuna desde lejos, pero la zaga catalana no dejaba apenas espacios.
A los 23 minutos pudo cambiar el encuentro. Eric García tocaba el esférico con la mano en el área y el colegiado indicaba revisión en el VAR. Tras acudir al monitor, el colegiado señalaba fuera de juego en el pase previo y el Barça se libraba de sufrir la pena máxima. El líder provisional de la Liga continúo con el mismo esquema de juego y el choque bajaba las pulsaciones tras lo que había sucedido.
Los azulgranas volvían a jugar con fuego y Correa anotaba en fuera de juego tras romper a los centrales españoles en otra jugada donde los visitantes se libraban por el canto de un duro. El Barcelona se reagrupaba y Pedri comandaba cada ataque en fase ofensiva con visión de juego e inteligencia.
Y cuando parecía que el partido se marchaba al descanso en tablas, apareció Calhanoglu. El turco hizo gala de su mejor cualidad y anotaba el primero del partido desde fuera del área. Ter Stegen se estiraba, pero no era capaz de tocar ese golpeo magistral del mediocentro nerazzurri que se colaba por la derecha de la portería defendida por el alemán.
El VAR fulmina las opciones blaugranas
La segunda mitad comenzó con la misma tónica que la primera. El Barcelona seguía siendo dueño y señor del esférico, aunque el Inter continuaba con llegadas con mordiente a la contra. Christensen tuvo que abandonar el partido por una torcedura en su tobillo y entraba Pique para suplir la baja de una zona del campo repleta de lesiones para los blaugranas esta temporada.
Dembéle, que no había aparecido hasta la fecha, se encontró con el palo en la mejor de los españoles en todo el partido. El extremo se marchaba de su par y su golpeo se estrellaba contra la madera cuando tenía todo de cara para igualar el duelo a los veinte minutos.
La ocasión del francés era un presagio de lo que iba a suceder un minuto más tarde. Centro del propio Dembele al segundo palo, Onana se equivoca y en el rechace anota Pedri. El árbitro daba el gol en primera instancia, pero lo anulaba finalmente por una mano de Ansu en el salto de Onana.
El partido se terminaba y el Barcelona se estiraba intentando igualar el encuentro. Dembelé lo buscaba en banda derecha con centros medidos y Pedri incidía en pases por dentro para buscar superioridad en la punta de ataque.
En el tiempo de descuento llegaba la polémica del partido. Dumfries se elevaba para despejar un centro desde el costado derecho y el esférico golpeaba en su mano. El colegiado paraba el partido, pero finalmente no señalaba la pena máxima tras revisarlo en el VAR. El Barcelona se complica la vida y tendrá que jugar varias finales a partir de ahora para continuar en la máxima competición europea.