Francia también sabe ganar sin ser superior y con un gris Mbappé
- 'Les bleus' han vencido sin dominar la posesión, con menos pases, tiros a puerta y sin gol de la 'tortuga'
- "Francia doblega a una combativa Inglaterra y cierra el cuadro de semifinales del Mundial", por Óscar López
La selección francesa no solo ha conseguido superar 'la maldición del campeón' y la plaga de lesiones con jugadores de la talla del Balón de Oro Benzema, Nkunku, Pogba, Kanté o Lucas Hernández, sino que además se ha plantado en semifinales eliminando a uno de los favoritos, Inglaterra, sin dominar el partido, sin tener más el balón, dando menos pases, con menos tiros a puerta y con su estrella, Kylian Mbappé, haciendo el peor partido de un Mundial excelso y sin marcar, por primera vez, siendo titular.
Los chicos de Deschamps parecen estar hechos para estas citas mundiales y uno de los que mejor lo refleja es Antoine Griezmann. Tras su paso por el Barcelona, sin encontrar su mejor nivel aunque infravalorado en su rendimiento, y su vuelta al Atlético, donde está volviendo a su ser poco a poco, pero se enfunda la elástica de su país y, automáticamente, es el líder del equipo desde la media punta, el que maravilló al mundo y por el que el Barça pagó más de cien millones. Este sábado lo ha vuelto a demostrar poniendo un centro con música a la cabeza de Giroud para volver a adelantar a los galos en el 2-1.
Lo que Tchouaméni te da, Tchouaméni te lo quita
Tchouaméni se sacó un gol al cuarto de hora de juego literalmente de la nada. De hecho, la estadística avanzada le da un 2% de posibilidades de acabar en gol a su disparo (0,02 xG). Aun así, el zapatazo del centrocampista del Madrid se convierte en uno de los tantos más lejanos del torneo. Pero después cometió el penalti sobre Bukayo Saka que transformó Kane en el empate.
El exjugador del Mónaco, a pesar de cometer la infracción, ha vuelto a demostrar que puede mandar en el centro del campo de uno de los favoritos al título en un Mundial y en el campeón de la Champions League, con solo 22 años.
Theo Hernández ha heredado el puesto de lateral izquierdo titular en Francia por la lesión de su hermano, Lucas. En el partido en el que el ligamento cruzado del jugador del Bayern dijo basta, el del Milán demostró lo que podía aportar con una asistencia. En el resto del Mundial, Theo ha sido un puñal por su banda y es una amenaza constante al espacio para el equipo rival.
Theo está siendo clave en ataque, aunque en defensa no es tan solvente como su hermano y lo demostró cometiendo el segundo penalti del partido, totalmente innecesario, que pudo ser el empate de nuevo, si Harry Kane no lo hubiera mandado por encima del larguero.
Inglaterra no supo convertir el dominio en peligro
La selección de Gareth Southgate no solo ha opuesto una gran resistencia a los franceses, algo que se podía esperar, sino que le ha mirado a la cara, le ha tratado de tú a tú y le ha ganado en posesión de balón, tiros totales, a puerta, goles esperados, pases... en casi todas las estadísticas del juego ha sido superior Inglaterra. Pero no en el más importante, en el marcador el dato es 1-2.
Les costó encontrar la profundidad a los 'three lions'. Mientras en el total de pases mandaban por más de cien sobre Francia, con 503 de los ingleses y 378 de los galos, en el último tercio de campo la superioridad solo es de tres pases, 132 a 129.
Otro dato que refleja esa falta de verticalidad es que los cinco jugadores con más pases de Inglaterra son los dos centrales, Harry Maguire y John Stones, el mediocentro defensivo, Declan Rice, y los dos laterales, Luke Shaw y Kyle Walker. Todos esos más que el que más ha completado de Francia, Antoine Griezmann.
Probablemente, esto no se deba a una incapacidad de los ingleses para ser profundos, sino que trataban protegerse a través de la posesión y de pases de seguridad, evitar riesgos y posibles pérdidas que se convirtieran en contraataques franceses. Un plan parecido al de España contra Marruecos que ha terminado con el mismo mal resultado.
Las posiciones medias de los dos equipos nos transmiten que los dos nueves participaron en la creación, aunque de maneras diferentes, el clásico pivote de Giroud, recibiendo de espaldas y Kane es más un mediapunta que ayuda a generar juego.
Los dos conjuntos tuvieron a un lateral izquierdo más profundo que el derecho y eso lo intentó aprovechar Inglaterra lanzando a Henderson mucho más alto de lo habitual y juntándolo con Sterling, buscando la espalda de Theo.
También les fue esquiva la portería rival a los británicos. En el total de lanzamientos doblan a Francia y le sacan ocho (16 a 8), pero a puerta solo fueron tres más de los ingleses (8 a 5), aunque hay que recordar que el cabezazo de Stones al palo no cuenta como portería ni el penalti a las nubes de Kane, las dos ocasiones más claras de los británicos. Por eso, en goles esperados también están por encima, 2,32 para los ingleses por 1,19 para Francia.
El peor Mbappé
Si comparamos el último partido de Kylian Mbappé con el de estos cuartos de final contra Inglaterra, la estadística habla de que Southgate consiguió con su planteamiento y con un gran Kyle Walker, secar a la gran estrella gala y el jugador más desequilibrante de este Mundial, hasta ahora, y el pichichi.
Mbappé tiró solo una vez y se fue fuera, ante Dinamarca fueron cinco, tres entre los tres palos y dos goles. En este partido solo generó una ocasión y en el anterior dos. También hizo seis pases menos en el último tercio (15 por 21), ningún centro intentado por cinco en aquel y dos regates completados frente a los cinco que consiguió ante los daneses. Es cierto que la exigencia es muy alta, a la altura de su rendimiento, pero el partido no fue bueno.
A pesar de todos los datos favorables a Inglaterra y la pobre actuación de la estrella francesa, Kylian Mbappé, los galos se llevan el partido contra un rival duro y se plantan en semifinales donde les espera la sorprendente Marruecos. A dos pasos de la gloria y lograr lo que nadie ha conseguido, dos mundiales seguidos. Francia ha demostrado que sabe ganar a pesar de todo.